OPINI脫N de Euclides E. Tapia C., Panam谩- Ucrania,en su momento, una pr贸spera ex rep煤blica de la antigua URSS, constituye hoy un pa铆s, donde se desarrolla unagrave crisis pol铆tica, estrechamenteentrelazada con problemas econ贸micos, que por lo impredecible de la evoluci贸n de los acontecimientos, se muestra reacia a permitir predicciones. Tal particularidad, da pie para aseverarque en general, lo que all铆 se produzca, depender谩 fundamentalmente de la actuaci贸n delas principales potencias mundiales.
Sobre el particular, cabe destacar que la quintaesencia de la posici贸n norteamericana es posible extraerla, de la entrevista concedida por el ex presidente de los Estados Unidos, Jimmy Carter, al canal de televisi贸n de la NBC, cuando asever贸 que “No creo que el presidente Obama o cualquier otra persona podr铆a haber hecho m谩s para revertir esta historia de Crimea", agregando que la unificaci贸n de Crimea a Rusia era “inminente”. A prop贸sito, Rusia insisti贸 en que la crisis ucraniana se pudo haber resuelto, si se hubiese cumplido el Acuerdo entre el presidente V. Yanukovich y los l铆deres de la oposici贸n pol铆tica, firmado el 21 de febrero con la participaci贸n de los Ministros de Relaciones Exteriores de Alemania, Francia y Polonia. Se trataba entonces de la adopci贸n de una nueva Constituci贸n, que fuese aprobada por refer茅ndum, sobre la formaci贸n de gobierno basado en 茅l.
Comoquiera que a fuerza de la velocidad de los acontecimientos, estamos ante una situaci贸n creada, que adem谩s hace imposible imaginar queEuropa,los Estados Unidos, e incluso con el concurso de Rusia, de forma unilateral; o de Europay los Estados Unidos solos, sean capaces de levantar de buenas a primeras, la econom铆a ucraniana, al igual que sacarla de los problemas de la gobernabilidad en la que est谩 inmersa. Es evidente que la compleja condici贸n que aqu铆 se presenta, exige como m铆nimo considerar una serie de medidas que atisben una luz en el t煤nel. Entre tales opciones, se presentan: la alternativa de aplazar las lecciones de mayo, de manera que se permita realizar una serie de ajustes profundos a la constituci贸n ucraniana y esta puedan responder a la realidad actual, al tiempo que no solo faciliten la eliminaci贸n de las tensiones entre la Ucrania del este y sur y Ucrania occidental, sino la peor de las consecuencias de la crisis, como ser铆a, la partici贸n del pa铆s. El problema en primer t茅rmino, requiere abordar dos cuestiones fundamentales: Uno, el reconocimiento del ruso como segunda lengua oficial y dos la transformaci贸n de la organizaci贸n estatal que valore la alternativa de la federalizaci贸n u otro tipo de organizaci贸n pol铆tica. A ello se suma el reconocimiento de la condici贸n no alineada y de status neutral del Estado ucraniano, tal como fue oficializado por la Declaraci贸n sobre la soberan铆a de Ucrania, del 16 de junio de 1990.
Por 煤ltimo, se requiere desarmar a los gruposarmados ilegalesy expulsar delasestructuras de poder delas fuerzas nacionalistas deextrema derecha del partido ”Libertad”, lo cual es acorde con laResoluci贸ndel Parlamento Europeoen 2012, toda vez que el mismo es un partido xen贸fobo, antisemita yracista.
Contrario a ello, es probable que la realizaci贸n de las elecciones presidencialesprogramadas para finales de mayo, en vez de generar estabilidad, resulten lo contrario, si las mismas no garantizan la participaci贸n en ellas, de la poblaci贸n ruso parlante, del este y sur de Ucrania. A ello se suma, la posibilidad de que Rusia no reconozca susresultados, adem谩s de abstenerse de apoyar la recuperaci贸n de laeconom铆a de Ucrania, cerrandosu mercado interno. Esta 煤ltima posibilidad, degenerar铆a en el deterioro de la situaci贸n social, conduciendo aenfrentamientosa gran escala, que abren la puerta a un conflicto internacional e interregional oeste-este. Por desgracia, en una situaci贸n como la descrita, a pesar de la reticencia de Mosc煤 a intervenir en los asuntos internos de Ucrania, la profundizaci贸n del conflicto e incapacidad para controlar el caos, la manifiesta debilidad de las instituciones y los enfrentamientos civiles; pueden conminar al presidente Putin a utilizar el mandato que recibi贸 del Consejo de la Federaci贸n, relativo a la protecci贸n de la vida y garant铆a de seguridad de los rusos y ruso parlantes que viven fuera de su pa铆s. En efecto, aunque Rusia no est茅 predispuesta a ello, por desgracia, es una opci贸n real dentro del escenario planteado, de all铆 que sea imperativo prevenir la violencia a gran escala y la guerra civil en el territorio de Ucrania, habida cuenta de que de no ser as铆, estar铆amos ante la presencia de una nueva etapa en la escalada del conflicto entre la Uni贸n Europea y Rusia, al igual que entre Rusia y los Estados Unidos.
Para evitar un escenario como el dibujado, es necesario, que Washington, Mosc煤, Bruselas y Berl铆n discutan la implementaci贸n de propuestas creativas para resolver la crisis en Ucrania, alguna de las cuales, por cierto, han sido apoyadas, incluso por el actual primer ministro de Ucrania, Arsenia Yatseniuk.
En este sentido, es apropiado suponer que en la desesperada y casi est谩tica situaci贸n en la que se encuentra la sociedad ucraniana, s贸lo la articulaci贸n de un movimiento orientado hacia una soluci贸n pac铆fica del problema, dar谩 una futura oportunidad al pueblo de Ucrania, y la comunidad internacional en su conjunto.
*Euclides E. Tapia C., Profesor Titular de Relaciones Internacionales de la Universidad de Panam谩.