OPINIÓN de Sergio Ortiz La plaza llena por Cristina. Hacen falta otras plazas contra el ajuste y el FMI. LA SEMANA POLÍTICA ES NECESARIO SEGUIR REPUDIANDO EL ATENTADO A CRISTINA EL ATENTADO, UNA LÍNEA DIVISORIA El atentado con una Bersa calibre 32, el jueves 1/9, contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, en la puerta de su domicilio, sigue revolviendo las aguas de la política. Es lógico, por la criminalidad de la persona detenida y de cómplices directos que podría haber tenido para ese intento de magnicidio. La Argentina, o al menos una buena mayoría, se puso de pie por la investidura de la víctima y el aprecio que le tiene. Los votos son otra cosa en esta democracia burguesa decadente: van y vienen, como el dinero, por la conveniencias, trenzas e influencia de los poderes fácticos y mediáticos. Sin ser ninguna “Santa Evita”, como muchos de sus seguidores fantasean, desde aquella noche casi fatídica se expresó el cariño de la gente – no toda y menos ahí en la concheta Re