MSF alerta de una crisis humanitaria en ciernes a causa de la espiral de violencia en el estado de unidad
Sud谩n del Sur. La espiral de violencia que golpea el estado de Unidad, en Sud谩n del Sur, est谩 teniendo un efecto devastador sobre la poblaci贸n civil y va a provocar una crisis humanitaria sin precedentes, afirma la organizaci贸n m茅dico-humanitaria M茅dicos Sin Fronteras (MSF).
Los equipos de MSF en Unidad est谩n recibiendo diariamente informaci贸n de extorsiones, secuestros, violaciones en masa y asesinatos, y han sido testigos de la quema de pueblos enteros y del saqueo y destrozo de cosechas. “A medida que el conflicto se intensifica, la violencia contra la poblaci贸n civil se ve incrementada”, explica la coordinadora de la emergencia de MSF Tara Newell.
“Estamos siendo testigos de niveles de violencia y brutalidad que no hab铆amos visto antes. La poblaci贸n civil est谩 siendo objetivo de forma repetida de ataques”.
El asalto de la base de MSF en Leer, en el sur de Unidad, el pasado 3 de octubre, forz贸 la evacuaci贸n del equipo y el hospital tuvo que cerrar por segunda vez desde mayo. Desde entonces, la poblaci贸n, en una situaci贸n de extrema vulnerabilidad, se ha quedado sin asistencia m茅dica, sin suministros de comida y sin ayuda humanitaria alguna.
Escondidos y al l铆mite de sus fuerzas
La violencia ha forzado a la poblaci贸n a huir de sus casas en varias ocasiones y a esconderse durante largos periodos de tiempo en los bosques y pantanos de las proximidades. La poblaci贸n no ha podido cosechar sus cultivos desde que empezaran las ofensivas en primavera y sus reservas de comida son muy escasas. Apenas est谩n sobreviviendo con lo que encuentran. Los desplazamientos continuos est谩n acabando con la resistencia de muchos que est谩n al l铆mite de sus fuerzas.
“Los pacientes de nuestras cl铆nicas m贸viles en Leer y las aldeas de alrededor nos han explicado que llevan meses viviendo en este contexto de inseguridad”, afirma Newell. “Estar en continuo movimiento, en una huida sin fin, les ha impedido cosechar sus campos. Adem谩s, el miedo constante les ha llevado a esconderse y han tenido que alimentarse a base de hojas y ra铆ces de lirios para sobrevivir”.
Los equipos de MSF comenzaron a constatar una situaci贸n de desnutrici贸n preocupante en Leer y en las comunidades de la zona en agosto y septiembre, cuando los niveles de desnutrici贸n aguda severa se estimaban entre el 28 y el 34 por ciento. Pese a que el acceso a la poblaci贸n ya resultaba muy complicado, durante los dos d铆as que los equipos de MSF pudieron realizar una exploraci贸n en materia de salud infantil, localizaron 78 ni帽os con desnutrici贸n aguda severa.
En octubre, el conflicto y la violencia se han intensificado en el sur de Unidad. La experiencia nos dice que este agravamiento habr谩 tra铆do un empeoramiento de la situaci贸n humanitaria y de la desnutrici贸n. “Sin un acceso continuo y fiable a comida y apoyo nutricional el resultado m谩s factible es que hayan aumentado los ni帽os con desnutrici贸n aguda. Es muy probable, adem谩s, que esos ni帽os que ya fueron identificados como severamente desnutridos hayan fallecido”, vaticina Newell.
Con la violencia actual, la falta de asistencia humanitaria y la incapacidad para proteger a la poblaci贸n de forma eficiente, MSF estima que la crisis humanitaria en el sur de Unidad alcanza una cota sin precedentes y puede deteriorarse a煤n m谩s. Por ello, MSF solicita de forma urgente protecci贸n para la poblaci贸n civil y un aumento del acceso seguro para las organizaciones humanitarias en el sur de Unidad.
TESTIMONIOS
Sud谩n del Sur, atrapados por la violencia en el estado de Unidad
Estos testimonios fueron recogidos en el estado de Unidad, en octubre de 2015. Por razones de seguridad, los nombres y las fuentes son confidenciales.
La poblaci贸n civil del estado de Unidad ha sido objetivo de episodios de violencia reiterados desde el inicio del conflicto en diciembre de 2013. Los pacientes han relatado a los equipos de M茅dicos Sin Fronteras (MSF) en Unidad historias alarmantes de violencia y as铆 lo cuentan quienes les atienden:
"Cada d铆a llegan desplazados al campo de protecci贸n de civiles de Bentiu. Vienen porque no les queda otra opci贸n, si se quedan en el monte o en sus aldeas, los matan".
"Las personas desplazadas son extorsionados diariamente. No tienen comida, se la han quitado toda. Las mujeres j贸venes son violadas si no tienen comida ni dinero. Y esto sucede todos los d铆as, una y otra vez".
"Las personas desplazadas que se refugian en el monte no tienen comida. Todas las reservas de alimentos han desaparecido. Una mujer, desesperada, camin贸 hasta la ciudad para conseguir comida y fue violada en el camino. Ahora est谩 paralizada por el miedo. Se ha escondido en el bosque, tiene demasiado miedo para salir de all铆 de nuevo".
"La poblaci贸n tiene que salir de los bosques donde se ocultan porque carecen de alimentos. Y no ha podido cultivar porque han estado en continuo movimiento durante d铆as y ahora es demasiado tarde”.
"Algunas han logrado conseguir veh铆culos y trasladar a varias de las mujeres que han sido violadas. Ni siquiera pod铆an caminar a causa de la violencia sexual de la que han sido v铆ctimas, apenas pod铆a moverse”.
