OPINI脫N de Ilka Oliva Corado.- Al dominio patriarcal le es af铆n que las mujeres sintamos envidia entre nosotras, le es grato cuando nos odiamos, nos se帽alamos, cuando nos dispersamos en lugar de unirnos. Cuando estamos meti茅ndonos zancadilla para ver caer a quien creemos nuestra rival. La rivalidad entre mujeres es producto de los patrones patriarcales con los que crecemos y que est谩n en todo 谩mbito de la sociedad. Romper con eso es nuestra misi贸n de g茅nero.
No podemos dejar a las generaciones que est谩n por venir un legado de indiferencia, de rencores, de discriminaci贸n; esas ni帽as merecen crecer en una sociedad donde las mujeres se comuniquen entre ellas, donde se aplaudan los logros en lugar de apu帽alarse por la espalda. Una sociedad donde se tomen de la mano para avanzar en busca de derechos, donde puedan caminar juntas y saber que cualquier mujer en cualquier lugar del mundo ser谩 una aliada y no una enemiga.
S铆, yo s茅, son sue帽os muy grandes pero las cimas m谩s altas se logran conquistar paso a paso, ya han hecho tanto nuestras ancestras y aun no es suficiente, ¿qu茅 estamos haciendo nosotras para continuar en la construcci贸n de ese legado? ¿Qu茅 es lo que vamos a dar a cambio de esos derechos que nos dejaron nuestras antecesoras? Porque a muchas de ellas les cost贸 la vida; fueron humilladas, ultrajadas, desaparecidas para que nosotras hoy tengamos el derecho a levantar la voz, el derecho al voto. ¿No merecen las ni帽as acaso que nosotras peleemos el derecho al aborto?
Una buena forma de iniciar a romper ese esquema patriarcal que nos divide ser铆a comenzar a decirle a otras mujeres lo bien que se ven, lo lindos que le quedan esos zapatos de tal color, que su blusa le queda linda, que se expres贸 muy bien en tal ponencia, que su trabajo es excelente. Que tal falda le queda linda, que su sonrisa irradia. Que su forma de ser es contagiosa. Que su humanismo es admirable, que sus acciones invitan a la imitaci贸n. Y no hay nada de malo en decirlo, no hay nada de malo en que una mujer le diga a otra que se ve bonita, que le luce su color de pintalabios, que luce linda sin maquillaje. Eso no quiere decir absolutamente nada m谩s que eso, que luce linda y hay que decirlo. Hay que decirle a las personas que hacen bien las cosas, cuando las est谩n haciendo bien. Hay que decirles que las admiramos por su empe帽o, por su esfuerzo, por su profesionalismo. No tiene nada de malo que sea otra mujer la que se lo diga. Romper con el patr贸n de la envidia entre mujeres es vital para derrumbar el patriarcado. Y no, eso no significa que la otra mujer sea homosexual y se lo est茅 diciendo con otros fines. 脡se es el primer enganche con el que el patriarcado nos desaf铆a, dos mujeres pueden admirarse mutuamente y eso no significa absolutamente nada m谩s que eso.
¿Qu茅 tal si nos desafiamos y comenzamos hoy mismo viendo a nuestro alrededor y diciendo a las mujeres que nos rodean lo lindo que se ven, lo bien que hacen su trabajo, lo admirables que son? Costar谩 el primer d铆a, pero al tercero les prometo que ser谩 como montar en bicicleta.
Y poco a poco iremos adentr谩ndonos en la lucha de los derechos de g茅nero, y as铆 ojal谩 un d铆a sepamos todas las mujeres que no es necesario colocarse el apellido del esposo para ser alguien, para cambiar de status ante otras mujeres o ante la sociedad, que eso no nos hace m谩s importantes, al contrario nos coloca en la situaci贸n de objetos propiedad de una persona. Porque, ¿en d贸nde existe una ley com煤n, de dos dedos de frente donde el esposo pueda colocarse el apellido de la esposa o diga en p煤blicamente soy fulanito de tal, de la misma forma en que sucede con las mujeres? S铆, eso tambi茅n es yugo del patriarcado contra las mujeres.
