OPINI脫N de Emilio Mar铆n
La finalizaci贸n del 2011 tuvo una cuota de dramatismo, con el anuncio de la enfermedad y operaci贸n de la presidenta. Lo importante es que todo salga bien y el 24 de enero est茅 otra vez en la Rosada.
Los cultores de la argentinidad al palo dicen que los habitantes de este suelo est谩n orinados por los elefantes. Los que sospechan una mano del imperio, como Hugo Ch谩vez, deslizan una causalidad pol铆tica en esta epidemia de c谩ncer que anid贸 en mandatarios del sur.
El vocero de prensa inform贸 que el pasado 22 de diciembre se le hab铆a detectado a la presidenta un carcinoma de papila en tiroides, l茅ase c谩ncer, y que ser谩 operada el 4 de enero. El circunspecto funcionario dio por sentado que veinte d铆as m谩s tarde Cristina Fern谩ndez se reincorporar谩 a sus funciones. En el inter铆n delegar谩 las funciones en Amado Boudou, sin funci贸n en un Senado en penumbras.
La extirpaci贸n de ese tumor en la tiroides es una operaci贸n relativamente sencilla que el facultativo elegido “hace de taquito”. Todas las opiniones coinciden en que el riesgo es realmente muy bajo.
En su primera aparici贸n tras el anuncio de la enfermedad, en un acto donde comparti贸 con 16 gobernadores y el vice de Tierra de Fuego, se vio a la presidenta de muy buen 谩nimo. Hasta sus m谩s furiosos detractores deber谩n convenir que es una mujer de agallas, porque esta mala noticia que se le cruz贸 en su camino antes de la Navidad se sum贸 al fallecimiento de su marido.
Hay que tener entereza f铆sica y sobre todo espiritual para amortiguar estos golpes que da la vida sin previo aviso. Ella lo tiene. A煤n revestida con un color negro, que traduce dolor, Cristina anda por la vida proyectando colores m谩s amigables.
Varios presidentes expresaron sus mejores sentimientos a la enferma. Como suele suceder, el m谩s efusivo y cari帽oso fue Hugo Ch谩vez; el ausente, otra vez, fue Barack Obama. Los pol铆ticos tambi茅n hicieron saber de su consternaci贸n, incluso los opositores como Mauricio Macri.
En este sentido hay un avance entre el tiempo actual y el pasado, cuando los enemigos del peronismo pintaban “Viva el c谩ncer” festejando el trance de Eva Per贸n. No quiere decir que ahora no haya quienes lo piensan, pero no se atreven a tomar el pincel. Y otros de ese mismo palo expresan sentimientos m谩s cercanos a la piedad. ¿Lo sienten o es un consejo de sus asesores de imagen? Dif铆cil saberlo, pero a煤n no hay pintadas “Viva el c谩ncer”. Hasta Beatriz Sarlo parece apiadarse: “lo que le sucede despierta nuestra solidaridad y es sencillo identificarse con quien padece. ¿C贸mo no hacerlo con una mujer valerosa y sola?”.
El cronista se resiste a las teor铆as conspirativas. El c谩ncer que afect贸 o afecta a l铆deres progresistas de Sudam茅rica tendr铆a origen en c茅lulas propias de sus organismos. De todas maneras no es una locura total abrir el interrogante chavista: ¿la enfermedad no habr谩 salido de laboratorios del imperio? A煤n en caso que fuera una hip贸tesis equivocada, habla de que all铆 est谩 el verdadero eje del mal, al punto de resultar sospechoso de tama帽o acto de inhumanidad. Ser铆an mala gente y laboratorios que no descubren la vacuna contra el c谩ncer sino la forma de provocarlo en pol铆ticos d铆scolos. ”Paren el mundo que me quiero bajar”, dir铆a Mafalda.
La presidenta estuvo en todo su derecho de elegir al Hospital Austral para operarse. N茅stor Kirchner opt贸 por el estatal Hospital Argerich y le fue bien, como podr铆a haberle ido a ella en el Roffo, en vez del centro del “Opus Dei”.
Leyes, crisis y ajuste
El encargo de gobernar durante veinte d铆as le cae a Boudou en un momento justo por el receso del Senado, que termin贸 votando una detr谩s de otra las leyes venidas con apuro de Diputados. Algunas fueron positivas como la de Tierras y la referida al papel para diarios.
