Ir al contenido principal

La realidad del ajuste fondomonetarista no se toma vacaciones

OPINIÓN de Sergio Ortiz

LA SEMANA POLÍTICA

LA POLÍTICA EN MODO ELECTORAL

POLÍTICOS EN LA PLAYA

No todos los políticos y políticas están en la playa, las sierras o haciendo huevo en cualquier otra parte. No estaría mal si descansaran al cabo de un año 2022 donde se hubieran roto el alma buscando solucionar los problemas sociales de los que ellos fueron autores o al menos cómplices. Pero no trabajaron mucho que digamos. Un ejemplo son los legisladores de ambas cámaras, con el menor número de sesiones y leyes aprobadas en muchos años. Batieron récords de bla bla bla. Cero productividad.

Horacio Rodríguez Larreta se saca fotos con la Mona Jiménez y el Chaqueño Palavicino en festivales de Córdoba, luego que tuviera que retirarse rapidito de la playa Bristol en Mar del Plata. El senador Luis Juez toma sol en Cancún. El gobernador Axel Kicillof hace campaña por la costa bonaerense, como Néstor Grindetti y otros políticos; eso sí no se mostraron el 4 de enero porque ese día hubo movilizaciones en La Feliz y otras ciudades contra el proyecto frentetodista de un mar con petroleras (Equinor, noruega; Shell, anglo-holandesa, e YPF, dizque argentina).

Ese temor al repudio popular también frunció los pantalones de candidatos menores. El gobernador Juan Schiaretti venía de reuniones con Urtubey y Rodríguez Saa, con vistas a una candidatura por el centro-derecha, e inauguró un tramo de una obra menor en Las Calles, Traslasierras. No se permitió al público asistir al lugar, por miedo a repudios por el siniestro vial protagonizado en octubre pasado por el ex titular de la Legislatura, Oscar González, que terminó con una maestra muerta y dos adolescentes gravemente heridas.

No se sabe dónde descansa Mauricio Macri, quien suele hacerlo todo el año en Europa, Qatar y la Patagonia. Es el hombre de la reposera 365. Otros se toman unas semanas en Olivos o el Calafate. Sergio Massa, en cambio, sigue activo porque así se lo reclaman dos deberes: los acuerdos con el FMI no lo dejan cerrar los ojos y su candidatura presidencial por ahora no admitida.

Esta no es una crítica exclusiva al mundo político porque los empresarios y banqueros top hacen huevo en Punta del Este, el Caribe y Europa. Y los burócratas sindicales donde sea, menos en sus camping gremiales, pues eso lo dejan para sus afiliados.

Por eso el verano hace madurar la bronca del pueblo argentino, con una Canasta Básica Total de 152.515 pesos para que una familia no sea pobre, y una Canasta Básica de Alimentos de 67.787 para no caer en la indigencia. Son dos Argentina, entre ricos, muy ricos, y pobres, muy pobres. Esa es la verdadera grieta.

Para colmo ese abismo se ahonda con las campañas electorales que ya han empezado pues varias provincias han llamado a sus comicios para abril y los candidatos ya están en campaña. Es casi lo único que saben hacer.




MILAGRO, 7 AÑOS PRESA

Esa superficialidad playera y electoralista se devora temas importantes para la información y debate público. Por ejemplo, la dureza del ajuste y nuevo endeudamiento con el FMI y otros acreedores. Otro tema, la presión que Massa y Kristalina Georgieva ejercen contra los salarios, a los que quieren ponerle un techo anticipado del 60 por ciento para el año. Un tercer asunto, la inflación: el 94,8 por ciento de 2022 mostró que no depende de la emisión monetaria y el déficit fiscal sino del poder omnímodo de los formadores de precios, léase monopolios, que remarcan casi a voluntad.

En vez de estar esos tópicos en el candelero (no es toda culpa de Clarín pues ni siquiera están en los medios públicos y afines), todo el tiempo están otros de menor significación. La tienen, como el caso de los rugbiers asesinos de Fernando Báez Sosa, pero no pueden ocupar las 24 horas de todos los canales y medios. Una digresión. No sólo saturan a todos los medios sino que carecen de un sentido de educación política y cultural, por ejemplo no cuestionan el modelo capitalista de sociedad donde los jóvenes con algún poder adquisitivo alquilan una casa, se emborrachan, golpean y matan en manada. Eso en Cuba no ocurre, porque hay socialismo. La cobertura mediática acá es en general policíaca: la sangre, los golpes, el dolor, los abogados, las eventuales condenas, etc. Al mejor estilo Crónica TV. Ahora todos los canales son como ese, con su pantalla en rojo, color sangre. De conclusiones culturales y políticas, casi nada.

Y en ese panorama era lógico que pasara casi inadvertido el séptimo aniversario de la detención de Milagro Sala, la lideresa social de la Tupac Amaru, prisionera política del gobernador radical-macrista Gerardo Morales.

Toda detención injusta es dolorosa, y ésta lo es en grado sumo, por la manipulación y guerra jurídica que Morales y la “justicia” jujeña realizaron contra Sala. ¿Delito? Esa organización social construyó viviendas, polideportivos, escuelas, piletas, comedores, bloqueras, textiles, etc, en una provincia donde la oligarquía tiene apellidos: Blaquier y Ledesma.

Massa y Alverso Fernández conservan alianzas políticas con Morales; en grado mayor el actual ministro de Economía. Esos vínculos con “el amigo Gerardo” influyeron en el ánimo del gobernador para profundizar su campaña persecutoria contra la lideresa e integrantes de la Tupac. El golpe final lo dio la Corte Suprema de Injusticia, al convalidar una pena de 13 años de cárcel emitida por la “justicia” norteña.

