OPINIÓN de Teodoro Rentería Arróyave, México.- Al maestro, Gustavo Rentería Villa, quien recibió el Premio Nacional de Locución, Medalla Luis M. Farías en la categoría de Análisis Político en Televisión. Asimismo a todos los galardonados por la Asociación Nacional de Locutores de México que preside la respetada colega, licenciada Rosalía Buaún Sánchez
Hubo un tiempo, no muy lejano, que los guatemaltecos nos consideraban a los mexicanos, en la misma dimensión de complejo de superioridad de los estadounidenses respecto de nosotros.
No dudamos que aún existan estigmas de tal índole que describan a México como el poderoso del norte; cuando menos en las relaciones entre periodistas de ambas naciones está percepción está totalmente finiquitada y existe una plena relación entre pares.
Partiendo de esos absurdos del pasado y de lo anterior descrito, es de gran transcendencia el encuentro entre el presidente, Enrique Peña Nieto y el mandatario electo de Guatemala, Jimmy Morales, después de una etapa de gravedad política y social que sufrió la hermana República del sur, que llevó al anterior presidente de la República, no sólo a renunciar sino a enfrentar en la cárcel a la justicia.
En dicha reunión, ambas mandatarios expresaron su compromiso a continuar fortaleciendo la relación bilateral, la cual es estratégica, además de revisar los proyectos conjuntos, como son la integración energética y económica, la interconexión eléctrica y la conclusión del Gasoducto México-Guatemala, mismos que promoverán la productividad y competitividad de ambas economías.
La sana vecindad que debe de existir entre los países se puso de manifiesto, después de que el mandatario mexicano felicitó al Presidente Electo por la ejemplar jornada electoral vivida el 25 de octubre pasado en Guatemala, en la que la ciudadanía le confirió esa alta responsabilidad y agregó que México apoyará a Guatemala en los programas que, en su futuro gobierno, defina como prioritarios para el desarrollo y la prosperidad conjunta.
Asimismo se impulsará aún más la complementariedad económica, el comercio y las inversiones bilaterales, así como el desarrollo de proyectos conjuntos que generen oportunidades para ambas sociedades.
El Mandatario electo de Guatemala, Jimmy Morales, quien tomará posesión de su cargo el próximo 14 de enero, y el Presidente Enrique Peña Nieto también abordaron El Proyecto Mesoamérica, un espacio político de alto nivel que articula esfuerzos de cooperación, desarrollo e integración de diez países para facilitar la gestión y ejecución de proyectos orientados a mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
Estamos de acuerdo que a los guatemaltecos y mexicanos nos hermanan la historia, el idioma, la cultura y la amistad entrañable, que se ha profundizado con el intenso diálogo político, que el mismo continúe como una alta prioridad, como lo comprometió el presidente, Peña Nieto.
Hubo un tiempo, no muy lejano, que los guatemaltecos nos consideraban a los mexicanos, en la misma dimensión de complejo de superioridad de los estadounidenses respecto de nosotros.
No dudamos que aún existan estigmas de tal índole que describan a México como el poderoso del norte; cuando menos en las relaciones entre periodistas de ambas naciones está percepción está totalmente finiquitada y existe una plena relación entre pares.
Partiendo de esos absurdos del pasado y de lo anterior descrito, es de gran transcendencia el encuentro entre el presidente, Enrique Peña Nieto y el mandatario electo de Guatemala, Jimmy Morales, después de una etapa de gravedad política y social que sufrió la hermana República del sur, que llevó al anterior presidente de la República, no sólo a renunciar sino a enfrentar en la cárcel a la justicia.
En dicha reunión, ambas mandatarios expresaron su compromiso a continuar fortaleciendo la relación bilateral, la cual es estratégica, además de revisar los proyectos conjuntos, como son la integración energética y económica, la interconexión eléctrica y la conclusión del Gasoducto México-Guatemala, mismos que promoverán la productividad y competitividad de ambas economías.
La sana vecindad que debe de existir entre los países se puso de manifiesto, después de que el mandatario mexicano felicitó al Presidente Electo por la ejemplar jornada electoral vivida el 25 de octubre pasado en Guatemala, en la que la ciudadanía le confirió esa alta responsabilidad y agregó que México apoyará a Guatemala en los programas que, en su futuro gobierno, defina como prioritarios para el desarrollo y la prosperidad conjunta.
Asimismo se impulsará aún más la complementariedad económica, el comercio y las inversiones bilaterales, así como el desarrollo de proyectos conjuntos que generen oportunidades para ambas sociedades.
El Mandatario electo de Guatemala, Jimmy Morales, quien tomará posesión de su cargo el próximo 14 de enero, y el Presidente Enrique Peña Nieto también abordaron El Proyecto Mesoamérica, un espacio político de alto nivel que articula esfuerzos de cooperación, desarrollo e integración de diez países para facilitar la gestión y ejecución de proyectos orientados a mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
Estamos de acuerdo que a los guatemaltecos y mexicanos nos hermanan la historia, el idioma, la cultura y la amistad entrañable, que se ha profundizado con el intenso diálogo político, que el mismo continúe como una alta prioridad, como lo comprometió el presidente, Peña Nieto.