Esta 煤ltima motiv贸 una seguidilla de notas de Clarinete, Gaceta Ganadera y Perfil donde se acusaba a la presidenta de coartar la libertad de prensa, ejercer una censura cuasi dictatorial y engordar un paquete de medios oficialistas.
El listado de periodistas asesinados en nuestra regi贸n no arroja sombra de dudas sobre Argentina. Hubo 7 muertes en M茅xico, 5 en Honduras (en rigor, superaron la docena), 4 en Brasil, 3 en Per煤 y 1 en Colombia, El Salvador, Guatemala, Paraguay y Rep煤blica Dominicana.
La SIP de las patronales abonadas al poder de Washington dijo que la ley de fabricaci贸n, comercializaci贸n y distribuci贸n del papel de diarios “podr谩 ser utilizado como mecanismo de presi贸n”. Es para re铆rse. ¿Ahora no sirve a los due帽os de Papel Prensa para algo m谩s que presionar?
Aparentemente el plan gubernamental para 2012 va viento en popa, con la aprobaci贸n de esa decena de leyes importantes, incluida la de Presupuesto Nacional. Los datos de la AFIP, posteriores, engrosaron esas estad铆sticas positivas, pues informaron de un aumento de m谩s del 30 por ciento de la recaudaci贸n respecto al a帽o anterior. Y proyectaron que ese caudal ser谩 en 2012 tambi茅n superior en ese porcentaje, respecto a 2011.
Reafirmando esa perspectiva “tranqui” de la pol铆tica en el a帽o a punto de iniciarse, la jefa de Estado comparti贸 con los representantes de 17 provincias una buena noticia. Les otorg贸 a estas provincias un nuevo plazo de dos a帽os (hasta el 31 de diciembre de 2013) para empezar a pagar las cuotas de la refinanciaci贸n del Programa Federal de Desendeudamiento. Ese pasivo fue refinanciado hasta 2030, con pagos en pesos e inter茅s del 6 por ciento anual.
¿Por qu茅 s贸lo 17 provincias? ¿Por qu茅 Santa Cruz no particip贸 del evento? Respuesta: porque la provincia de los Kirchner tiene las cuentas ordenadas y una econom铆a s贸lida, sin el endeudamiento exagerado de, por ejemplo, Buenos Aires y C贸rdoba.
Ese relato es apenas una ficci贸n. La realidad mostr贸 otra cosa. El 29 de diciembre el gobernador Daniel Peralta, sostenido en su momento por N茅stor y Cristina, no pudo tratar en la Legislatura su paquete de ajuste. El “regalito de Fin de A帽o” conten铆a un aumento de diez a帽os en la edad para jubilarse, un pago en bonos a cuatro a帽os a los proveedores del Estado y una par谩lisis de las discusiones de convenios con los gremios. Los trabajadores acamparon ante la Legislatura y boicotearon la sesi贸n; Peralta orden贸 que la Polic铆a les pegara con el “palito de abollar ideolog铆as” am茅n de arrojarles gases y tirarles con balas de goma. Am茅n del saldo de una veintena de heridos y el bochorno de una sesi贸n que no fue, el peor resultado es que ante el pa铆s se evidenci贸 que las cuentas prolijas de Santa Cruz no son tales. ¿Por qu茅 lo ser铆an las dem谩s?
Apuntar al enemigo
Desde siempre, en la pol铆tica y mucho m谩s en su expresi贸n concentrada, la guerra, ha sido decisivo la buena calificaci贸n de los amigos y la definici贸n de los enemigos.
Ejemplo por la negativa: ¿ser谩 tan ingenuo o algo peor el flamante ministro de Agricultura que recibi贸 al titular de la Sociedad Rural y sali贸 con 茅l ante la prensa a bendecir un amor que no es tal? La concesi贸n oficial de permitir la exportaci贸n libre de 8 millones de toneladas de trigo explica el “nuevo” Hugo Biolcati, parecido al viejo Biolcati como una gota de agua a otra de H2O.
La presidenta ha aprobado muchas materias con notas sobresalientes. Pero desde su 煤ltima entrevista con Barack Obama en Cannes, en el G-20, viene fallando en ese an谩lisis primario. Los grandes popes de la UIA parecen ser los peronistas de la primera hora, y los sindicalistas como Hugo Moyano los enemigos de su gobierno.
