Benito Sacaluga Rodríguez, comandante maquinista de la Armada Republicana, aseinado por Franco en Cartagena en 1939
Benito Sacaluga en un buque de la Armada Benito Sacaluga Rodríguez, fue uno de esos miembros de la Armada que se negaron a partir hacia el exilio cuando la Flota salió de Cartagena rumbo a África, tenía las manos limpias y la conciencia tranquila, solo había cumplido con su deber como militar. Tomada Cartagena por las tropas sublevadas, fue apresado y sometido a Consejo de Guerra Sumarísimo (Causa 4/39). No faltó la acusación de rebelión militar, Sacaluga estaba embarcado en el acorazado “Jaime I” como jefe de máquinas el 18 de julio de 1936, en un principio fue detenido junto al resto de oficiales por la dotación del buque en evitación de la entrega del mismo a la marina sublevada, pero su conocida y probada lealtad a la República supuso que fuera rápidamente liberado y restituido en su cargo. Junto al cargo de rebelión se le acusó de varios crímenes más, todos ellos falsos según los años y los investigadores demostrarían. Se le acusó también de haber escrito numerosos artículos, publ