OPINIÓN de Rafael García Almazán / Kabila.- No hay vuelta de hoja, mientras la cultura en otros países está considerada como un activo primordial, aquí en el mejor de los casos se valora como algo ocioso, algo añadido, de importancia relativa. Y eso lo demuestra este gobierno, como en otras muchas cosas, con las políticas que aplica. Política de pauperización, también en la cultura, política de subida del IVA, política de artículo de lujo. En definitiva, política de recortes. Para este gobierno pepero, al igual que la enseñanza, la dependencia y la sanidad, la cultura o la investigación son un mero lujo. Quien pueda que se lo pague y quien no, que se apañe. Esto es lo que hacen, olvidándose de los principios más elementales del Estado del Bienestar. Apoyar a la cultura es propio de franceses o de suecos, los españoles nos dedicamos a cosas serias. Por ejemplo, a la hostelería, a la construcción y a otras artes mayores, eso con suerte, que si no, ya se sabe cuál es la dedicación princ