Más de un millón de personas han tenido que huir de sus hogares ante la crisis en Níger, Camerún y Chad
LAGO CHAD: Informe sobre la situación
•elmercuriodigital ▫ El conflicto armado entre Boko Haram y diversas fuerzas armadas se expande desde Nigeria hasta los países vecinos de Níger, Camerún y Chad. Se trata de una de las peores crisis humanitarias que enfrenta África hoy en día.Nigeria: se necesita una acción de gran escala y largo plazo para paliar la crisis humanitaria en el norte del país
En su primera visita oficial a Nigeria, el presidente del CICR, Peter Maurer, instó a la comunidad internacional y a otros organismos humanitarios a reforzar la acción para responder a las devastadoras consecuencias que tiene la crisis humanitaria en la región de Lago Chad.
Al visitar la ciudad de Maiduguri (nordeste del país), que es el epicentro de los enfrentamientos entre Boko Haram y el ejército de Nigeria, el presidente del CICR expresó su preocupación por la magnitud de las necesidades de ayuda humanitaria, así como por las horrendas secuelas mentales y físicas que la violencia deja en la población.
"Comunidades enteras han huido de sus aldeas y soportado terribles sufrimientos. Los pobladores están traumatizados, sin hogar, sin pertenencias, sin ingresos y sin educación para sus hijos. ¿Qué futuro les espera? Necesitan mucho más apoyo del que el CICR puede darles y, sin embargo, somos la única organización presente en muchos de los lugares más afectados. El problema es grave y requiere que le prestemos suma atención", dijo el señor Maurer.
El conflicto ha traspasado las fronteras de Nigeria y afecta los países vecinos de Chad, Camerún y Níger. Se calcula que un millón y medio de personas se han desplazado, mayormente en el interior de Nigeria.
El señor Maurer señaló que no hay soluciones rápidas. "Aunque mañana mismo cesaran los enfrentamientos, se necesitarán años de inversiones y ardua labor para reconstruir los medios de sustento y los servicios, superar el trauma y recuperar cierta normalidad."
En Abuya, el presidente del CICR se reunió con altos funcionarios para analizar el conflicto. "Con la llegada de un nuevo Gobierno, Nigeria tiene la oportunidad real de abordar las causas profundas de la violencia. Deberá abocarse con tenacidad a esa tarea para lograr resultados fructíferos y necesitará el apoyo de los Estados de la región y de la comunidad internacional en su conjunto. Por nuestra parte, estamos decididos a reforzar la ayuda que prestamos a las víctimas de la violencia", añadió el señor Maurer.
El CICR solicita a los donantes 60 millones de francos suizos (65 millones de dólares estadounidenses) adicionales para duplicar, por lo menos, sus actividades humanitarias en los cuatro países afectados. En estrecha colaboración con los abnegados voluntarios y empleados de la Cruz Roja de Nigeria, el CICR utilizará los fondos para distribuir alimentos entre más de un millón de personas, mejorar el acceso al agua potable en beneficio de los más necesitados y prestar asistencia de salud, incluidos servicios especializados de cirugía de guerra.
