OPINI脫N de Xavier Ca帽o Tamayo.- El domingo 17 de junio, desembarcaron en el puerto de Valencia los primeros refugiados que hab铆an deambulado por el Mediterr谩neo durante d铆as en el buque de rescate Aquarius. Pudieron hacerlo porque una de las primera decisiones de Pedro S谩nchez como Presidente del Gobierno fue dar la orden de acoger en el “puerto seguro de Valencia” a las 629 personas refugiadas de ese buque, el barco rechazado por el xen贸fobo nuevo gobierno de Italia. El Gobierno de Malta tambi茅n hab铆a cerrado sus puertos a esos migrantes.
Con esa decisis贸n, m谩s el anuncio de que en pocas semanas se restaura la sanidad universal (que el PP se carg贸 vulnerando el derecho humano de los migrantes a la sanidad p煤blica), S谩nchez ha puesto la gesti贸n de la inmigraci贸n como una de sus prioridades. Adem谩s, su ministro de Interior, Grande-Marlaska, ha dicho que eliminara las peligrosas concertinas (peque帽as piezas de metal afilado) de las alambradas de las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla.
El alcalde de Valencia, Joan Rib贸, hab铆a ofrecido la ciudad para acoger a los refugiados del Aquarius, el barco de rescate de SOS Mediterr谩neo, prestando atenci贸n sanitaria a esas personas, asesor铆a jur铆dica y laboral, alojamiento, escolarizaci贸n y otras ayudas b谩sicas.
La crisis de refugiados es centenaria
Mientras la ciudad de Valencia y el gobierno de Espa帽a muestran su solidaridad con los refugiados, el ultraderechista ministro italiano de Interior, Matteo Salvini, expresaba su rechazable xenofobia al proclamar “stop a la invasi贸n”. Antes, el reaccionario gobierno italiano hab铆a ordenado cerrar todos los puertos al buque de salvamento Aquarius. Los xen贸fobos italianos de la Liga Norte ganaron las elecciones con un discurso alarmista y falso contra la inmigraci贸n y han formado gobierno con el dif铆cilmente calificable movimiento Cinco Estrellas.
La oleada de refugiados a Europa tiene su origen en los conflictos armados de Oriente Medio (hoy sobre todo en Siria) y tambi茅n en los de 脕frica. Conflictos b茅licos inacabables a los que Europa no es ajena ni en los que tampoco es inocente. Una crisis cuyo origen se remonta al 16 de mayo de 1916, fecha del acuerdo Sykes-Picot, altos funcionarios de los gobiernos de Reino Unido y Francia, para repartirse los territorios 谩rabes tras la derrota y hundimiento del Imperio Otomano, acuerdo que es ra铆z de casi todos los males actuales de la regi贸n 谩rabe.
La crisis de refugiados es muy grave, pero los dirigentes europeos, ni caso. “No es responsabilidad nuestra que las personas decidan huir ni de que lo hagan en condiciones precarias e inestables embarcaciones” fue la miserable declaraci贸n de Zoido, anterior ministro de Interior del Partido Popular. Una m谩s de las vergonzosas declaraciones sobre refugiados en la hip贸crita Europa. A frases de semejante jaez suelen a帽adir que no se trata de salvar a refugiados en el mar sino de actuar en los pa铆ses de origen para que no tengan que huir. Lo malo e hip贸crita es que la Uni贸n Euopea no ha hecho nada ni ha manifestado la menor voluntad pol铆tica de acabar con la guerra de Siria, por ejemplo. Ni tampoco ha ayudado a los pa铆ses de donde marchan los migrantes por pobreza o amenazas graves. Lo dicen, pero jam谩s ha habido la menor propuesta concreta de desarrollo econ贸mico y social en esas tierras.
