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Alejo Stivel: "Yo era un animal"



En sus días de éxito y noches de farra con Tequila, Alejo Stivel ("Alejo" como se le conocía entonces y como reaparece en su nuevo disco en solitario) dejó grabada hasta 1983 una de las páginas más gloriosas del rock en español, efervescencia que, tras décadas como productor, aspira a revivir como solista.



"Estoy más calmado y domesticado, pero no aburguesado ni apoltronado", declara en una entrevista con Efe a propósito de su vuelta con "Yo era un animal" (Warner Music), álbum que se publica este viernes con una canción del mismo nombre que, al final, ratifica esa sentencia pero en tiempo presente: "Soy un animal".

Tras probar suerte en 2011 con el álbum de versiones "Decíamos ayer", el que fuera vocalista de temas emblemáticos como "Salta" o "Rock and roll en la plaza del pueblo" debuta así con su primer disco en solitario integrado por composiciones inéditas de su puño y letra.

"Esto que siento ahora no lo sentí nunca. A pesar de tener muchos años en esto, me siento bastante principiante", asegura este argentino nacido en 1959 como Alejo Stivelberg.

Aunque Tequila se ha reunido puntualmente en dos ocasiones (la última este mismo verano junto a Ariel Rot), aquella aventura concluyó en 1983 y dio paso a una faceta como productor que vivió sus momentos más celebrados con el cambio de siglo y discos como "Dile al sol" (1998), de La Oreja de Van Gogh; "19 días y 500 noches" (1999), de Joaquín Sabina o "Sin enchufe", de M-Clan (2001).

"Lo pasé muy bien y los discos que producía funcionaban. Es cierto que a veces se hacen cosas que apetecen más y otras que, como oficio, dan más pereza. Pero no estaba agotado ni mucho menos y no descarto que vaya a volverlo a hacer, simplemente me surgieron las ganas de ser de nuevo un cantante de rock, de subirme al escenario y de grabar discos", subraya Stivel.

El resultado de ese deseo es un álbum que "en algunas canciones suena a Tequila 2.0" pero que, para su sorpresa, contiene más medios tiempos y temas románticos de los que cabía esperar.

Se mantienen, en cualquier caso, las señas de rock and roll fresco que lo hicieron conocido en sus inicios y que ha apreciado "como sedimento" en trabajos de generaciones posteriores, como Leiva, Sidonie o M-Clan, cuyos miembros han participado en este disco aportando la guitarra de Ricardo Rupérez y la voz de Carlos Tarque a los coros.

"No quería dúos, porque pretendía remarcar mi silueta bien clara, no que pareciera que me escondía detrás de algún amigo exitoso para aprovechar sus laureles", explica al respecto.

A las colaboraciones se suman dos voces femeninas poco conocidas, la de Guada Álvarez (La Loba) y la de la rapera argentina Miss Bolivia, que "empuja" hacia arriba el otro tema anticipado del álbum, "Ni una menos", sobre la violencia de género.

"Hacer pop o rock sobre ese tema me daba reparo, hasta que un día leí un comentario en Facebook que me golpeó como un misil: 'El día que te vayan a violar no te pongas minifalda'. Me dije que tenía que escribir algo, que mi género me lo pedía", rememora sobre lo que considera "un granito de arena dentro de un problema terrible".

EFE




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