Tan flagrante injusticia fue invisibilizada por la mayoría de los medios. Nobleza obliga, los de propiedad de Víctor Santamaría, como Página/12 y AM 750, le dieron lugar a Milagro con reportajes, este 16 de enero. Eso abrió una ventana para que un público mayor pudiera mirar.

Y fue bueno, dentro de la tragedia, que la propia Milagro avanzara políticamente en dos sentidos. Uno, reclamó el indulto presidencial, al que antes se había resistido, pese a la propuesta de varias organizaciones, entre ellas el Partido de la Liberación (PL). Otro, denunció a Fernández como un Judas capaz de besarla cuando estuvo internada y luego traicionarla. Textual: “Alberto Fernández me mintió, me ha verseado y me siento desilusionada. Porque muchos compañeros hemos militado para tener un gobierno nacional y popular, pero hoy vemos que es más beneficiada la derecha. Le tienen miedo a una grilla de TN y una tapa de Clarín. Le tienen más respeto a ellos que a nosotros”.

Esa es la verdad y ahora los K no pueden acusarla de “trosca” que “le hace el juego al macrismo”. No. El gobernador macrista la tiene presa. Sala y otras detenidas políticas, como las cuatro mujeres mapuche y sus hijos, ya son presas políticas de este gobierno del Frente de Todos.




CINCO MENTIRAS DE MASSA

El domingo pasado se conoció la entrevista que Horacio Verbitsky le hizo en El Cohete a la Luna al ministro de Economía. De las respuestas del reporteado se deducen varias mentiras, que el entrevistador no calificó como tales; por el contrario estuvo bastante modosito con el hombre de la Embassy (¿confirmando que las relaciones del presidenciable con Cristina y La Cámpora pasan por un buen momento?).

Primera mentira, menor a esta altura del partido, es que Massa se quiso despegar de Martín Guzmán. “Yo tenía discusiones respecto de qué representaba en términos de oportunidad la pandemia para la reestructuración de la deuda argentina”, o sea que creía posible un acuerdo “mejor”. Falso. Está aplicando a full la renegociación de la deuda, firmada por Guzmán en marzo de 2022, para la que él, Massa, atrajo el voto positivo del FDT y Juntos por el Cambio siendo titular de Diputados.

Segunda mentira, Massa dijo que las metas con el FMI “son cumplibles”, pero oculta que lo son en base al duro ajuste contra los salarios, jubilaciones, gasto público, etc. Y, sobre todo, miente porque a partir de 2024, cuando haya que pagar no sólo intereses sino también el principal de la deuda, ahí será incumplible absolutamente. Porque abonar 17.000 millones de dólares anuales estará muy lejos de las nuestras posibilidades, además de injusto por tratarse de una deuda fraudulenta que este gobierno legalizó. El ministro argumentó que en 2022 el país creció más de lo que el Fondo preveía, 5,2 por ciento, pero no dijo que en 2023 el PBI apenas aumentará 1 por ciento. El último ejemplo de ajuste lo anunció la concheta Tolosa Paz, dando de baja a 154.441 planes Potenciar Trabajo.

Tercera mentira, ante la observación de HV de que hay nueva deuda con el FMI, Massa respondió: “No, no hay integración de nueva deuda. Finalmente, en el proceso de tres años da empate”. Macri endeudó por 45.000 millones de dólares y este gobierno convalidó esa deuda y la está pagando con intereses y sobrecargos. Eso no da empate en tres años y menos en los seis años a partir de 2024. Da una goleada en contra. Según la Oficina de Presupuesto del Congreso Nacional, en 2022 aumentó la deuda con el FMI en 4.374 millones de dólares y con otros organismos internacionales en 2.134 millones. ¿De qué empate habla el presidenciable?

Cuarta mentira, cuando Verbitsky le preguntó si el acuerdo no es inflacionario, el ministro lo negó: “Yo no estoy de acuerdo con que el acuerdo sea inflacionario. Quiero dejarlo claro”. El cogobierno dicta “tasas positivas de interés” y eso genera inflación; además obliga el país a ir devaluando su moneda frente al dólar, que hoy cotizó en el blue a 378 pesos, eso es inflacionario. También negó que hubiera tarifazos, que alimentan la inflación. Eso sí, lo que quiere imponer es un techo salarial del 60 por ciento para todo el año...

Quinta mentira, Massa quiso disfrazar su modelo agroextractivista exportador con tintes industriales y de valor agregado, pero en los proyectos del litio que enumeró puso de ejemplos a monopolios extranjeros como Toyota, Renault, etc. Y más allá de las palabras, la realidad indica que con las exportaciones agropecuarias y los dos “dólar soja” (ahora pueden ser tres), más el plan Gas V, los proyectos de exportación de gas y litio, etc, el modelo actual tiene muy poco de industrial y muchísimo de exportación primaria y semicolonial.

Verbitsky parece haber perdido el filo crítico de sus tiempos de “Robo para la corona”. Sino se hubiera levantado e ido, apagando cámara y grabador, dejando a Massa preguntándole ¿“táj ahí”?

Sergio Ortiz






">


ARCHIVOS

Mostrar más


OTRA INFORMACIÓN ES POSIBLE

Información internacional, derechos humanos, cultura, minorías, mujer, infancia, ecología, ciencia y comunicación

El Mercurio Digital (elmercuriodigital.es) se edita bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra información es posible




AI FREE: DIARIO LIBRE DE INTELIGENCIA ARTIFICIAL