Compañeros, compañeras, amigos, amigas, pobladores, trabajadores y autoridades locales: desgraciadamente estaré ausente en este acto conmemorativo. Hoy, a 31 años de haber enterrado a Rodrigo, todavía seguimos viviendo en busca de la verdad y la justicia. Detalle del mural dedicado a Rodrigo Rojas de Negri en Washington D. C.