OPINIÓN de Teodoro Rentería Arróyave
A Silvia, mi amor de vida, en su día onomástico. Felicidades en compañía de los hijos, los nietos, demás familiares y amigos. Un ósculo de amor.
Cómo es su compromiso, la Organización de las Naciones Unidas para Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO, nos da a conocer su Informe anual, adelantado, porque no espera el término del año correspondiente, sobre los asesinatos de periodistas en el mundo.
El título de dicho comunicado no podría ser más lacerante, cuando afirma que “la impunidad prevalece en los últimos 14 años, en que fueron asesinados más de 1,200 periodistas en el mundo”.
En efecto, la UNESCO presentó su informe anual en el que destaca que los asesinatos de periodistas en el mundo quedan impunes en su gran mayoría de casos y precisa, entre 2006 y 2020 más de 1200 comunicadores fueron asesinados por cumplir con su trabajo de informar.
Los datos revelaron que la tasa de impunidad, horror, es del 86 por ciento en los crímenes de representantes de medios de comunicación a nivel global, además, reportó un incremento en los crímenes de mujeres periodistas.
Y no sólo eso, lo grave, agrega, es que nueve de cada diez casos de asesinato a periodistas, están en la más oprobiosa impunidad.
Los profesionales de la información, agrega el comunicado, sufren diariamente diversos crímenes que es necesario visibilizar, a saber: intimidaciones, insultos, acoso -presencial y digital-, censura, amenazas, detenciones arbitrarias, secuestros, torturas y asesinatos.
La lista se completa con los periodistas a que han tenido que recurrir al exilio o al desplazamiento interno forzado. Estas situaciones crean ambientes de miedo que favorecen, por ejemplo, la autocensura, precisa el Informe de la UNESCO.
Además, precisa que entre 2020 y 2021, al menos, 117 periodistas fueron asesinados por su profesión; sin embargo, la UNESCO señala que en 2022 ya fueron asesinados 66 periodistas hombres hasta el 30 de septiembre.
Las regiones más mortíferas para los periodistas fueron América Latina y Caribe y, en menor medida, Asia-Pacífico.
Sólo para ilustrar a la contabilidad de la UNESCO, les damos a conocer las cifras lacerantes de los crímenes de periodistas en nuestro México.
Durante la actual administración federal del presidente Andrés Manuel López Obrador, suman 66 asesinatos: 52 periodistas; 3 locutores; 4 trabajadores de prensa; 4 familiares y 1 amigo de comunicadores, y 2 escoltas.
El compromiso del gremio organizado de México, que preceden la Federación de Asociaciones de Periodistas Mexicanos, FAPERMEX, y el Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo, CONALIPE, es seguir en la lucha contra la vergonzosa impunidad. No existe otro camino para contrarrestar el ominoso fenómeno, más que llevar ante los tribunales a los autores intelectuales y materiales de dichos execrables crímenes.