La Convenci贸n de Ginebra obliga
Lo que el conservador ex-ministro de Interior anterior no tuvo en cuenta fue que el gobierno de Espa帽a, que firm贸 y ratific贸 la Convenci贸n de Ginebra, tiene la obligaci贸n de acoger refugiados, de ayudar a quienes huyen de sus pa铆ses en guerra o por sufrir persecuci贸n por etnia, religi贸n, opini贸n pol铆tica u orientaci贸n sexual. La Convenci贸n de Ginebra es un tratado internacional que compromete a los estados firmantes a proteger a toda persona que huye de su pa铆s por las razones expuestas.
Al final de la segunda guerra mundial, hab铆a millones de refugiados en una Europa destrozada . En 1954, la ONU defini贸 quienes eran refugiados y en 1967 se ampli贸 la definici贸n para que el estatuto del refugiado fuera universal y no solo europeo. Seg煤n esa Convenci贸n, refugiado es la persona que sale de su pa铆s de origen por riesgos y peligros reales y al que no puede regresar por temor fundado a ser perseguido, sometido a torturas o asesinado. Hoy, la mayor铆a de refugiados huyen de las guerras de Siria, Eritrea, Sud谩n, Afganist谩n, Irak y diez conflictos armados m谩s en los que mueren cada a帽o m谩s de 10.000 personas en cada uno y la mayor铆a son civiles.
Una Europa que averg眉enza
La Convenci贸n de los refugiados sigue vigente en todo el mundo, pero es ignorada por la Uni贸n Europea. Y as铆, Eslovaquia solo acepta refugiados de seg煤n que religi贸n. Macedonia utiliza gases y granadas contra los miles que cruzan su territorio para llegar a otros pa铆ses. Francia y Reino Unido quieren sellar el canal de la Mancha. En Hungr铆a la polic铆a dispara gases lacrim贸genos contra los refugiados y ha levantado una alambrada con cuchillas en la frontera con Serbia. Y en las islas griegas, decenas de miles de refugiados sirios soportan inaceptables condiciones de miseria. Adem谩s, Amnist铆a Internacional denunci贸 el cierre de la frontera meridional de Macedonia con Grecia, cierre que dej贸 atrapados 4.000 refugiados contra los que la polic铆a militar macedonia dispar贸 granadas paralizantes.
¿Qu茅 Europa es 茅sta?
En medio del vergonzoso espect谩culo de los pa铆ses miembros de la Uni贸n Europea regateando el n煤mero de refugiados que estaban dipuestos a acoger, m谩s la aparici贸n de gobiernos xen贸fobos y fascistoides, como el italiano, polaco o h煤ngaro, no cesan las muertes de refugiados en el mar. Al inicio de esta primavera, m谩s de 500 refugiados hab铆an perdido la vida en el Mediterr谩neo y desde 2014 han muerto en ese mar m谩s de 14.000 personas que hu铆an para salvar la vida.
Las llegadas de refugiados en embarcaciones de todo tipo a las costas espa帽olas no ha cesado durante el pasado fin de semana. Los equipos de rescate han salvado la vida de 1.290 personas desde el pasado viernes, pero cuatro personas no lograron cruzar el estrecho. Salvamento Mar铆timo mantiene la b煤squeda de 43 personas desaparecidas en el mar de Albor谩n tras hundirse la patera en la que se dirig铆an a las costas de Almer铆a. S贸lo cuatro ocupantes han podido ser rescatados con vida cerca de los restos de la embarcaci贸n naufragada.
Los refugiados aumentan no cesan. Guerras, persecuci贸n pol铆tica, violencia y hambre provocan que seg煤n ACNUR, en los 煤ltimos a帽os y hasta mediados de 2016, m谩s de tres millones de personas hayan abandonado sus pa铆ses. M谩s de la mitad por la guerra de Siria. Otros huyen de Irak, Congo, Somalia o Sud谩n del Sur y entre todos ya suman m谩s de 68 millones. Es la mayor crisis migratoria de Europa desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Pero Europa no ha sabido o no ha querido responder al m谩s de mill贸n cien mil personas que han ido hacia sus ciudades huyendo materialmente de la pobreza, de la inseguridad, de la violencia y de la muerte. Una enorme verg眉enza para Europa.