En la citada reuni贸n con gobernadores, CFK peg贸 otra vez a la CGT, al asegurar: “cuando se empiezan a utilizar determinados m茅todos, una tiene la sensaci贸n de que est谩n peleando por privilegios y no por derechos”. Que los camioneros pidieran un bono de fin de a帽o de 2.500 pesos o que los estatales santacruce帽os protestaran contra el ajuste de su amigo Peralta, no encuadra en ning煤n privilegio.
En este tema la presidenta deber铆a releer la 煤ltima Carta Abierta de los intelectuales cercanos a su gobierno. Ellos criticaron la ley antiterrorista pedida por Obama y el GAFI, y defendieron el derecho al disenso que tiene Moyano. Hubo un tiempo donde Cristina enunciaba con claridad y elegancia que la democracia implica conflictos, y que eso no era el fin del mundo. De eso se trata.
Si de enemigos de Argentina se trata, habr铆a que focalizar la atenci贸n en Malvinas. Los amigos de la CELAC, como Uruguay, han dado una mano al poner de patitas en el mar a los barcos que lleguen a sus puertos con bandera de “las Falklands”. Este 4 de enero se cumplir谩 otro aniversario de esa humillante usurpaci贸n que s贸lo reconoci贸 un intervalo entre abril y junio de 1982, mal que le pese a la agreta y desmalvinizadora Sarlo.
Que las neuronas de la presidenta y su gabinete, se pongan en marcha para analizar propuestas de reclamo de soberan铆a sobre las islas. Por caso, recuperar el banco HSBC y Shell sin disparar ni un tiro ni fletar un submarino.
En otro nivel de enemistad, el Ejecutivo tendr铆a que aplicar pol铆ticas m谩s activas hacia Macri, que no se decide a aceptar los subtes y veta la ley que proteg铆a en Capital a 29 empresas recuperadas con 2.000 puestos de trabajo. Las salvas de la artiller铆a pol铆tica, no munici贸n letal, deber铆an ir hacia Londres, el puesto de comando del PRO y los monopolios, y no hacia Azopardo 802.
La finalizaci贸n del 2011 tuvo una cuota de dramatismo, con el anuncio de la enfermedad y operaci贸n de la presidenta. Lo importante es que todo salga bien y el 24 de enero est茅 otra vez en la Rosada.
Los cultores de la argentinidad al palo dicen que los habitantes de este suelo est谩n orinados por los elefantes. Los que sospechan una mano del imperio, como Hugo Ch谩vez, deslizan una causalidad pol铆tica en esta epidemia de c谩ncer que anid贸 en mandatarios del sur.
El vocero de prensa inform贸 que el pasado 22 de diciembre se le hab铆a detectado a la presidenta un carcinoma de papila en tiroides, l茅ase c谩ncer, y que ser谩 operada el 4 de enero. El circunspecto funcionario dio por sentado que veinte d铆as m谩s tarde Cristina Fern谩ndez se reincorporar谩 a sus funciones. En el inter铆n delegar谩 las funciones en Amado Boudou, sin funci贸n en un Senado en penumbras.
La extirpaci贸n de ese tumor en la tiroides es una operaci贸n relativamente sencilla que el facultativo elegido “hace de taquito”. Todas las opiniones coinciden en que el riesgo es realmente muy bajo.
En su primera aparici贸n tras el anuncio de la enfermedad, en un acto donde comparti贸 con 16 gobernadores y el vice de Tierra de Fuego, se vio a la presidenta de muy buen 谩nimo. Hasta sus m谩s furiosos detractores deber谩n convenir que es una mujer de agallas, porque esta mala noticia que se le cruz贸 en su camino antes de la Navidad se sum贸 al fallecimiento de su marido.
Hay que tener entereza f铆sica y sobre todo espiritual para amortiguar estos golpes que da la vida sin previo aviso. Ella lo tiene. A煤n revestida con un color negro, que traduce dolor, Cristina anda por la vida proyectando colores m谩s amigables.
Varios presidentes expresaron sus mejores sentimientos a la enferma. Como suele suceder, el m谩s efusivo y cari帽oso fue Hugo Ch谩vez; el ausente, otra vez, fue Barack Obama. Los pol铆ticos tambi茅n hicieron saber de su consternaci贸n, incluso los opositores como Mauricio Macri.
