OPINI脫N de Amy Goodman y Denis Moynihan.- El presidente Donald Trump es una amenaza para la seguridad nacional de su pa铆s. Sus mentiras incitan al odio. Esta semana se han descubierto una gran cantidad de bombas dirigidas a personas y organizaciones a las que Trump difama regularmente: los Obama, los Clinton, la congresista Maxine Waters, la cadena CNN, el ex-director de la CIA John Brennan, el ex-fiscal general Eric Holder, el fil谩ntropo liberal multimillonario George Soros, el ex-vicepresidente Joe Biden y el actor Robert De Niro. Mientras Trump inventa preocupaciones en torno a la seguridad nacional para fomentar el miedo, deja pasar las verdaderas amenazas.
Tomemos como ejemplo la caravana de migrantes que parti贸 de Honduras rumbo a Estados Unidos. En un acto pol铆tico en Houston que tuvo lugar el domingo pasado, Trump la calific贸 de “un asalto a nuestro pa铆s”. Miles de personas de Honduras, Guatemala y El Salvador est谩n huyendo de la violencia, la pobreza y la desesperaci贸n, en busca de refugio y asilo en Estados Unidos y M茅xico. El lunes, en un tuit, Trump afirm贸 que “delincuentes y gente de medio oriente vienen mezclados de inc贸gnito [en la caravana]”. Cuando fue confrontado por un periodista para que presentara pruebas de sus dichos, el presidente respondi贸 muy a la ligera: “No hay pruebas de nada. No hay pruebas de nada, pero perfectamente podr铆a muy bien ser as铆”.
Una amenaza real que no conoce de fronteras es el cambio clim谩tico. El hurac谩n Michael cobr贸 impulso a trav茅s de las c谩lidas aguas del golfo de M茅xico y arremeti贸 contra el noroeste de Florida hace dos semanas. La ciudad de M茅xico Beach fue pr谩cticamente borrada del mapa. Unos 24 kil贸metros m谩s al oeste, sobre la costa, se encuentra la Base de la Fuerza A茅rea de la ciudad de Tyndall, que aloja una flota de 55 aviones de combate furtivos F-22. Antes de que el hurac谩n Michael destruyera la base, al menos 33 de estos aviones hab铆an sido llevados a un lugar seguro. Pero, como inform贸 el periodista ganador del Premio Pulitzer Dave Philipps es probable que al menos 17 de los aviones, que costaron 339 millones de d贸lares cada uno, hayan quedado abandonados y posiblemente se hayan destruido. Los cient铆ficos especializados en el clima se帽alan que, si bien no se puede culpar al cambio clim谩tico por una tormenta en particular, el calentamiento global aumenta la frecuencia e intensidad de las tormentas. El hurac谩n Michael fue el primer hurac谩n registrado de categor铆a 4 en azotar el noroeste de Florida, y estuvo entre los tres huracanes m谩s fuertes registrados en la historia estadounidense. Mientras que los informes del Pent谩gono identifican el cambio clim谩tico como una amenaza importante para la seguridad nacional en el siglo XXI, Trump lo califica de enga帽o perpetrado por China para da帽ar la econom铆a estadounidense.
“Abandonar los hechos es abandonar la libertad”, escribi贸 el historiador de Yale Timothy Snyder en su libro “On Tyranny” (“Sobre la tiran铆a”, en espa帽ol). En las 煤ltimas semanas, este concepto se vio reflejado de manera muy clara en el asesinato de Jamal Khashoggi, un columnista del peri贸dico The Washington Post que presentaba una postura cr铆tica ante la monarqu铆a saud铆. El 2 de octubre, Khashoggi entr贸 al consulado de Arabia Saud铆 en Estambul y no volvi贸 a salir. El gobierno saud铆 declar贸 falsamente que el periodista se hab铆a retirado poco despu茅s. Casi inmediatamente salieron a la luz informes de que Arabia Saud铆 hab铆a enviado a un “equipo asesino” de 15 hombres que tortur贸, mat贸 y desmembr贸 a Khashoggi en el consulado. En lugar de denunciar el asesinato inmediatamente, Trump declar贸 que iba a esperar la investigaci贸n que hiciera Arabia Saud铆 sobre s铆 misma, sin recortar las ventas r茅cord de armas al reino. Arabia Saud铆 est谩 librando una guerra en Yemen. Sus incesantes bombardeos —respaldados por Estados Unidos— han llevado al menos a la mitad de la poblaci贸n yemen铆 al borde del hambre. Naciones Unidas ha declarado la situaci贸n en Yemen como la mayor cat谩strofe humana actual en el planeta.
