EMD/ AGENCIAS.- La represión del Ejército sirio en el noroeste del país para reprimir las protestas y para recuperar las zonas bajo control de los rebeldes ha provocado más de 250 muertos desde el lunes.
El ejército sirio ha protagonizado una "matanza de magnitud sin precedentes" en la que han muerto "más de 120 personas", informan agencias internacionales de prensa. El Ejército sirio atacó el miércoles la localidad de Kafr Eid, en la provincia de Idleb, fronteriza con Turquía, causando decenas de víctimas.
El Consejo Nacional Sirio (CNS), que agrupa a la mayoría de grupos opositores, ha pedido una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU y de la Liga Árabe a la luz de las "masacres horribles" cometidas por las fuerzas del orden.
Estas víctimas se suman al centenar que se produjeron el lunes, cuando el Ejército disparó contra soldados desertores que querían unirse a la revuelta.
La escalada de represión se produce tan solo un día antes de la llegada de una avanzadilla de la misión de observadores internacionales enviada por la Liga Árabe, dentro de su plan para detener la violencia en el país.
El presidente del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, uno de los grupos opositores, Ramy Abdul Rahman, ha calificado de "masacre" el bombardeo, este martes, de la localidad de Kafr Eid, en la zona de Yabal Zauya, fronteriza con Turquía. La operación fue ejecutada por las fuerzas sirias contra ciudadanos y activistas buscados por las autoridades que intentaron escapar a zonas rurales por miedo a ser detenidos.
La provincia de Idleb es uno de los bastiones de la oposición al régimen de Bachar al Asad en Siria y es escenario de enfrentamientos entre el ejército y soldados desertores.
Desde que comenzaran las protestas contra el régimen en marzo pasado, más de 5.000 personas han muerto por la represión gubernamental, según las cifras de Naciones Unidas.
El ejército sirio ha protagonizado una "matanza de magnitud sin precedentes" en la que han muerto "más de 120 personas", informan agencias internacionales de prensa. El Ejército sirio atacó el miércoles la localidad de Kafr Eid, en la provincia de Idleb, fronteriza con Turquía, causando decenas de víctimas.
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| AFP, Louai Beshara |
El Consejo Nacional Sirio (CNS), que agrupa a la mayoría de grupos opositores, ha pedido una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU y de la Liga Árabe a la luz de las "masacres horribles" cometidas por las fuerzas del orden.
Estas víctimas se suman al centenar que se produjeron el lunes, cuando el Ejército disparó contra soldados desertores que querían unirse a la revuelta.
La escalada de represión se produce tan solo un día antes de la llegada de una avanzadilla de la misión de observadores internacionales enviada por la Liga Árabe, dentro de su plan para detener la violencia en el país.
El presidente del Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, uno de los grupos opositores, Ramy Abdul Rahman, ha calificado de "masacre" el bombardeo, este martes, de la localidad de Kafr Eid, en la zona de Yabal Zauya, fronteriza con Turquía. La operación fue ejecutada por las fuerzas sirias contra ciudadanos y activistas buscados por las autoridades que intentaron escapar a zonas rurales por miedo a ser detenidos.
La provincia de Idleb es uno de los bastiones de la oposición al régimen de Bachar al Asad en Siria y es escenario de enfrentamientos entre el ejército y soldados desertores.
Desde que comenzaran las protestas contra el régimen en marzo pasado, más de 5.000 personas han muerto por la represión gubernamental, según las cifras de Naciones Unidas.