"Les han quemado las casas. Los habitantes de las aldeas escaparon antes, si se hubieran quedado les habr铆an arrojado dentro y habr铆an muerto junto con sus pertenencias".
•elmercuriodigital•
Los equipos de MSF en Unidad est谩n recibiendo diariamente informaci贸n de extorsiones, secuestros, violaciones en masa y asesinatos, y han sido testigos de la quema de pueblos enteros y del saqueo y destrozo de cosechas. “A medida que el conflicto se intensifica, la violencia contra la poblaci贸n civil se ve incrementada”, explica la coordinadora de la emergencia de MSF Tara Newell.
Pierre-Yves Bernard/MSF |
“Estamos siendo testigos de niveles de violencia y brutalidad que no hab铆amos visto antes. La poblaci贸n civil est谩 siendo objetivo de forma repetida de ataques”.
El asalto de la base de MSF en Leer, en el sur de Unidad, el pasado 3 de octubre, forz贸 la evacuaci贸n del equipo y el hospital tuvo que cerrar por segunda vez desde mayo. Desde entonces, la poblaci贸n, en una situaci贸n de extrema vulnerabilidad, se ha quedado sin asistencia m茅dica, sin suministros de comida y sin ayuda humanitaria alguna.
Escondidos y al l铆mite de sus fuerzas
La violencia ha forzado a la poblaci贸n a huir de sus casas en varias ocasiones y a esconderse durante largos periodos de tiempo en los bosques y pantanos de las proximidades. La poblaci贸n no ha podido cosechar sus cultivos desde que empezaran las ofensivas en primavera y sus reservas de comida son muy escasas. Apenas est谩n sobreviviendo con lo que encuentran. Los desplazamientos continuos est谩n acabando con la resistencia de muchos que est谩n al l铆mite de sus fuerzas.
“Los pacientes de nuestras cl铆nicas m贸viles en Leer y las aldeas de alrededor nos han explicado que llevan meses viviendo en este contexto de inseguridad”, afirma Newell. “Estar en continuo movimiento, en una huida sin fin, les ha impedido cosechar sus campos. Adem谩s, el miedo constante les ha llevado a esconderse y han tenido que alimentarse a base de hojas y ra铆ces de lirios para sobrevivir”.
Los equipos de MSF comenzaron a constatar una situaci贸n de desnutrici贸n preocupante en Leer y en las comunidades de la zona en agosto y septiembre, cuando los niveles de desnutrici贸n aguda severa se estimaban entre el 28 y el 34 por ciento. Pese a que el acceso a la poblaci贸n ya resultaba muy complicado, durante los dos d铆as que los equipos de MSF pudieron realizar una exploraci贸n en materia de salud infantil, localizaron 78 ni帽os con desnutrici贸n aguda severa.
En octubre, el conflicto y la violencia se han intensificado en el sur de Unidad. La experiencia nos dice que este agravamiento habr谩 tra铆do un empeoramiento de la situaci贸n humanitaria y de la desnutrici贸n. “Sin un acceso continuo y fiable a comida y apoyo nutricional el resultado m谩s factible es que hayan aumentado los ni帽os con desnutrici贸n aguda. Es muy probable, adem谩s, que esos ni帽os que ya fueron identificados como severamente desnutridos hayan fallecido”, vaticina Newell.
Con la violencia actual, la falta de asistencia humanitaria y la incapacidad para proteger a la poblaci贸n de forma eficiente, MSF estima que la crisis humanitaria en el sur de Unidad alcanza una cota sin precedentes y puede deteriorarse a煤n m谩s. Por ello, MSF solicita de forma urgente protecci贸n para la poblaci贸n civil y un aumento del acceso seguro para las organizaciones humanitarias en el sur de Unidad.
TESTIMONIOS
Sud谩n del Sur, atrapados por la violencia en el estado de Unidad
Estos testimonios fueron recogidos en el estado de Unidad, en octubre de 2015. Por razones de seguridad, los nombres y las fuentes son confidenciales.
La poblaci贸n civil del estado de Unidad ha sido objetivo de episodios de violencia reiterados desde el inicio del conflicto en diciembre de 2013. Los pacientes han relatado a los equipos de M茅dicos Sin Fronteras (MSF) en Unidad historias alarmantes de violencia y as铆 lo cuentan quienes les atienden:
"Cada d铆a llegan desplazados al campo de protecci贸n de civiles de Bentiu. Vienen porque no les queda otra opci贸n, si se quedan en el monte o en sus aldeas, los matan".
"Las personas desplazadas son extorsionados diariamente. No tienen comida, se la han quitado toda. Las mujeres j贸venes son violadas si no tienen comida ni dinero. Y esto sucede todos los d铆as, una y otra vez".
"Las personas desplazadas que se refugian en el monte no tienen comida. Todas las reservas de alimentos han desaparecido. Una mujer, desesperada, camin贸 hasta la ciudad para conseguir comida y fue violada en el camino. Ahora est谩 paralizada por el miedo. Se ha escondido en el bosque, tiene demasiado miedo para salir de all铆 de nuevo".
"La poblaci贸n tiene que salir de los bosques donde se ocultan porque carecen de alimentos. Y no ha podido cultivar porque han estado en continuo movimiento durante d铆as y ahora es demasiado tarde”.
"Algunas han logrado conseguir veh铆culos y trasladar a varias de las mujeres que han sido violadas. Ni siquiera pod铆an caminar a causa de la violencia sexual de la que han sido v铆ctimas, apenas pod铆a moverse”.
"Les han quemado las casas. Los habitantes de las aldeas escaparon antes, si se hubieran quedado les habr铆an arrojado dentro y habr铆an muerto junto con sus pertenencias".
•elmercuriodigital•