En este sentido hay un avance entre el tiempo actual y el pasado, cuando los enemigos del peronismo pintaban “Viva el c谩ncer” festejando el trance de Eva Per贸n. No quiere decir que ahora no haya quienes lo piensan, pero no se atreven a tomar el pincel. Y otros de ese mismo palo expresan sentimientos m谩s cercanos a la piedad. ¿Lo sienten o es un consejo de sus asesores de imagen? Dif铆cil saberlo, pero a煤n no hay pintadas “Viva el c谩ncer”. Hasta Beatriz Sarlo parece apiadarse: “lo que le sucede despierta nuestra solidaridad y es sencillo identificarse con quien padece. ¿C贸mo no hacerlo con una mujer valerosa y sola?”.
El cronista se resiste a las teor铆as conspirativas. El c谩ncer que afect贸 o afecta a l铆deres progresistas de Sudam茅rica tendr铆a origen en c茅lulas propias de sus organismos. De todas maneras no es una locura total abrir el interrogante chavista: ¿la enfermedad no habr谩 salido de laboratorios del imperio? A煤n en caso que fuera una hip贸tesis equivocada, habla de que all铆 est谩 el verdadero eje del mal, al punto de resultar sospechoso de tama帽o acto de inhumanidad. Ser铆an mala gente y laboratorios que no descubren la vacuna contra el c谩ncer sino la forma de provocarlo en pol铆ticos d铆scolos. ”Paren el mundo que me quiero bajar”, dir铆a Mafalda.
La presidenta estuvo en todo su derecho de elegir al Hospital Austral para operarse. N茅stor Kirchner opt贸 por el estatal Hospital Argerich y le fue bien, como podr铆a haberle ido a ella en el Roffo, en vez del centro del “Opus Dei”.
Leyes, crisis y ajuste
El encargo de gobernar durante veinte d铆as le cae a Boudou en un momento justo por el receso del Senado, que termin贸 votando una detr谩s de otra las leyes venidas con apuro de Diputados. Algunas fueron positivas como la de Tierras y la referida al papel para diarios.
Esta 煤ltima motiv贸 una seguidilla de notas de Clarinete, Gaceta Ganadera y Perfil donde se acusaba a la presidenta de coartar la libertad de prensa, ejercer una censura cuasi dictatorial y engordar un paquete de medios oficialistas.
El listado de periodistas asesinados en nuestra regi贸n no arroja sombra de dudas sobre Argentina. Hubo 7 muertes en M茅xico, 5 en Honduras (en rigor, superaron la docena), 4 en Brasil, 3 en Per煤 y 1 en Colombia, El Salvador, Guatemala, Paraguay y Rep煤blica Dominicana.
La SIP de las patronales abonadas al poder de Washington dijo que la ley de fabricaci贸n, comercializaci贸n y distribuci贸n del papel de diarios “podr谩 ser utilizado como mecanismo de presi贸n”. Es para re铆rse. ¿Ahora no sirve a los due帽os de Papel Prensa para algo m谩s que presionar?
Aparentemente el plan gubernamental para 2012 va viento en popa, con la aprobaci贸n de esa decena de leyes importantes, incluida la de Presupuesto Nacional. Los datos de la AFIP, posteriores, engrosaron esas estad铆sticas positivas, pues informaron de un aumento de m谩s del 30 por ciento de la recaudaci贸n respecto al a帽o anterior. Y proyectaron que ese caudal ser谩 en 2012 tambi茅n superior en ese porcentaje, respecto a 2011.
Reafirmando esa perspectiva “tranqui” de la pol铆tica en el a帽o a punto de iniciarse, la jefa de Estado comparti贸 con los representantes de 17 provincias una buena noticia. Les otorg贸 a estas provincias un nuevo plazo de dos a帽os (hasta el 31 de diciembre de 2013) para empezar a pagar las cuotas de la refinanciaci贸n del Programa Federal de Desendeudamiento. Ese pasivo fue refinanciado hasta 2030, con pagos en pesos e inter茅s del 6 por ciento anual.