Blog de la autora: https://cronicasdeunainquilina.com
Ilka Oliva Corado. @ilkaolivacorado
18 de septiembre de 2019, Estados Unidos.
Editorial: https://ilkaeditorial.com
No podemos dejar a las generaciones que est谩n por venir un legado de indiferencia, de rencores, de discriminaci贸n; esas ni帽as merecen crecer en una sociedad donde las mujeres se comuniquen entre ellas, donde se aplaudan los logros en lugar de apu帽alarse por la espalda. Una sociedad donde se tomen de la mano para avanzar en busca de derechos, donde puedan caminar juntas y saber que cualquier mujer en cualquier lugar del mundo ser谩 una aliada y no una enemiga.
S铆, yo s茅, son sue帽os muy grandes pero las cimas m谩s altas se logran conquistar paso a paso, ya han hecho tanto nuestras ancestras y aun no es suficiente, ¿qu茅 estamos haciendo nosotras para continuar en la construcci贸n de ese legado? ¿Qu茅 es lo que vamos a dar a cambio de esos derechos que nos dejaron nuestras antecesoras? Porque a muchas de ellas les cost贸 la vida; fueron humilladas, ultrajadas, desaparecidas para que nosotras hoy tengamos el derecho a levantar la voz, el derecho al voto. ¿No merecen las ni帽as acaso que nosotras peleemos el derecho al aborto?
Una buena forma de iniciar a romper ese esquema patriarcal que nos divide ser铆a comenzar a decirle a otras mujeres lo bien que se ven, lo lindos que le quedan esos zapatos de tal color, que su blusa le queda linda, que se expres贸 muy bien en tal ponencia, que su trabajo es excelente. Que tal falda le queda linda, que su sonrisa irradia. Que su forma de ser es contagiosa. Que su humanismo es admirable, que sus acciones invitan a la imitaci贸n. Y no hay nada de malo en decirlo, no hay nada de malo en que una mujer le diga a otra que se ve bonita, que le luce su color de pintalabios, que luce linda sin maquillaje. Eso no quiere decir absolutamente nada m谩s que eso, que luce linda y hay que decirlo. Hay que decirle a las personas que hacen bien las cosas, cuando las est谩n haciendo bien. Hay que decirles que las admiramos por su empe帽o, por su esfuerzo, por su profesionalismo. No tiene nada de malo que sea otra mujer la que se lo diga. Romper con el patr贸n de la envidia entre mujeres es vital para derrumbar el patriarcado. Y no, eso no significa que la otra mujer sea homosexual y se lo est茅 diciendo con otros fines. 脡se es el primer enganche con el que el patriarcado nos desaf铆a, dos mujeres pueden admirarse mutuamente y eso no significa absolutamente nada m谩s que eso.
¿Qu茅 tal si nos desafiamos y comenzamos hoy mismo viendo a nuestro alrededor y diciendo a las mujeres que nos rodean lo lindo que se ven, lo bien que hacen su trabajo, lo admirables que son? Costar谩 el primer d铆a, pero al tercero les prometo que ser谩 como montar en bicicleta.
Y poco a poco iremos adentr谩ndonos en la lucha de los derechos de g茅nero, y as铆 ojal谩 un d铆a sepamos todas las mujeres que no es necesario colocarse el apellido del esposo para ser alguien, para cambiar de status ante otras mujeres o ante la sociedad, que eso no nos hace m谩s importantes, al contrario nos coloca en la situaci贸n de objetos propiedad de una persona. Porque, ¿en d贸nde existe una ley com煤n, de dos dedos de frente donde el esposo pueda colocarse el apellido de la esposa o diga en p煤blicamente soy fulanito de tal, de la misma forma en que sucede con las mujeres? S铆, eso tambi茅n es yugo del patriarcado contra las mujeres.
Blog de la autora: https://cronicasdeunainquilina.com
Ilka Oliva Corado. @ilkaolivacorado
18 de septiembre de 2019, Estados Unidos.
Editorial: https://ilkaeditorial.com