La mayor铆a de espa帽oles han dado una patada a la Espa帽a que hiela el coraz贸n y congela el progreso, a la Espa帽a de Paquito el Chocolatero, que ya ni sirve pa verbenas. Con una paciencia infinita, de nuevo, ha rechazado el fascismo y a los que, pasada la l铆nea roja de la ignominia, se atrevieron a so帽ar la complacencia con aquello en forma de pactos electorales.
Sabemos que son lo mismo y ahora, m谩s. Y el PP, contaminado de su forma primigenia, se ha lucido y la ha cagado, con perd贸n. Las v铆boras del partido azul ya preparan el encumbramiento de otra candidata que no tenga fotos con narcos, del que vean m谩s tonto-a, para seguir la partida por la cosa del liberalismo sin m谩s, a la inglesa, a la forma de esos hijos de la GB que tanto han influido en c贸mo nos va. Hist贸ricamente. Para seguir el guion marcado, m谩s trucado que las cartas de casino, cuanto m谩s tontos todos, mejor. Al menos, aparentarlo porque listos para cobrar millones, lo son.
La derecha m谩s civilizada ha dicho no a los pactos con los que han traspasado esa l铆nea roja de los manifiestamente fascistas y con ello el PNV da una lecci贸n inmensa, tambi茅n, por cierto, yo creo, a la izquierda que ha tolerado de m谩s a los chabacanos.
La derechona frescachona sabe que tiene los garbanzos seguros, que sus ni帽os, yernos, hijos, nietos, copan los mejores y m谩s influyentes puestos, all谩 donde de verdad se manda. Hoy es de la mano de OPUS, que ya el Vaticano que manda ahora cuestiona y desvela como secta, ayer fue con otros, ma帽ana Dios dir谩.
Y es que hacen sus llamaditas y van a sus sectas y zas, colocaci贸n al canto, problemas resueltos: hoy por ti y ma帽ana por m铆. O sea, que ning煤n problema. Saben cu谩l es la ventanilla adecuada a la que acudir hasta para su emigrante tra铆do o contratado por su red para siervo en su casa y para que les siga la corriente y se fachetice tambi茅n y extienda la mancha.
Pero una cosa es esta: ser facha como el que m谩s y aprovechao y otra, renunciar a la minifalda, al divorcio, al fiesteo, a la p铆ldora o el aborto para su reto帽o que la cag贸; renunciar a ver las obras culturales y d谩rselas de cultivao, lo que les d茅 la gana. Otra cosa es volver al baile con “salidos”, o no poder salir de vez en cuando del armario. Ya son tambi茅n los que tienen derecho a que no les d茅 la brasa el cura de turno, salvo sea Obispo y tengan que darle de cenar en casita para preguntarle c贸mo van las prebendas que van a recibir. Tampoco renuncian a pasear por la calle tranquis sin tener que ver a sus reto帽os con el bate de beisbol abriendo cabezas, o a los “maderos” repartiendo ostias sin hache y sin consagrar.
En fin, estos pisaverde y sus esposas no renuncian a ninguna de las cuestiones que se ha trabajado la izquierda para no seguir yendo a Londres de urgencia como hicieron siempre los m谩s pudientes pero pidiendo un cr茅dito, ni a Par铆s a ver “El 煤ltimo tango”. Ni siquiera renuncian al derecho de la mujer a quemar Visa sin el permiso del marido, a abrir su tiendecita, a salir sin que le pellizque el culo un calentorro de la represi贸n que los suyos impusieron; a que su hijo, o el director de su peri贸dico no sea latigado por ser “maric贸n”, a usar t茅rminos no despreciativos como ese, y llevar di谩logo m谩s civilizado, menos cafre. Claro que hay un porcentaje de gentes de la derecha en Espa帽a, y hasta de la extrema, pero tambi茅n es cierto que le han dicho a su partido: “con esos cabestros y sus modos y sus atrasos, ya no vamos a ninguna parte, nos perdemos, nos desvelamos pero que completamente…”.
El chantaje emocional
Dicho esto, con la alegr铆a porque vayamos evolucionando poco a poco, y pasado el d铆a de gloria de ver al SOE y a los dem谩s de la 茅lite pol铆tica, celebrar el enga帽arnos otra vez, debemos ponernos serios porque esto es un suma y sigue de chantaje emocional y de chantaje de cualquier tipo.
