OPINIÓN de Leonora Esquivel.-
Hace 10 años Francisco Vásquez, chileno, y yo, mexicana, coincidimos en una ciudad muy lejana a nuestros respectivos países: Barcelona. Ahí yo me involucré en el movimiento de los derechos de los animales y Francisco me regaló un portal para publicar artículos o traducciones de otras organizaciones.
Nunca imaginamos que llegaríamos a ser la organización más grande en países de habla hispana, que seríamos internacionales. Nuestro objetivo inicial fue brindar información clara y en español a quienes se interesaban por estos temas.
Él con una maestria en New Media, yo haciendo un doctorado en Filosofía, poco sabíamos de visión empresarial , organizaciones no gubernamentales, gestión. Pero teníamos muy clara una sóla cosa: ayudar a los animales.
Ser testigo de la explotación animal en fábricas de carne, leche, huevos, conocer acerca de los circos con animales, vivir en un país con una fuerte afición a la tauromaquia, habituarse a las caminatas de las señoras con pieles, nos obligó a ser responsables de algo más que señalar y enjuiciar. Debíamos actuar.
Creímos que este portal brindaría información que ayudaría a la gente a ampliar su conciencia, y poco a poco descubrimos que la gente no sólo quería un cambio individual, sino ser parte de la transformación de la sociedad en general.
El reto fue enorme. Nos enfrentamos a tareas que no nos eran familiares, tuvimos que desarrollar habilidades que no usábamos pero estaban ahí. Como decía Sócrates, el alumno no tiene más que recordar, ya cuenta con todo el conocimiento. Y creo que eso es lo maravilloso de ser un activista. cuando te apasionas por una causa estas dispuesto a ir más allá de tus límites y descubres que eres capaz de mucho más de lo que siempre has creído.
AnimaNaturalis es más que una organización internacional de derechos para los animales, es un ejemplo de cómo una sola persona sí puede hacer la diferencia. Es muestra de que se puede dejar la indiferencia por la empatía y de que cuando estás convencido de algo, la distancia física no es un límite. Esta organización agrupa a más de 150 personas de varias ciudades y países, y tiene más de 70 mil simpatizantes en todo el mundo de habla hispana.
Es una prueba de que trabajando juntos logramos más cambios, porque cada uno hace aportaciones esenciales a la lucha por la justicia.
AnimaNaturalis es un corazón latiendo al ritmo de los nuevos tiempos, los que claman derechos para los animales. Dejemos atrás nuestra visión antropocéntrica donde los humanos somos superiores para tener una actitud más humilde, donde simplemente somos diferentes, pero esta característica no nos da permiso para avasallar y explotar a otros seres sintientes, sino que nos hace responsables de su bienestar, sobretodo cuando en nosotros recae su explotación durante siglos.
En lo personal, AnimaNaturalis es una forma de vivir, es el medio por el cuál me di cuenta que no todos los humanos son indiferentes hacia el sufrimiento animal, es un ejemplo de cómo basta la voluntad para cambiar lo que no nos gusta, es la fuerza de creación llevada a la acción, es el empoderamiento del individuo más allá de países, gobiernos, partidos, religiones.
Quiero agradecer muy especialmente en este espacio a Francisco Vásquez, presidente de AnimaNaturalis por ser mi compañero en este sueño que soñamos juntos, hace diez años y cada día, y a todos y cada uno de los miembros de esta organización por su profesionalismo, dedicación, entrega, y sobretodo, por saberse capaces de tener en sus manos el poder de lograr grandes cambios para los animales. Esto es un regalo y una responsabilidad.
¡Felicidades AnimaNaturalis por tus 10 años haciendo de este, un mundo más justo para todos!
http://www.animanaturalis.org/home/mx
Hace 10 años Francisco Vásquez, chileno, y yo, mexicana, coincidimos en una ciudad muy lejana a nuestros respectivos países: Barcelona. Ahí yo me involucré en el movimiento de los derechos de los animales y Francisco me regaló un portal para publicar artículos o traducciones de otras organizaciones.
Nunca imaginamos que llegaríamos a ser la organización más grande en países de habla hispana, que seríamos internacionales. Nuestro objetivo inicial fue brindar información clara y en español a quienes se interesaban por estos temas.
Él con una maestria en New Media, yo haciendo un doctorado en Filosofía, poco sabíamos de visión empresarial , organizaciones no gubernamentales, gestión. Pero teníamos muy clara una sóla cosa: ayudar a los animales.
Ser testigo de la explotación animal en fábricas de carne, leche, huevos, conocer acerca de los circos con animales, vivir en un país con una fuerte afición a la tauromaquia, habituarse a las caminatas de las señoras con pieles, nos obligó a ser responsables de algo más que señalar y enjuiciar. Debíamos actuar.
Creímos que este portal brindaría información que ayudaría a la gente a ampliar su conciencia, y poco a poco descubrimos que la gente no sólo quería un cambio individual, sino ser parte de la transformación de la sociedad en general.
El reto fue enorme. Nos enfrentamos a tareas que no nos eran familiares, tuvimos que desarrollar habilidades que no usábamos pero estaban ahí. Como decía Sócrates, el alumno no tiene más que recordar, ya cuenta con todo el conocimiento. Y creo que eso es lo maravilloso de ser un activista. cuando te apasionas por una causa estas dispuesto a ir más allá de tus límites y descubres que eres capaz de mucho más de lo que siempre has creído.
AnimaNaturalis es más que una organización internacional de derechos para los animales, es un ejemplo de cómo una sola persona sí puede hacer la diferencia. Es muestra de que se puede dejar la indiferencia por la empatía y de que cuando estás convencido de algo, la distancia física no es un límite. Esta organización agrupa a más de 150 personas de varias ciudades y países, y tiene más de 70 mil simpatizantes en todo el mundo de habla hispana.
Es una prueba de que trabajando juntos logramos más cambios, porque cada uno hace aportaciones esenciales a la lucha por la justicia.
AnimaNaturalis es un corazón latiendo al ritmo de los nuevos tiempos, los que claman derechos para los animales. Dejemos atrás nuestra visión antropocéntrica donde los humanos somos superiores para tener una actitud más humilde, donde simplemente somos diferentes, pero esta característica no nos da permiso para avasallar y explotar a otros seres sintientes, sino que nos hace responsables de su bienestar, sobretodo cuando en nosotros recae su explotación durante siglos.
En lo personal, AnimaNaturalis es una forma de vivir, es el medio por el cuál me di cuenta que no todos los humanos son indiferentes hacia el sufrimiento animal, es un ejemplo de cómo basta la voluntad para cambiar lo que no nos gusta, es la fuerza de creación llevada a la acción, es el empoderamiento del individuo más allá de países, gobiernos, partidos, religiones.
Quiero agradecer muy especialmente en este espacio a Francisco Vásquez, presidente de AnimaNaturalis por ser mi compañero en este sueño que soñamos juntos, hace diez años y cada día, y a todos y cada uno de los miembros de esta organización por su profesionalismo, dedicación, entrega, y sobretodo, por saberse capaces de tener en sus manos el poder de lograr grandes cambios para los animales. Esto es un regalo y una responsabilidad.
¡Felicidades AnimaNaturalis por tus 10 años haciendo de este, un mundo más justo para todos!
http://www.animanaturalis.org/home/mx
