Acaban viviendo con miedo, controladas, humilladas y amenazadas por sus parejas
A sus 27 años Sara ya ha dejado atrás dos relaciones de maltrato. Con su testimonio quiere ayudar a otras chicas a detectar esas señales que deben activar las alertas. Comportamientos que, en España, una de cada tres no sabe reconocer como abusivos. Y bastan unos minutos en la calle para conocer historias de jóvenes que habían normalizado la violencia psicológica a las que la sometía su pareja. Por eso, el encontrarse cara a cara con una víctima ayuda a abrir los ojos. Un 20 % de los jóvenes niega la violencia de género.
Atlas