ACNUR pide una rápida implementación de las medidas de apoyo a personas refugiadas aprobadas por la UE
•elmercuriodigital ▫ GINEBRA.- ACNUR acoge con beneplácito el anuncio del Consejo Europeo de aumentar notablemente los recursos para la ayuda humanitaria a los países vecinos de Siria así como la decisión del Consejo de Justicia y Asuntos de Interior de la UE de reubicar a 120.000 personas más.
“El plan de reubicación no pondrá fin al problema, pero puede ser el principio de la solución”, dijo António Guterres, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados. “Es un paso importante para estabilizar la situación, pero aún queda mucho por hacer. El plan sólo puede funcionar si, en los puntos de entrada a Europa, se crean sólidas instalaciones para recibir, dar asistencia, registrar e identificar a las personas. Estas instalaciones deben tener capacidad para gestionar la media de 5.000 personas al día que llegan por mar. Asimismo, deben poder ofrecer a las personas que necesitan protección internacional una alternativa creíble a los actuales caóticos viajes con los que intentar cruzar frontera tras frontera, estando a merced de los traficantes de personas”. Este programa, que resulta limitado para las ingentes necesidades actuales, deberá ponerse en marcha rápidamente. Para que el sistema funcione, se ha de proporcionar igualmente apoyo efectivo a aquellos que no precisen de protección internacional para que puedan retornar en condiciones dignas.
Asimismo, ACNUR da la bienvenida al anuncio de que se va a facilitar la tan necesitada financiación para los países de primera acogida. “Son muchas las emergencias de refugiados en Oriente Medio y África con escasa financiación, situación que deja a los refugiados en condiciones tan precarias, ante las que muchos optan por desplazarse de nuevo” –declaró António Guterres. “Las personas no dejarán de buscar seguridad y una forma de sobrevivir en lugares más lejanos si no se abordan las causas de raíz del desplazamiento forzado”.
En relación al refuerzo del control fronterizo en las fronteras exteriores de la Unión Europea, ACNUR insiste en que la gestión de las fronteras debe ir acorde a la legislación nacional, internacional y de la UE, incluida la garantía del derecho a solicitar asilo.
ACNUR expresa su decepción ante el hecho de que no se hayan propuesto más medidas, aparte de la reubicación, para crear más vías legales para que los refugiados puedan llegar a encontrar seguridad en Europa. ACNUR insta a un aumento rápido y sustancial de las oportunidades legales para que los refugiados accedan a la UE, como un incremento de las plazas de reasentamiento y de admisión humanitaria, la reunificación familiar, el patrocinio privado, la concesión de visados humanitarios y de estudiante. Según una valoración de ACNUR, uno de cada diez refugiados sirios necesita ser reasentado, lo que supone un total de 400.000 personas. Sería conveniente que la comunidad internacional en su conjunto adopte el tipo de respuesta excepcional que se ha empleado en otras crisis humanitarias. Sin estas vías, se deja a los refugiados sin opciones, y consecuentemente hay pocas probabilidades de que surtan efecto los esfuerzos internacionales para acabar con la trata y tráfico de personas.
ACNUR ha reforzado sus operaciones en los países afectados por los flujos de refugiados y está dispuesto a apoyar todas las medidas de la Unión Europea, los Estados miembros y otras contrapartes, con el objetivo de responder de forma efectiva a la actual crisis.
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| © ACNUR/ F.Rainer |
“El plan de reubicación no pondrá fin al problema, pero puede ser el principio de la solución”, dijo António Guterres, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados. “Es un paso importante para estabilizar la situación, pero aún queda mucho por hacer. El plan sólo puede funcionar si, en los puntos de entrada a Europa, se crean sólidas instalaciones para recibir, dar asistencia, registrar e identificar a las personas. Estas instalaciones deben tener capacidad para gestionar la media de 5.000 personas al día que llegan por mar. Asimismo, deben poder ofrecer a las personas que necesitan protección internacional una alternativa creíble a los actuales caóticos viajes con los que intentar cruzar frontera tras frontera, estando a merced de los traficantes de personas”. Este programa, que resulta limitado para las ingentes necesidades actuales, deberá ponerse en marcha rápidamente. Para que el sistema funcione, se ha de proporcionar igualmente apoyo efectivo a aquellos que no precisen de protección internacional para que puedan retornar en condiciones dignas.
Asimismo, ACNUR da la bienvenida al anuncio de que se va a facilitar la tan necesitada financiación para los países de primera acogida. “Son muchas las emergencias de refugiados en Oriente Medio y África con escasa financiación, situación que deja a los refugiados en condiciones tan precarias, ante las que muchos optan por desplazarse de nuevo” –declaró António Guterres. “Las personas no dejarán de buscar seguridad y una forma de sobrevivir en lugares más lejanos si no se abordan las causas de raíz del desplazamiento forzado”.
En relación al refuerzo del control fronterizo en las fronteras exteriores de la Unión Europea, ACNUR insiste en que la gestión de las fronteras debe ir acorde a la legislación nacional, internacional y de la UE, incluida la garantía del derecho a solicitar asilo.
ACNUR expresa su decepción ante el hecho de que no se hayan propuesto más medidas, aparte de la reubicación, para crear más vías legales para que los refugiados puedan llegar a encontrar seguridad en Europa. ACNUR insta a un aumento rápido y sustancial de las oportunidades legales para que los refugiados accedan a la UE, como un incremento de las plazas de reasentamiento y de admisión humanitaria, la reunificación familiar, el patrocinio privado, la concesión de visados humanitarios y de estudiante. Según una valoración de ACNUR, uno de cada diez refugiados sirios necesita ser reasentado, lo que supone un total de 400.000 personas. Sería conveniente que la comunidad internacional en su conjunto adopte el tipo de respuesta excepcional que se ha empleado en otras crisis humanitarias. Sin estas vías, se deja a los refugiados sin opciones, y consecuentemente hay pocas probabilidades de que surtan efecto los esfuerzos internacionales para acabar con la trata y tráfico de personas.
ACNUR ha reforzado sus operaciones en los países afectados por los flujos de refugiados y está dispuesto a apoyar todas las medidas de la Unión Europea, los Estados miembros y otras contrapartes, con el objetivo de responder de forma efectiva a la actual crisis.
