Acabar con el desequilibrio de poderes entre hombres y mujeres es la base de la ley sueca que prohíbe la compra de servicios sexuales, un modelo abolicionista en el que pone los ojos el PSOE en su camino por acabar con la explotación sexual.
Con motivo del Día Internacional de la Mujer, el próximo 8 de marzo, el embajador de Suecia en España, Teppo Tauriainen, explica en una entrevista a Efe las líneas principales de la ley, aprobada en 1999 y que fue pionera en su visión abolicionista de la prostitución.