脡sta no es una Europa que valga la pena. Con la crisis de refugiados, la Uni贸n Europea est谩 m谩s lejos que nunca de los principios y valores de los que presume, pero no cumple.
Con esa decisis贸n, m谩s el anuncio de que en pocas semanas se restaura la sanidad universal (que el PP se carg贸 vulnerando el derecho humano de los migrantes a la sanidad p煤blica), S谩nchez ha puesto la gesti贸n de la inmigraci贸n como una de sus prioridades. Adem谩s, su ministro de Interior, Grande-Marlaska, ha dicho que eliminara las peligrosas concertinas (peque帽as piezas de metal afilado) de las alambradas de las vallas fronterizas de Ceuta y Melilla.
El alcalde de Valencia, Joan Rib贸, hab铆a ofrecido la ciudad para acoger a los refugiados del Aquarius, el barco de rescate de SOS Mediterr谩neo, prestando atenci贸n sanitaria a esas personas, asesor铆a jur铆dica y laboral, alojamiento, escolarizaci贸n y otras ayudas b谩sicas.
La crisis de refugiados es centenaria
Mientras la ciudad de Valencia y el gobierno de Espa帽a muestran su solidaridad con los refugiados, el ultraderechista ministro italiano de Interior, Matteo Salvini, expresaba su rechazable xenofobia al proclamar “stop a la invasi贸n”. Antes, el reaccionario gobierno italiano hab铆a ordenado cerrar todos los puertos al buque de salvamento Aquarius. Los xen贸fobos italianos de la Liga Norte ganaron las elecciones con un discurso alarmista y falso contra la inmigraci贸n y han formado gobierno con el dif铆cilmente calificable movimiento Cinco Estrellas.
La oleada de refugiados a Europa tiene su origen en los conflictos armados de Oriente Medio (hoy sobre todo en Siria) y tambi茅n en los de 脕frica. Conflictos b茅licos inacabables a los que Europa no es ajena ni en los que tampoco es inocente. Una crisis cuyo origen se remonta al 16 de mayo de 1916, fecha del acuerdo Sykes-Picot, altos funcionarios de los gobiernos de Reino Unido y Francia, para repartirse los territorios 谩rabes tras la derrota y hundimiento del Imperio Otomano, acuerdo que es ra铆z de casi todos los males actuales de la regi贸n 谩rabe.
La crisis de refugiados es muy grave, pero los dirigentes europeos, ni caso. “No es responsabilidad nuestra que las personas decidan huir ni de que lo hagan en condiciones precarias e inestables embarcaciones” fue la miserable declaraci贸n de Zoido, anterior ministro de Interior del Partido Popular. Una m谩s de las vergonzosas declaraciones sobre refugiados en la hip贸crita Europa. A frases de semejante jaez suelen a帽adir que no se trata de salvar a refugiados en el mar sino de actuar en los pa铆ses de origen para que no tengan que huir. Lo malo e hip贸crita es que la Uni贸n Euopea no ha hecho nada ni ha manifestado la menor voluntad pol铆tica de acabar con la guerra de Siria, por ejemplo. Ni tampoco ha ayudado a los pa铆ses de donde marchan los migrantes por pobreza o amenazas graves. Lo dicen, pero jam谩s ha habido la menor propuesta concreta de desarrollo econ贸mico y social en esas tierras.
La Convenci贸n de Ginebra obliga
Lo que el conservador ex-ministro de Interior anterior no tuvo en cuenta fue que el gobierno de Espa帽a, que firm贸 y ratific贸 la Convenci贸n de Ginebra, tiene la obligaci贸n de acoger refugiados, de ayudar a quienes huyen de sus pa铆ses en guerra o por sufrir persecuci贸n por etnia, religi贸n, opini贸n pol铆tica u orientaci贸n sexual. La Convenci贸n de Ginebra es un tratado internacional que compromete a los estados firmantes a proteger a toda persona que huye de su pa铆s por las razones expuestas.
