OPINIÓN de Emilio Cafassi , Argentina El pasado domingo intenté exponer dos hipótesis que hoy retomaré en breves líneas para desarrollar otros aspectos del tema. En momentos de debate (pospuesto) de los proyectos de las leyes SOPA y PIPA, el FBI las aplicó de facto como si ya existieran, mediante el cierre del sitio Megaupload y el encarcelamiento de sus dueños y directivos (en Nueva Zelanda) en una extensión de lo que EEUU viene haciendo en el mundo con su política diplomática y bélica: violar las leyes nacionales e internacionales y sembrar el terror para luego intentar naturalizar ese estado de cosas y doblegar toda posible resistencia. En este caso, se trata de la ofensiva más importante contra Internet, la privacidad y la libertad de expresión (en su breve historia masiva) que compromete seriamente, en caso de institucionalizarse o bien aplicarse violentamente, el futuro de nuestra relación con la producción y consumo del conocimiento, la cultura, la información y la interacc