Alrededor de 1,1 millones de mujeres embarazadas en Yemen, especialmente aquellas que sufren de malnutrición, están en grave riesgo de padecer cólera, informó el Fondo de Población de la ONU (UNFPA).
La epidemia de esta enfermedad que afecta Yemen desde hace más de 3 meses ya ha cobrado la vida de 1.800 personas.
Las mujeres embarazadas y lactantes son especialmente vulnerables a padecer este mal y tienen un mayor riesgo de desarrollar complicaciones peligrosas o incluso fatales.
Además, pueden enfrentar una mayor exposición al cólera por sus funciones de cuidadoras y administradoras de los recursos del hogar y a veces no buscan atención médica cuando se enferman por esta misma razón.
“El número de casos de cólera que recibimos al día es increíble, a duras penas podemos responder. La semana pasada vino una mujer que estaba en su último mes de embarazo y sufría de extrema deshidratación. Su bebé nació anticipadamente, pero la criatura sólo sobrevivió dos días”, relató frente a un representante del Fondo la doctora Rana Farea, quien trabaja en un hospital de Sana‘a.
El UNFPA está distribuyendo kits de aseo en las zonas más afectadas por la epidemia y ha instalado clínicas móviles donde trabajan parteras y asistentes sanitarias, que comparten información sobre el cólera y ayudan a las mujeres que sufren de desnutrición.
Yemen afronta un brote de cólera que afecta a todo el país. Foto de archivo: OMS
La epidemia de esta enfermedad que afecta Yemen desde hace más de 3 meses ya ha cobrado la vida de 1.800 personas.
Las mujeres embarazadas y lactantes son especialmente vulnerables a padecer este mal y tienen un mayor riesgo de desarrollar complicaciones peligrosas o incluso fatales.
Además, pueden enfrentar una mayor exposición al cólera por sus funciones de cuidadoras y administradoras de los recursos del hogar y a veces no buscan atención médica cuando se enferman por esta misma razón.
“El número de casos de cólera que recibimos al día es increíble, a duras penas podemos responder. La semana pasada vino una mujer que estaba en su último mes de embarazo y sufría de extrema deshidratación. Su bebé nació anticipadamente, pero la criatura sólo sobrevivió dos días”, relató frente a un representante del Fondo la doctora Rana Farea, quien trabaja en un hospital de Sana‘a.
El UNFPA está distribuyendo kits de aseo en las zonas más afectadas por la epidemia y ha instalado clínicas móviles donde trabajan parteras y asistentes sanitarias, que comparten información sobre el cólera y ayudan a las mujeres que sufren de desnutrición.
