En EEUU, un tiroteo en una escuela primaria de Texas deja 21 muertos, dos adultos y 19 niños; además de cuatro heridos, en el segundo mayor tiroteo que se produce en un colegio en esta década. Los hechos se produjeron en la localidad de Uvalde, cuyos alumnos son de mayoría hispanos por su cercanía con la frontera con México. El atacante, cuyas motivaciones de momento se desconocen, fue abatido más tarde por la Policía.
"El tirador ha sido identificado como Salvador Ramos, un varón de 18 años que residía en Uvalde. Se cree que abandonó su vehículo y entró en la escuela primaria Robb de Uvalde con una pistola, y quizá también tuviera un rifle", declaró Greg Abbott, el Gobernador de Texas.
Con las banderas a media asta, el presidente de EE.UU., Joe Biden tras su gira por Asia, dio un discurso a la nación, preguntando cuándo su país se plantará ante el "lobby" de armas.
"¿Por qué estamos dispuestos a vivir con esta carnicería? ¿Por qué seguimos permitiendo que esto ocurra? ¿Dónde, en el nombre de Dios, está nuestra columna vertebral para tener el coraje de afrontar y plantar cara a los grupos de presión? Es hora de convertir este dolor en acción. Es hora de actuar", declaró el presidente Biden, tras varias tragedias sucesivas, diez días después de que en Búfalo un supremacista blanco matara a 10 personas en un tiroteo racista.
El pasado domingo, se produjo otro tiroteo en el metro de Nueva York. La policía ha detenido al supuesto atacante, Andrew Abdullah, de 25 años, que enfrentará cargos por la muerte de Daniel Enríquez, de 48, asesinado a tiros en una estación de metro de Manhattan.
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