Los campos de Cacanda, Mussungue y la zona de Dundo, en el norte de Angola, albergan a más de 32.000 personas que han huido de la vecina provincia de Kasai, en República Democrática del Congo (RDC).
"Desde que el pasado mes de abril los refugiados comenzaron a llegar a los campos provisionales, hemos establecido dos clínicas y colaboramos con el hospital pediátrico de Chitato", señala la organización. El hospital se centra en el cuidado de niñas y niños desnutridos agudos de entre las personas refugiadas y de la comunidad local.
"Además, nuestros equipos se preparan ahora para ofrecer atención médica a los refugiados en cuanto se trasladen al nuevo campo de Lovua, a unos 100 kilómetros de Dundo", dice MSF.
Estos se encargan de referir a centros hospitalarios a aquellos pacientes que lo necesiten, y ofrecen programas de salud obstétrica y neonatal, programas ambulatorios de desnutrición, servicios de salud mental y programas de violencia sexual.
Bruno Fonseca
Los equipos de la organización médico humanitaria Médicos Sin Fronteras han llevado a cabo más de 15.000 consultas en los últimos cuatro meses."Desde que el pasado mes de abril los refugiados comenzaron a llegar a los campos provisionales, hemos establecido dos clínicas y colaboramos con el hospital pediátrico de Chitato", señala la organización. El hospital se centra en el cuidado de niñas y niños desnutridos agudos de entre las personas refugiadas y de la comunidad local.
"Además, nuestros equipos se preparan ahora para ofrecer atención médica a los refugiados en cuanto se trasladen al nuevo campo de Lovua, a unos 100 kilómetros de Dundo", dice MSF.
Estos se encargan de referir a centros hospitalarios a aquellos pacientes que lo necesiten, y ofrecen programas de salud obstétrica y neonatal, programas ambulatorios de desnutrición, servicios de salud mental y programas de violencia sexual.