OPINIÓN de Amy Goodman El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habló este martes con la prensa antes de abordar el helicóptero presidencial y dijo: “No creo que necesitemos una guerra más amplia en Medio Oriente. Eso no es lo que estoy buscando”. Pero una guerra más amplia es precisamente lo que Biden está exacerbando al respaldar sin reservas la brutal ofensiva que Israel está llevando a cabo contra Gaza y los 2,3 millones de palestinos que están atrapados allí. Los llamamientos para un alto el fuego inmediato están en aumento y, aunque el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, prometió que la guerra será prolongada, Estados Unidos, como principal proveedor de armas de Israel, podría detener los bombardeos con una simple llamada telefónica. De no ser así, la guerra de mayor alcance que Biden espera evitar parece cada vez más plausible. Una potencial escalada del conflicto se desencadenó a raíz del reciente asesinato de tres reservistas del Ejército estadounidense que se enc