Reporteros Sin Fronteras (RSF) condena la detención sin cargos en los Estados Unidos de Marzieh Hashemi, periodista con doble ciudadanía estadounidense e iraní y presentadora de informativos de Press TV, un canal de propaganda en inglés dirigido por el gobierno iraní.
Nacida en Estados Unidos como Melanie Franklin, Hashemi fue arrestada el 13 de enero al llegar al aeropuerto internacional de San Luis, en Misuri, y ahora está detenida en Washington DC. Vive en Irán desde 1982, está casada con un iraní, y trabaja para Press TV desde 2008.
El FBI se negó responder a las preguntas de Reporteros Sin Fronteras sobre el motivo de su detención, refiriendo la cuestión a la oficina de prensa del Departamento de Justicia. Tres días después del arresto, el hijo de Marzieh Hashemi, Hossein, declaró en una entrevista que ella no había sido acusada formalmente y que estaba detenida como "testigo material".
La periodista compareció ante el tribunal el 18 de enero y, según la web del IRIB World Service, se programa una segunda audiencia para el 23 de enero.
"Las autoridades judiciales de los Estados Unidos deben anunciar los cargos que planean presentar contra esta periodista", manifiesta Reza Moini, jefe de la oficina de RSF en Irán. “La opacidad que rodea a su detención es inaceptable. Los derechos fundamentales de Marzieh Hashemi deben ser garantizados".
Esta es la primera vez que Estados Unidos detiene de esta forma a un periodista que trabaja para medios iraníes. Varios periodistas con doble nacionalidad han sido detenidos en Irán y luego intercambiados por agentes de inteligencia detenidos en otros países o por rescate. Este fue el caso de Roxana Saberi y Jason Rezaian.
Estados Unidos ocupa el puesto 45, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2018 de Reporteros Sin Fronteras, mientras que Irán ocupa el puesto 164. Ver también el Informe Anual de la organización.
Nacida en Estados Unidos como Melanie Franklin, Hashemi fue arrestada el 13 de enero al llegar al aeropuerto internacional de San Luis, en Misuri, y ahora está detenida en Washington DC. Vive en Irán desde 1982, está casada con un iraní, y trabaja para Press TV desde 2008.
El FBI se negó responder a las preguntas de Reporteros Sin Fronteras sobre el motivo de su detención, refiriendo la cuestión a la oficina de prensa del Departamento de Justicia. Tres días después del arresto, el hijo de Marzieh Hashemi, Hossein, declaró en una entrevista que ella no había sido acusada formalmente y que estaba detenida como "testigo material".
La periodista compareció ante el tribunal el 18 de enero y, según la web del IRIB World Service, se programa una segunda audiencia para el 23 de enero.
"Las autoridades judiciales de los Estados Unidos deben anunciar los cargos que planean presentar contra esta periodista", manifiesta Reza Moini, jefe de la oficina de RSF en Irán. “La opacidad que rodea a su detención es inaceptable. Los derechos fundamentales de Marzieh Hashemi deben ser garantizados".
Esta es la primera vez que Estados Unidos detiene de esta forma a un periodista que trabaja para medios iraníes. Varios periodistas con doble nacionalidad han sido detenidos en Irán y luego intercambiados por agentes de inteligencia detenidos en otros países o por rescate. Este fue el caso de Roxana Saberi y Jason Rezaian.
Estados Unidos ocupa el puesto 45, entre 180 países, en la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2018 de Reporteros Sin Fronteras, mientras que Irán ocupa el puesto 164. Ver también el Informe Anual de la organización.
