OPINI脫N de Eduardo Madro帽al Pedraza
En esto, Espa帽a va mal, muy mal, no va bien como el PIB, ni, por supuesto, va muy bien como el Ibex35. Seg煤n el Instituto Nacional de Estad铆stica (INE), se han registrado, entre abril y junio de este a帽o, 4.133 ejecuciones hipotecarias sobre viviendas (paso previo para los desahucios). Si se compara con el primer trimestre se ha dado un salto muy importante, ya que han crecido un 20,5%, y respecto al mismo periodo del a帽o pasado se han elevado en un 27,8%. Habr铆a que retrotraerse al 煤ltimo trimestre de 2022 para hallar otro trimestre con m谩s de 4.000 ejecuciones hipotecarias.
Obviamente no son mayor铆a entre los desahucios. Seg煤n el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), en el primer trimestre de 2025 un 77% del total de desalojos se producen por impago del alquiler, una proporci贸n que implica una cantidad mayor que nunca hasta ahora. Pero el aumento tan fuerte por impago de hipoteca desvela que el problema de la vivienda se extiende cada vez m谩s y ya golpea a sectores sociales que estaban en proceso de adquirir una vivienda.
No s贸lo asfixia el alquiler tambi茅n la compra
El 70% de las ejecuciones hipotecarias lo son sobre viviendas habituales. Hace una d茅cada, el 70% de tales ejecuciones eran sobre segundas viviendas de los propietarios. Es decir, la nefasta consecuencia del elevado ascenso del precio de la vivienda se ampl铆a socialmente, cada vez m谩s poblaci贸n la sufre.
Un dato que lo descubre es que la mayor铆a de desahucios se dan en viviendas de segunda mano, no en las de obra nueva. Las ejecuciones hipotecarias de este segundo trimestre son sobre viviendas cuyo inicio de compra fue entre 2005 y 2008. Dos factores abusivos est谩n detr谩s.
Uno, el largo periodo de tipos altos de inter茅s junto con bajos salarios, ha generado la imposibilidad, para mucha gente, de poder hacer frente al pago de la hipoteca. Dos, el objetivo de los bancos por apoderarse de casas en un momento de alza incontrolada de precios, por lo que se quedan con las viviendas por un 70% del valor hipotecado, pero para venderlas por un 60% m谩s.
Pero el alquiler ahoga m谩s
Los desahucios por impago aumentan dolorosa e imparablemente en Espa帽a, y, sin duda, especialmente los impagos de alquiler, que acumulan la mayor铆a de los lanzamientos, el 77% actualmente. Seg煤n el INE, el precio de la vivienda ha subido un 12,2% en el primer trimestre de 2025, el mayor incremento registrado desde hace 18 a帽os, pero lo sangrante es que ya van once a帽os de subidas consecutivas, con un fuerte repunte en los 煤ltimos a帽os.
Seg煤n Eurostat, en nuestro pa铆s, de quienes viven de alquiler, un 28,1% est谩n sobreendeudados, lo que quiere decir, que destinan m谩s del 40% de lo que ingresan a pagar la renta. Esto es casi 10 puntos por encima de la media comunitaria.
En el principio estaban los fondos buitre
Los fondos y bancos buitre estadounidenses como Blackstone, Cerberus, Lone Star, CBRE y Goldman Sachs llegaron tras la crisis de 2008, cuando el colapso de su burbuja inmobiliaria, oblig贸 a los principales bancos espa帽oles con una masiva cantidad de viviendas devaluadas a deshacerse de ellas directamente o entregarlas a la Sareb. Y as铆 los fondos buitre adquirieron m谩s de 50.000 propiedades de los bancos a un precio irrisorio.
Los bancos y la Sareb vendieron a precios muy bajos. Los fondos buitres compraron. Desde entonces estos fondos y bancos dominan la vivienda espa帽ola. Y llevan vendiendo y alquilando por toda Espa帽a, con unas ganancias exorbitadas, lo que genera un constante aumento de los precios de compra y alquiler, que arrastra al resto de vendedores y arrendadores.
Un pacto de Estado por la vivienda
Es necesario dar una respuesta estructural para todo el pa铆s, un Acuerdo Nacional o Pacto de Estado por la vivienda que saque este problema del enfrentamiento y el debate pol铆tico cotidiano. Se necesita un plan integral a partir de un compromiso de m铆nimos que tenga en cuenta las demandas de la poblaci贸n y las propuestas de profesionales y organizaciones de lucha por la vivienda.
Y medidas como la creaci贸n de un parque p煤blico de vivienda social para pasar del 2,5% actual en Espa帽a al 10% de la media europea y construir 1,8 millones de viviendas sociales; imponer l铆mites a los precios del alquiler, que en ning煤n caso deber铆a superar el 33% del salario; ning煤n desahucio sin alternativa habitacional; acabar con el control de los fondos buitre y bancos sobre el mercado inmobiliario; y ayudas a los j贸venes para el acceso a la vivienda. Y crear una empresa p煤blica de vivienda.
Eduardo Madro帽al Pedraza

