Denuncian la pasividad de los Gobiernos ante el calentamiento global.
Miles de personas se movilizaron contra el cambio climático y el declive de la biodiversidad en Bélgica y Francia.
Denunciaron la pasividad de los Gobiernos ante el calentamiento global y fenómenos meteorológicos, y exigieron más acciones para salvar la tierra y biodiversidad.
Pancartas, banderas y un sinfín de lemas se han podido ver y oír en Bruselas, capital belga, donde miles de personas salieron a las calles, para denunciar la pasividad de los gobiernos ante el calentamiento global y fenómenos meteorológicos. Los manifestantes aprovecharon la marcha para también exigir justicia social, a dos semanas de las elecciones generales en Bélgica.
En París, capital de Francia, varios miembros del movimiento internacional ‘Extinction Rebellion’, creado en 2018 en el Reino Unido, se manifestaron en la plaza de Trocadero, cerca de la torre Eiffel, donde esparcieron sangre falsa para alertar del declive de la biodiversidad y promover la acción directa no violenta para frenar el cambio climático.
El último informe de los expertos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la biodiversidad, publicado el pasado lunes, ha alertado a los ecologistas y movimientos sociales para combatir el flagelo del cambio climático. Según el informe, un millón de especies, de un total de 8 millones, están bajo amenaza de extinción, muchas de ellas en las próximas décadas. La situación es tan alarmante que hasta ha obligado al secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, iniciar en Nueva Zelanda una gira por varios países de Oceanía con el objetivo de concienciar sobre el tema.
Asimismo, alertó de que la voluntad política para combatir el cambio climático se está desvaneciendo, y que los países no están al día de los objetivos de reducción de gases contaminantes definidos en los Acuerdos de París
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