Javier San Martín.- Cada vez que converso con una arqueóloga me llevo la impresión de que no hemos inventado casi nada. El mundo en el que vivimos ha evolucionado, se ha hecho más tecnológico, pero en esencia, asienta sus cimientos en la época antigua y, de alguna forma, ya estaba allí cuando las leyes romanas, más que sus legiones, dominaban el mundo Mediterráneo. Clase práctica de Arqueología de la Arquitectura que Sonia Gutiérrez imparte con colegas del Grupo de investigación en Patrimonio Construido (GPAC) la UPV/EHU