¿Por qu茅 s贸lo 17 provincias? ¿Por qu茅 Santa Cruz no particip贸 del evento? Respuesta: porque la provincia de los Kirchner tiene las cuentas ordenadas y una econom铆a s贸lida, sin el endeudamiento exagerado de, por ejemplo, Buenos Aires y C贸rdoba.
Ese relato es apenas una ficci贸n. La realidad mostr贸 otra cosa. El 29 de diciembre el gobernador Daniel Peralta, sostenido en su momento por N茅stor y Cristina, no pudo tratar en la Legislatura su paquete de ajuste. El “regalito de Fin de A帽o” conten铆a un aumento de diez a帽os en la edad para jubilarse, un pago en bonos a cuatro a帽os a los proveedores del Estado y una par谩lisis de las discusiones de convenios con los gremios. Los trabajadores acamparon ante la Legislatura y boicotearon la sesi贸n; Peralta orden贸 que la Polic铆a les pegara con el “palito de abollar ideolog铆as” am茅n de arrojarles gases y tirarles con balas de goma. Am茅n del saldo de una veintena de heridos y el bochorno de una sesi贸n que no fue, el peor resultado es que ante el pa铆s se evidenci贸 que las cuentas prolijas de Santa Cruz no son tales. ¿Por qu茅 lo ser铆an las dem谩s?
Apuntar al enemigo
Desde siempre, en la pol铆tica y mucho m谩s en su expresi贸n concentrada, la guerra, ha sido decisivo la buena calificaci贸n de los amigos y la definici贸n de los enemigos.
Ejemplo por la negativa: ¿ser谩 tan ingenuo o algo peor el flamante ministro de Agricultura que recibi贸 al titular de la Sociedad Rural y sali贸 con 茅l ante la prensa a bendecir un amor que no es tal? La concesi贸n oficial de permitir la exportaci贸n libre de 8 millones de toneladas de trigo explica el “nuevo” Hugo Biolcati, parecido al viejo Biolcati como una gota de agua a otra de H2O.
La presidenta ha aprobado muchas materias con notas sobresalientes. Pero desde su 煤ltima entrevista con Barack Obama en Cannes, en el G-20, viene fallando en ese an谩lisis primario. Los grandes popes de la UIA parecen ser los peronistas de la primera hora, y los sindicalistas como Hugo Moyano los enemigos de su gobierno.
En la citada reuni贸n con gobernadores, CFK peg贸 otra vez a la CGT, al asegurar: “cuando se empiezan a utilizar determinados m茅todos, una tiene la sensaci贸n de que est谩n peleando por privilegios y no por derechos”. Que los camioneros pidieran un bono de fin de a帽o de 2.500 pesos o que los estatales santacruce帽os protestaran contra el ajuste de su amigo Peralta, no encuadra en ning煤n privilegio.
En este tema la presidenta deber铆a releer la 煤ltima Carta Abierta de los intelectuales cercanos a su gobierno. Ellos criticaron la ley antiterrorista pedida por Obama y el GAFI, y defendieron el derecho al disenso que tiene Moyano. Hubo un tiempo donde Cristina enunciaba con claridad y elegancia que la democracia implica conflictos, y que eso no era el fin del mundo. De eso se trata.
Si de enemigos de Argentina se trata, habr铆a que focalizar la atenci贸n en Malvinas. Los amigos de la CELAC, como Uruguay, han dado una mano al poner de patitas en el mar a los barcos que lleguen a sus puertos con bandera de “las Falklands”. Este 4 de enero se cumplir谩 otro aniversario de esa humillante usurpaci贸n que s贸lo reconoci贸 un intervalo entre abril y junio de 1982, mal que le pese a la agreta y desmalvinizadora Sarlo.
Que las neuronas de la presidenta y su gabinete, se pongan en marcha para analizar propuestas de reclamo de soberan铆a sobre las islas. Por caso, recuperar el banco HSBC y Shell sin disparar ni un tiro ni fletar un submarino.
En otro nivel de enemistad, el Ejecutivo tendr铆a que aplicar pol铆ticas m谩s activas hacia Macri, que no se decide a aceptar los subtes y veta la ley que proteg铆a en Capital a 29 empresas recuperadas con 2.000 puestos de trabajo. Las salvas de la artiller铆a pol铆tica, no munici贸n letal, deber铆an ir hacia Londres, el puesto de comando del PRO y los monopolios, y no hacia Azopardo 802.