Al final de la segunda guerra mundial, hab铆a millones de refugiados en una Europa destrozada . En 1954, la ONU defini贸 quienes eran refugiados y en 1967 se ampli贸 la definici贸n para que el estatuto del refugiado fuera universal y no solo europeo. Seg煤n esa Convenci贸n, refugiado es la persona que sale de su pa铆s de origen por riesgos y peligros reales y al que no puede regresar por temor fundado a ser perseguido, sometido a torturas o asesinado. Hoy, la mayor铆a de refugiados huyen de las guerras de Siria, Eritrea, Sud谩n, Afganist谩n, Irak y diez conflictos armados m谩s en los que mueren cada a帽o m谩s de 10.000 personas en cada uno y la mayor铆a son civiles.
Una Europa que averg眉enza
La Convenci贸n de los refugiados sigue vigente en todo el mundo, pero es ignorada por la Uni贸n Europea. Y as铆, Eslovaquia solo acepta refugiados de seg煤n que religi贸n. Macedonia utiliza gases y granadas contra los miles que cruzan su territorio para llegar a otros pa铆ses. Francia y Reino Unido quieren sellar el canal de la Mancha. En Hungr铆a la polic铆a dispara gases lacrim贸genos contra los refugiados y ha levantado una alambrada con cuchillas en la frontera con Serbia. Y en las islas griegas, decenas de miles de refugiados sirios soportan inaceptables condiciones de miseria. Adem谩s, Amnist铆a Internacional denunci贸 el cierre de la frontera meridional de Macedonia con Grecia, cierre que dej贸 atrapados 4.000 refugiados contra los que la polic铆a militar macedonia dispar贸 granadas paralizantes.
¿Qu茅 Europa es 茅sta?
En medio del vergonzoso espect谩culo de los pa铆ses miembros de la Uni贸n Europea regateando el n煤mero de refugiados que estaban dipuestos a acoger, m谩s la aparici贸n de gobiernos xen贸fobos y fascistoides, como el italiano, polaco o h煤ngaro, no cesan las muertes de refugiados en el mar. Al inicio de esta primavera, m谩s de 500 refugiados hab铆an perdido la vida en el Mediterr谩neo y desde 2014 han muerto en ese mar m谩s de 14.000 personas que hu铆an para salvar la vida.
Las llegadas de refugiados en embarcaciones de todo tipo a las costas espa帽olas no ha cesado durante el pasado fin de semana. Los equipos de rescate han salvado la vida de 1.290 personas desde el pasado viernes, pero cuatro personas no lograron cruzar el estrecho. Salvamento Mar铆timo mantiene la b煤squeda de 43 personas desaparecidas en el mar de Albor谩n tras hundirse la patera en la que se dirig铆an a las costas de Almer铆a. S贸lo cuatro ocupantes han podido ser rescatados con vida cerca de los restos de la embarcaci贸n naufragada.
Los refugiados aumentan no cesan. Guerras, persecuci贸n pol铆tica, violencia y hambre provocan que seg煤n ACNUR, en los 煤ltimos a帽os y hasta mediados de 2016, m谩s de tres millones de personas hayan abandonado sus pa铆ses. M谩s de la mitad por la guerra de Siria. Otros huyen de Irak, Congo, Somalia o Sud谩n del Sur y entre todos ya suman m谩s de 68 millones. Es la mayor crisis migratoria de Europa desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Pero Europa no ha sabido o no ha querido responder al m谩s de mill贸n cien mil personas que han ido hacia sus ciudades huyendo materialmente de la pobreza, de la inseguridad, de la violencia y de la muerte. Una enorme verg眉enza para Europa.
脡sta no es una Europa que valga la pena. Con la crisis de refugiados, la Uni贸n Europea est谩 m谩s lejos que nunca de los principios y valores de los que presume, pero no cumple.