etcétera.- ¿Qué debemos utilizar para el trabajo periodístico. Facebook o Twitter? ¿Cuándo usar una u otra? Las cinco principales diferencias de acuerdo con Silvia Cobos, periodista española, promotora del BCN MediaLab, son:
1) 800 millones de usuarios en Facebook contra 100 en Twitter en todo el mundo: muchas personas con conexión a Internet están en Facebook. Hay 15 millones de españoles en Facebook y 3 en Twitter (en México se habla de 30 millones de personas, de acuerdo con Elizabeth Esfahani, ejecutiva de Facebook; y un poco más de 4 millones 300 mil en Twitter, de acuerdo con Mente Digital). Para distribuir contenidos, Facebook tiene una mayor audiencia, pero se considera que en Twitter hay personas-nodos que se especializan en algo y con miles de seguidores, por eso se habla de una red de “influyentes” (o influenciadores, como se les llama en México).
2) Mucha información pública en Twitter contra casi nada en Facebook: en Twitter es fácil tener acceso a cualquier conversación, en tanto que en Facebook la mayor parte de los perfiles tienen restricciones de personalidad. Facebook tienen contenidos más relacionados con la vida personal de sus usuarios, en tanto que en Twitter sólo es posible ver una pequeña biografía de cada usuario, y su contenido son los mensajes. Por esa razón es más fácil monitorerar temas en Twitter que en Facebook.
3) Contacto con fuentes: en Facebook para ser “amigos” debe haber reciprocidad, es decir los dos usuarios deben aceptarse mutuamente; en Twitter no hay que pedir permiso a nadie (excepto si sus tuits son privados). Por otra parte, en Facebook es posible enviar un mensaje privado a cualquier usuario, en tanto que en Twitter la otra persona debe seguirte para lo cual debes enviarle un mensaje público para que te envíe su dirección de correo electrónico y establecer contacto.
4) Intrusión contra segmentación: en Facebook, las menciones de otros son percibidas como intrusiones (por eso la gente ha cerrado sus perfiles), en tanto que en Twitter la gente sólo muestra lo que dice.
Usualmente, las personas en Twitter no han necesitado conocer a otra persona para seguirlo y sólo era necesario que le interesaran los temas sobre los que publicara (“tuiteara”). De esa forma se han creado comunidades virtuales en torno a intereses similares y Facebook quedaba limitado a las relaciones personales: aunque se podía seguir a marcas y páginas, no se podía seguir a personas.
Esto último cambió cuando se implementó la “suscripción” (imitación, tal vez, de la práctica en Twitter), es decir que ya es posible “seguir” las informaciones “públicas” de un usuario que así lo decida; esta característica es muy usada por periodistas, sobre todo por norteamericanos que han visto incrementadas las suscripciones a sus perfiles.
En principio los medios tenían varias cuentas en Twitter (una por sección: deportes, política, etecétera), ahora hacen lo mismo en Facebook.
Para los periodistas que piensan en sí mismos como una marca, Facebook ofrece más ventajas por la mayor audiencia que pueden conseguir. Con la “suscripción”, los periodistas ya no tiene que tener un perfil privado y una página profesional, disyuntiva que nunca tuvieron en Twitter.
5) Ritmo para actualizar: visibilidad contra rapidez.
En general los usuariuos de Facebook publican con menos rapidez y es posible ser rechazado por los suscriptores si las noticias aparecen con mucha frecuencia en sus timeline (o línea del tiempo).
En Twitter, en contraparte, el llamado “tiempo real” es una característica fundamental. Puedes publicar inmediatamente una noticia sin que eso sea mal visto, por el contrario. Hace tiempo los periodistas con presencia en Twitter tenían ventaja sobre sus compañeros. Hoy ya están casi todos allí.
La información corre a gran velocidad en Twitter, en tanto que en Facebook lo que publiques durará más tiempo visible aunque se publiquen menos noticias.
1) 800 millones de usuarios en Facebook contra 100 en Twitter en todo el mundo: muchas personas con conexión a Internet están en Facebook. Hay 15 millones de españoles en Facebook y 3 en Twitter (en México se habla de 30 millones de personas, de acuerdo con Elizabeth Esfahani, ejecutiva de Facebook; y un poco más de 4 millones 300 mil en Twitter, de acuerdo con Mente Digital). Para distribuir contenidos, Facebook tiene una mayor audiencia, pero se considera que en Twitter hay personas-nodos que se especializan en algo y con miles de seguidores, por eso se habla de una red de “influyentes” (o influenciadores, como se les llama en México).
2) Mucha información pública en Twitter contra casi nada en Facebook: en Twitter es fácil tener acceso a cualquier conversación, en tanto que en Facebook la mayor parte de los perfiles tienen restricciones de personalidad. Facebook tienen contenidos más relacionados con la vida personal de sus usuarios, en tanto que en Twitter sólo es posible ver una pequeña biografía de cada usuario, y su contenido son los mensajes. Por esa razón es más fácil monitorerar temas en Twitter que en Facebook.
3) Contacto con fuentes: en Facebook para ser “amigos” debe haber reciprocidad, es decir los dos usuarios deben aceptarse mutuamente; en Twitter no hay que pedir permiso a nadie (excepto si sus tuits son privados). Por otra parte, en Facebook es posible enviar un mensaje privado a cualquier usuario, en tanto que en Twitter la otra persona debe seguirte para lo cual debes enviarle un mensaje público para que te envíe su dirección de correo electrónico y establecer contacto.
4) Intrusión contra segmentación: en Facebook, las menciones de otros son percibidas como intrusiones (por eso la gente ha cerrado sus perfiles), en tanto que en Twitter la gente sólo muestra lo que dice.
Usualmente, las personas en Twitter no han necesitado conocer a otra persona para seguirlo y sólo era necesario que le interesaran los temas sobre los que publicara (“tuiteara”). De esa forma se han creado comunidades virtuales en torno a intereses similares y Facebook quedaba limitado a las relaciones personales: aunque se podía seguir a marcas y páginas, no se podía seguir a personas.
Esto último cambió cuando se implementó la “suscripción” (imitación, tal vez, de la práctica en Twitter), es decir que ya es posible “seguir” las informaciones “públicas” de un usuario que así lo decida; esta característica es muy usada por periodistas, sobre todo por norteamericanos que han visto incrementadas las suscripciones a sus perfiles.
En principio los medios tenían varias cuentas en Twitter (una por sección: deportes, política, etecétera), ahora hacen lo mismo en Facebook.
Para los periodistas que piensan en sí mismos como una marca, Facebook ofrece más ventajas por la mayor audiencia que pueden conseguir. Con la “suscripción”, los periodistas ya no tiene que tener un perfil privado y una página profesional, disyuntiva que nunca tuvieron en Twitter.
5) Ritmo para actualizar: visibilidad contra rapidez.
En general los usuariuos de Facebook publican con menos rapidez y es posible ser rechazado por los suscriptores si las noticias aparecen con mucha frecuencia en sus timeline (o línea del tiempo).
En Twitter, en contraparte, el llamado “tiempo real” es una característica fundamental. Puedes publicar inmediatamente una noticia sin que eso sea mal visto, por el contrario. Hace tiempo los periodistas con presencia en Twitter tenían ventaja sobre sus compañeros. Hoy ya están casi todos allí.
La información corre a gran velocidad en Twitter, en tanto que en Facebook lo que publiques durará más tiempo visible aunque se publiquen menos noticias.