En medio del horror de la desaparici贸n de Khashoggi, el presidente Trump organiz贸 un acto pol铆tico en Montana donde elogi贸 a un congresista que se declar贸 culpable ante la Justicia de agredir a un reportero. En el evento de campa帽a, Trump aclam贸 al congresista Greg Gianforte y dijo: “Cualquier hombre que pueda levantar el cuerpo de alguien y dejarlo caer al piso de un golpe es mi tipo de hombre. 脡l es mi muchacho”. Durante su campa帽a de 2016, Gianforte empuj贸 y tir贸 al piso a Ben Jacobs, periodista del medio The Guardian.
Para sorpresa de muchos, en otro acto pol铆tico de esta semana, Trump se declar贸 oficialmente como nacionalista, una etiqueta asociada hist贸ricamente con la supremac铆a blanca y el nazismo. “Existe una expresi贸n que qued贸 algo en desuso: “ser nacionalista”. Se supone que no debemos usar esa palabra. ¿Pero saben lo que soy? Soy un nacionalista. ¿De acuerdo? Soy un nacionalista”.
En su af谩n de que los republicanos retengan el control de las dos c谩maras del Congreso, Trump contin煤a desatando las fuerzas oscuras, divisorias y destructivas del racismo. Todo esto ha tenido lugar durante el mes de octubre. Sumemos otra acci贸n peligrosa de Trump de esta semana: el s谩bado anunci贸 que va a retirar a Estados Unidos del Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio, firmado por Ronald Reagan y Mija铆l Gorbachov en 1987. Este tratado prohibi贸 todos los misiles de corto y mediano alcance, nucleares y convencionales. Muchos temen que esto pueda generar una nueva carrera armamentista con Rusia, desestabilizando a煤n m谩s la situaci贸n mundial.
Mientras Trump hace campa帽a, va sembrando temores de que enemigos extranjeros ataquen al pa铆s. Sin embargo, ha demostrado una y otra vez, mediante acciones y palabras, que la mayor amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos es 茅l mismo.
Tomemos como ejemplo la caravana de migrantes que parti贸 de Honduras rumbo a Estados Unidos. En un acto pol铆tico en Houston que tuvo lugar el domingo pasado, Trump la calific贸 de “un asalto a nuestro pa铆s”. Miles de personas de Honduras, Guatemala y El Salvador est谩n huyendo de la violencia, la pobreza y la desesperaci贸n, en busca de refugio y asilo en Estados Unidos y M茅xico. El lunes, en un tuit, Trump afirm贸 que “delincuentes y gente de medio oriente vienen mezclados de inc贸gnito [en la caravana]”. Cuando fue confrontado por un periodista para que presentara pruebas de sus dichos, el presidente respondi贸 muy a la ligera: “No hay pruebas de nada. No hay pruebas de nada, pero perfectamente podr铆a muy bien ser as铆”.
Una amenaza real que no conoce de fronteras es el cambio clim谩tico. El hurac谩n Michael cobr贸 impulso a trav茅s de las c谩lidas aguas del golfo de M茅xico y arremeti贸 contra el noroeste de Florida hace dos semanas. La ciudad de M茅xico Beach fue pr谩cticamente borrada del mapa. Unos 24 kil贸metros m谩s al oeste, sobre la costa, se encuentra la Base de la Fuerza A茅rea de la ciudad de Tyndall, que aloja una flota de 55 aviones de combate furtivos F-22. Antes de que el hurac谩n Michael destruyera la base, al menos 33 de estos aviones hab铆an sido llevados a un lugar seguro. Pero, como inform贸 el periodista ganador del Premio Pulitzer Dave Philipps es probable que al menos 17 de los aviones, que costaron 339 millones de d贸lares cada uno, hayan quedado abandonados y posiblemente se hayan destruido. Los cient铆ficos especializados en el clima se帽alan que, si bien no se puede culpar al cambio clim谩tico por una tormenta en particular, el calentamiento global aumenta la frecuencia e intensidad de las tormentas. El hurac谩n Michael fue el primer hurac谩n registrado de categor铆a 4 en azotar el noroeste de Florida, y estuvo entre los tres huracanes m谩s fuertes registrados en la historia estadounidense. Mientras que los informes del Pent谩gono identifican el cambio clim谩tico como una amenaza importante para la seguridad nacional en el siglo XXI, Trump lo califica de enga帽o perpetrado por China para da帽ar la econom铆a estadounidense.