Tenemos dos a帽os por delante para lograr meter en raz贸n, actuar, no dejarnos otra vez llevar. Porque es un suma y sigue asqueroso. Ya ha comenzado el latazo infinito, con acoso y derribo de quien lograr谩 formar gobierno: el PSOE, naturalmente, Ya ha comenzado el asco de cargar las tintas con una realidad que no toleran los que han perdido: que Espa帽a es plurinacional y que los votantes lo han explicado claramente. Cuentan pues existen; existen, luego cuentan. Y para ello no tienen que pedir permiso a ning煤n otro, ni ning煤n otro va a acabar con esta realidad machacando al pr贸jimo ni mare谩ndonos.
Se avanzar谩, s铆, por la v铆a del reconocimiento de los derechos de los pueblos, republicanos, por cierto. Adem谩s, se pactar谩 con ellos mal que pese al rey de bastos que tan mal aconsejado estuvo (¿o es que 茅l es as铆?) cuando el refer茅ndum catal谩n, y sali贸 con esas formas nada conciliadoras, bien poco a la altura de los que dicen que la monarqu铆a preserva la convivencia.
Tambi茅n si fueran listas, las “gentes” del gobierno avanzar铆an por la v铆a social: lo pendiente, los derechos humanos de los m谩s vulnerables y entre ellos, los j贸venes. Ya es hora de que se abra la ventanilla 煤nica de la no discriminaci贸n de nadie, de los que no tengan familia facha o gente de partidos que le dan las pistas y las indicaciones necesarias para beneficiarse de nuevas ayudas, pisos de protecci贸n, d贸nde pedir trabajo y lograrlo, c贸mo conducirse en los abusos. No todos estamos en el pacto del 78 y no nos vamos a seguir jodiendo.
Las ayudas y las v铆as necesarias para estar, pues somos, no pueden seguir por m谩s tiempo al albur del que tengas un cu帽ao que es un enterao, que se ha enterao en la Administraci贸n, etc. de c贸mo solicitar las ayudas que deben abrirse con urgencia, de c贸mo tener un techo, de qu茅 pasos burocr谩ticos deben dar para que se sit煤en los nuestros dentro de su pa铆s como cualquiera.
S铆, hace falta una ventanilla 煤nica que tramite los tr谩mites, que ayude, que sea transparente, que todos nos enteremos. Igual en todas y cada una de las carencias y dificultades que existen, con seguimiento y acci贸n pues ni siquiera basta con que llamemos al 061; siguen las muertes y tanto abuso, sigue tambi茅n el abuso del patr贸n, siguen las cosas muy mal.
Se ha de acabar la diversi贸n
Los compadreos con la derecha de cr铆menes a la espalda no fueron cosa de que los podemitas se echaran sus risas en la cafeter铆a del Congreso con los de VOX, que tambi茅n, y muy mal… Comenzaron antes, como demuestran las celebraciones de los cumples de la Constituci贸n (tan mal parida que es un saco de interpretaciones seg煤n convenga), tomando sindicatos y partidos su piscolabis con Mart铆n Villa, el de los asesinatos de Vitoria, que 茅l reconoce en su libro “Al servicio del Estado”. No son de ahora. Son del r茅gimen del 78 con el rey a la cabeza. Y esos compadreos los paga el PP queriendo quitar una calle ahora a Marcelino Camacho que, de cuerpo presente, su familia consinti贸 que se le persignara el rey delante del f茅retro. Muy esp铆ritu de la Transici贸n.
S铆, todos esos pactos han valido para que los mal agradecidos de la derechona sigan el acoso y viendo comunistas por todas partes a los que rematar. No parar谩n.
