Después de que un embarazo adolescente los separara, una familia en Rwanda se reencontró Nyiranzavugimana Florence, joven madre del distrito de Karongi con su hijo a la espalda, vende servicios de dinero móvil. © UNFPA/Alain Mwizerwa KARONGI, Rwanda– Cuando Nyiranzavugimana Florence tenía 19 años, quedó embarazada inesperadamente. Al principio, la familia y los amigos la rechazaron y la sometieron a la vergüenza, el aislamiento y el estigma que demasiado a menudo sobreviene a los embarazos no planificados de adolescentes. Los estereotipos de que se trata de niñas no casadas e irresponsables con “moral laxa” suelen dominar la óptica de la sociedad en torno al embarazo no planificado. No obstante, la verdad es que todas las mujeres están en riesgo, y la desigualdad de género, la violencia sexual, la falta de acceso a la atención de salud sexual y reproductiva y la pobreza son los factores que impulsan el problema. Según el Informe sobre el Estado de la Población Mundial de 2022 del UNFP