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"Delenda est Iglesia Cat贸lica"

OPINI脫N de Ricardo Mascheroni

(par谩frasis del dicho de Cat贸n el viejo, “Delenda Est Caratago”)

El ep铆grafe significa "La Iglesia Cat贸lica debe ser destruida".


Delenda est, en su uso actual, se refiere a algo que debe perseguirse sin descanso para su eliminaci贸n, que es coincidente con Teddy Roosevelt, quien en su visita a la Argentina en 1913, dijo: “mientras la Iglesia Cat贸lica, sea preeminente en Am茅rica Latina, nunca la podremos dominar”.

A partir de ello, se entiende la catarata de iglesias pentecostales, testigos de jehov谩, electr贸nicas y otras, que se  radicaron en estos lares, financiadas por agencias de EE.UU., hoy con miles de millones del Estado.

No hay dudas que este cambio identitario, cuenta con la adhesi贸n del Gobierno Provincial y Nacional.

En el caso de la deformada constituci贸n santafesina, por el art铆culo 3°, se elimin贸 la religi贸n cat贸lica como oficial y en el orden nacional se habla de derogar el art铆culo 2° de la Constituci贸n Nacional, que dice: "El Gobierno federal sostiene el culto cat贸lico apost贸lico romano".

La Iglesia m谩s all谩 de sus errores y horrores, siempre estuvo presente en el esp铆ritu y sentimientos del pueblo argentino, como factor de cohesi贸n e identidad nacional.

Aportando a los procesos independentistas y sociales, que configuraron al pa铆s, como insignia y bandera, elevadas por nuestros ej茅rcitos y pueblos en sus luchas. Con esta exclusi贸n se est谩 tronchando un eje enraizado en la historia, tradiciones, esencia, sentires y culturas populares. El odio a Francisco tambi茅n es indicativo de ello.

La pobre visi贸n geopol铆tica y estrat茅gica, configura una rendici贸n al mandato imperial, no dejando ver que notables l铆deres mundiales, reforzaron su alianza con las instituciones religiosas hist贸ricas y mayoritarias en sus pa铆ses.

Veamos: Put铆n, ha forjado una s贸lida uni贸n con la Iglesia Ortodoxa Rusa, para la defensa de su integridad nacional, qui茅n no s贸lo es practicante, sino que exige para la paz con Ucrania, el respeto total de dicho culto. En la India Narendra Modi, reivindica el nacionalismo hinduista como norte de su gesti贸n.

En China, Xi Jimping, mantiene un v铆nculo estrat茅gico y pol铆tico entre modernizaci贸n, militarismo y confucionismo, habiendo encarado la mayor recopilaci贸n de sus escritos en el Proyecto “Canon Confuciano”.

Los mandatarios de EE.UU. viven hablando de Dios, aunque no son practicantes.

Israel, como ejemplo nefasto, lleva adelante el exterminio en Gaza, a partir de sentirse el pueblo elegido de Dios.

Rusia, India y China han entendido, que los pueblos necesitan aferrarse a creencias espirituales y supremas, que le den cohesi贸n e integridad en su marcha hacia su propio destino.

Coincidiendo y mucho con lo afirmado por el Dr. Jorge Luis Pellegrini, en su excelente libro HUELLAS, los invasores atacan la historia nacional, su folklore, sus idiomas y sus religiones, lo que configura nuestra identidad nacional, con el argumento de la libertad de cultos, y resalta la decisi贸n de Belgrano de poner su ej茅rcito bajo la tutela de la Virgen de la Merced, a la que nombra Generala y aconseja a San Mart铆n que cuide y respete los sentimientos religiosos de la poblaci贸n y de sus tropas.

Tan es as铆, que Rusia y China enterraron la frase “La religi贸n es el opio de los pueblos” de Karl Marx.

Para los desprevenidos, digo que no tengo relaci贸n con la Iglesia Cat贸lica, ni soy su vocero, simplemente trato de ver un poco m谩s all谩 del pasajero humo del relativismo imperante, aunque pueda equivocarme.

No dejo de preguntar c贸mo tendr铆amos que denominar a Santa Fe de La Vera Cruz, en la que la I.C. tuvo mucho que ver con su existencia y continuidad de siglos. Tal vez su nombre deber铆a ser “Justa Creencia de la Verdadera Aspa”.

Ricardo Mascheroni


 


 





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