Y han servido tan solo para alargar la vida de la monarqu铆a borb贸nica heredera de Franco, y para vender pa铆s y para rebajar derechos. Y para que un buen n煤mero de espa帽oles que no son del OPUS ni del PCE ni pesebristas del SOE, ni tienen por qu茅 serlo, no hayan tenido en su vida una buena colocaci贸n. Han sido los inmiscuidos en el Pacto de la Transici贸n, en el 78, corresponsables y c贸mplices de a donde hemos llegado. Han sido un tap贸n enorme para el avance de la clase obrera y de nuestro futuro: j贸venes y ni帽os. Lo son. Y ya basta. La perversi贸n contaminante del r茅gimen es tal, que estoy convencida, segura, de que muchos bien intencionados no se dan cuenta de su propia transformaci贸n, que est谩n convencidos de que tienen una mayor misi贸n buena, aunque no sepan cual, que dicta el Partido, m谩s sabio, como un dios; de que no se trata solo de un enga帽o del fascismo patrio y del Sistema USA, en pinza, y de una venta del alma, de la ideolog铆a, de, a estas alturas, un dejar atr谩s a tanta gente… Un hipotecarnos. Un dejarnos en otras cunetas tras el pasado heroico que protagonizaron, y pese a que tantos de los suyos, de los nuestros, siguen en esas cunetas f铆sicas. Lo hicieran en buena intenci贸n, hoy deben rectificar, optar, sobrevivir por la 煤nica senda: estar con las bases, salir del clientelismo, no pensar tan solo en plan secta en los que comulgan con lo indigesto que proponen los turnistas, los de la Restauraci贸n borb贸nica. S铆, es hora de optar.
Se han colocado y recolocado. Han mejorado su status y los miles de gentes sin esas v铆as de acceso y tragaderas, est谩n en la calle, malamente viviendo, yendo para atr谩s. Nadie de los de arriba les-nos representa ya. Salvo las excepciones de los partidos nacionalistas a los nacionalistas. Nadie.
Las subvenciones capadoras de la raz贸n y que crean zombis obedientes; la ley de la omert谩, el silencio clamoroso y el despiste y la displicencia hacia los que ya no ven salidas en las militancias cl谩sicas, deben ser abolidos. Y en su lugar, reflexionar sobre lo que de verdad pasa y por qu茅 la gente se les aleja, por qu茅 se acaba la paciencia y cu谩l es de verdad el margen de maniobra. Deben volver al pueblo. Muchos, lo esperamos. Para volver a ellos y sumar unidad y preparar un futuro fuera de la falsedad, el cinismo, la complacencia con el mal radical.
Las celebraciones del s铆 a la guerra, los paseos del de Ucrania, el maltrato al saharaui, la subida de los precios y en particular de la energ铆a por enemistades con Rusia, con Argelia, que no estaban cual cheque en blanco aprobadas ni son queridas por una mayor铆a de espa帽oles y que no se pueden seguir avalando, con lo que tantos han roto ya completamente, estas cosas, deben acabar.
En estos 煤ltimos comicios no ha habido ya programa, solo circo. Y no sabemos si en lugar de atender a las necesidades y servicios m铆nimos que toda pol铆tica ha de contemplar, no se terminar谩 por topar con lo contrario. La duda es leg铆tima porque gato escaldado huye hasta del agua fr铆a. Y no han hecho lo debido ni siquiera cuando dec铆an c铆nicamente tras las elecciones esta clase pol铆tica: “hemos tomado nota”. Y se pasaron la nota por las narices.
Puede que, en lugar de hacer verdadera pol铆tica, qui茅n sabe, aprovechar谩n este tiempo de acoso derechoso para rebajar a煤n m谩s los derechos sociales, privatizar pensiones, lo que quede y les manden desde Bruselas; seguir vendiendo este pa铆s como han hecho, al menos en la misma proporci贸n, los fachas. Yo creo que los fachas, m谩s, pero que los falsos de izquierda no le han ido a la zaga. Y, bueno, puede que obedezcan como carneros a Bruselas y los inventos infernales tipo FMI para hundirnos un poco m谩s en el lodazal disimuladamente, con guantes de seda. Lobos con piel de cordero. Y as铆 afiancen m谩s sus puestos de forrarse futuros que ya les est谩n limpiando para que tomen posesi贸n los de las puertas giratorias.
