Ana Tuñas Matilla. San Miguel de Bidueira (Ourense), 17 ago (EFE).- La oleada de incendios que arrasa Ourense pone de manifiesto la necesidad de revisar los protocolos de prevención y extinción de incendios para adaptarlos a la nueva realidad demográfica y climática y que urge hacerlo escuchando a sus habitantes, custodios de un territorio que saben cómo proteger. En la región están acostumbrados a convivir con los incendios, que se registran año tras año desde que alcanza la memoria porque siempre ha habido quien recurre a las quemas para limpiar el monte de vegetación y animales y pirómanos que prenden fuego por el placer de ver arder. Sin embargo, nunca antes se registraron tantos a la vez ni tan virulentos y difíciles de extinguir, no solo por la complicada orografía, carreteras estrechas plagas de curvas y la exuberante vegetación de la región, en la que apenas hay industria. Para que se hayan desbordado todas las previsiones se han juntado varios factores: las extre...