“Abandonar los hechos es abandonar la libertad”, escribi贸 el historiador de Yale Timothy Snyder en su libro “On Tyranny” (“Sobre la tiran铆a”, en espa帽ol). En las 煤ltimas semanas, este concepto se vio reflejado de manera muy clara en el asesinato de Jamal Khashoggi, un columnista del peri贸dico The Washington Post que presentaba una postura cr铆tica ante la monarqu铆a saud铆. El 2 de octubre, Khashoggi entr贸 al consulado de Arabia Saud铆 en Estambul y no volvi贸 a salir. El gobierno saud铆 declar贸 falsamente que el periodista se hab铆a retirado poco despu茅s. Casi inmediatamente salieron a la luz informes de que Arabia Saud铆 hab铆a enviado a un “equipo asesino” de 15 hombres que tortur贸, mat贸 y desmembr贸 a Khashoggi en el consulado. En lugar de denunciar el asesinato inmediatamente, Trump declar贸 que iba a esperar la investigaci贸n que hiciera Arabia Saud铆 sobre s铆 misma, sin recortar las ventas r茅cord de armas al reino. Arabia Saud铆 est谩 librando una guerra en Yemen. Sus incesantes bombardeos —respaldados por Estados Unidos— han llevado al menos a la mitad de la poblaci贸n yemen铆 al borde del hambre. Naciones Unidas ha declarado la situaci贸n en Yemen como la mayor cat谩strofe humana actual en el planeta.
En medio del horror de la desaparici贸n de Khashoggi, el presidente Trump organiz贸 un acto pol铆tico en Montana donde elogi贸 a un congresista que se declar贸 culpable ante la Justicia de agredir a un reportero. En el evento de campa帽a, Trump aclam贸 al congresista Greg Gianforte y dijo: “Cualquier hombre que pueda levantar el cuerpo de alguien y dejarlo caer al piso de un golpe es mi tipo de hombre. 脡l es mi muchacho”. Durante su campa帽a de 2016, Gianforte empuj贸 y tir贸 al piso a Ben Jacobs, periodista del medio The Guardian.
Para sorpresa de muchos, en otro acto pol铆tico de esta semana, Trump se declar贸 oficialmente como nacionalista, una etiqueta asociada hist贸ricamente con la supremac铆a blanca y el nazismo. “Existe una expresi贸n que qued贸 algo en desuso: “ser nacionalista”. Se supone que no debemos usar esa palabra. ¿Pero saben lo que soy? Soy un nacionalista. ¿De acuerdo? Soy un nacionalista”.
En su af谩n de que los republicanos retengan el control de las dos c谩maras del Congreso, Trump contin煤a desatando las fuerzas oscuras, divisorias y destructivas del racismo. Todo esto ha tenido lugar durante el mes de octubre. Sumemos otra acci贸n peligrosa de Trump de esta semana: el s谩bado anunci贸 que va a retirar a Estados Unidos del Tratado de Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio, firmado por Ronald Reagan y Mija铆l Gorbachov en 1987. Este tratado prohibi贸 todos los misiles de corto y mediano alcance, nucleares y convencionales. Muchos temen que esto pueda generar una nueva carrera armamentista con Rusia, desestabilizando a煤n m谩s la situaci贸n mundial.
Mientras Trump hace campa帽a, va sembrando temores de que enemigos extranjeros ataquen al pa铆s. Sin embargo, ha demostrado una y otra vez, mediante acciones y palabras, que la mayor amenaza a la seguridad nacional de Estados Unidos es 茅l mismo.