Es as铆. Es una pena y tenemos que despertar. Tanto Pedro como Yolanda son el mismo sonriente perfil del Sistema, hasta que demuestren lo contrario con acciones contundentes, solucionadoras, que permitan vivir a los ciudadanos como ellos aceptar铆an para s铆 y los suyos como vida digna, m铆nimamente digna siquiera. La democracia, su concepto, exige gobernar para el pueblo y todos los que conforman ese pueblo, emigrantes incluidos, por supuesto. Pero incluidos con dignidad desde su llegada, no en esos campos de concentraci贸n que son los CIEs.
De momento: Son clase pol铆tica aparte de las necesidades ciudadanas m谩s elementales, que arrancan algo por los m谩rgenes convenientes al Sistema para aplacar a las fieras domadas, echarles alg煤n regalito, justificarse, y que dejan a cambio cien pelos esenciales de todos en la gatera. Son aquello que no molesta al poder real, como lo han sido otros anteriormente, desde el 78. ¿Algunas concesiones, avances? S铆, sobre todo del paro y la pobreza que avanzan barbaridad. Y si no lo ven es que solo ven a su clientela que no es lo mismo que sus votantes, que de momento tienen, pero que el chollo va acabando porque la gente no es tonta y en las municipales y auton贸micas hubo s铆ntomas…
De este pasado periodo inmediato se constata, de a帽adidura, que los anarquistas m谩s valen para hacerla del todo, de una vez: una tierra en paz y fraternal que merezca la pena, o bien para seguir imaginando positivamente 茅sta, manifest谩ndose en los r铆os y naturaleza, y dot谩ndonos a los humanos de ideas, que las tienen muy geniales porque son muy le铆dos en su mayor铆a. Pero pa gobernar con los otros que l铆a el Sistema, no sirven. Como poco y pensando bien y que no se hayan rendido, se las han colado por todas partes. Es que acord谩ndonos de la Peli “Tierra y Libertad”, la discusi贸n sobre las formas de proceder, est谩 claro que sigue en pie. Aunque los esp铆as brit谩nicos nos pintaran mal, muy mal, el escenario. Dar carta de naturaleza a los piratas, es mal papel.
As铆 las cosas, el pueblo tenemos que tener claro que los que accedan ahora a las poltronas van a seguir sin resolvernos lo esencial, si no se lo exigimos. Si no despertamos. Y que van a seguir como buenos hijos del R茅gimen, chantaje谩ndonos emocionalmente. Si se lo consentimos. Primero que si el lobo, ahora que el lobo sigue ah铆 y va a acosar, luego que otras elecciones. ¿Cu谩ndo se nos permite que se les exija algo? Nunca. Nos limitamos a ser los leones tontos domados de un circo y, a placer, el domador nos mueve mientras los que se saben los circuitos del vivir bien, o ya han adquirido el nivel de clase media o simplemente pudieran haber perdido las pelitas de las subvencioncitas y los premios y dem谩s, aplauden a rabiar y celebran la victoria y hasta hacen improvisadas loas al l铆der y a la lideresa de “la izquierda”. ¡Mira qu茅 bien! Es absolutamente agotador, aburrido, una mala pesadilla que se repite una y otra vez.
El Sistema, mientras, programa su pr贸xima revoluci贸n de 茅chate a temblar, est谩 en fiebre siempre de ideas de esas que terminan cruji茅ndonos. Es un capitalismo malo, egoc茅ntrico que tiene en la rec谩mara al vende peines optimista y al pesimista, al te贸rico del fin de la historia y al de siga la guasa, todos con sus grandes m谩steres en grandes universidades norteamericanas donde les ense帽an a manipularnos. En fin, en el pr贸ximo art铆culo intentar茅 explicar por d贸nde trabajan. Ser铆a incre铆blemente gracioso si no fuera tr谩gico. Lo importante es ir creando transformaci贸n, no acotarnos ni acogotarnos.
*Enriqueta de la Cruz es periodista, analista pol铆tica y econ贸mica; escritora, autora de las novelas “Despertando a Lenin”, “El testamento de la Liga Santa”, “Nada es lo que parece”, “Memoria Vigilada”, “El amor es de Izquierda” y de los ensayos: “C茅sar Navarro, vida y testimonio de un Francmas贸n. El hombre enamorado de la Libertad” y “Tiempos de Plomo y Ceniza”.