Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como ANTONIO HERMOSA

Egipto: del sueño a la pesadilla

OPINIÓN de Antonio Hermosa    Un retoño de Mubarak u otro de los Hermanos Musulmanes: entre ambos polos –bien que desiguales en autoridad y poder- del ancien règime debía decantarse la elección del pueblo egipcio por su futuro presidente. ¡ Para ese viaje no necesitábamos alforjas revolucionarias !, habrán pensado las decenas de miles de personas que un año y medio atrás atestaban la Plaza Tahrir , cuando la incertidumbre del porvenir, tanto personal como del país, era lo único seguro y donde no estaban presentes los que hace unos días también la llenaban –los partidarios del hoy ganador-, cuando parecía que el golpe de Estado se consumaba y el candidato del ejército sería nombrado Presidente. Una sorpresa contenida en la sorpresa fue el delgado número de votos que decidieron la elección. Había sido un clamor sin duda acentuado por el contexto y ampliado por lo inesperado, un clamor que ya no exigía sólo pan, sino que, al socaire de su primera manifestación en Túnez, reclamab

Celebración gay: Tel Aviv como libertad

OPINIÓN de Antonio Hermosa    Tel Aviv es un rincón de Europa en Oriente Medio, quizá el único porque la Estambul europea sólo sabe a recuerdo y melancolía (y sus huellas en las capitales árabes, salvo las arquitectónicas, parecen haber sido anestesiadas o, sin más, engullidas, por el ogro islamista). Y ahora, cuando apenas puedo mirar a Europa a los ojos sin náusea, me congracio con ella mirando el espejo de Tel Aviv, esta maravillosa Colina de Primavera en la que lo maravilloso es menos lo que se ve que lo que se siente. Posiblemente no sea Tel Aviv la única ciudad israelí en la que podría haberse celebrado la semana de la “cultura gay”, aunque no, desde luego, en la Jerusalén religiosa , ese histórico cadáver viviente en el que ni siquiera la intensa y atropellada inyección de modernidad recibida en estos últimos años, que la hace reconocible como un lugar habitado por humanos , da para arrebatarle a la tenebrosa jauría ortodoxa la capacidad de decidir sobre la vida y la m

Siria, ¿sólo guerra civil?

OPINIÓN de Antonio Hermosa    ¿A quién le importa Siria? Fuera ya su actual órbita de todo vínculo con la primavera árabe , aunque al principio lo tuvo; perdido el eje democrático, si alguna vez lo hubo, el planeta sirio parece navegar solo por los espacios siderales del éter político arrastrando consigo a su solitario satélite, Líbano, hacia el mismo trágico destino común: la guerra civil. Mientras la sociedad internacional deshoja la margarita de la intervención humanitaria en refuerzo del bloqueo económico; mientras algunos de sus líderes se rasgan las vestiduras morales por cuanto acontece en el país árabe (en tanto otros dicen que tal como están las cosas así son y así deben ir); mientras se duda entre armar o no a los rebeldes; mientras se urden más planes de alto el fuego y se idealiza el acuerdo entre las partes, etc.; mientras todo eso tiene lugar, Bachar el Assad, digno émulo de su padre aunque heredero por defecto, se consagra a mantener viva la leyenda familiar

Salustio y el mérito

OPINIÓN de Antonio Hermosa    A Carmen Pérez López La vida de Salustio, transcurrida entre el 86 y el 35 del siglo I antes de nuestra era, es la de un actor-testigo de las últimas décadas de la República romana, aquéllas en las que se precipita su descomposición y se acelera su ruina. Polibio la había saludado como obra maestra de la ingeniería política por mezclar en su dosis justa los tres principios de gobierno en uno solo, y explicaba la bondad del resultado, el gobierno mixto , cual si de un héroe homérico o de un rey oriental se tratara, por sus éxitos militares además de por su luna de miel con la libertad. Empero, apenas cuatro años después de la muerte del cónsul e historiador, tras la densa cortina de polvo producida por su  desmoronamiento, aparecía claramente configurado el régimen unipersonal de Octavio, primer paso en la formación de un imperio que, salvo en contados instantes, devoró hasta el romanticismo vinculado a su recuerdo. Cuando en la última etapa de s

Holocausto y seguridad

OPINIÓN de Antonio Hermosa    ¿A qué da derecho el Holocausto? A los judíos, a transformar la seguridad en instinto y en política, y su derecho a la defensa en primaria y perentoria obligación de garantizarla: a desconfiar de todos y de todo cuando aquélla está en juego. A pensar que ningún momento pacífico, de armisticio en el odio por la razón que fuere, es definitivo: que ninguna ideología antisemita es pasajera, como ninguna profesión de fe pro judía o pro israelí es absoluta; que ninguna declaración de amistad o protección al pueblo judío, fuera de Israel o incluso dentro, es concluyente. De otra manera: a actuar pensando que aquella parte de la historia que llenó de odio el corazón no judío sigue viva, y que ni siquiera actos como el propio holocausto han logrado enterrarla. A los no judíos, como también a los propios judíos, el Holocausto, con su dosis de odio tranquilo, pacífico y metabolizado; su castigo a una raza en lugar de a ciertos hechos; su sustitución de la soci

El arzobispo infernal

OPINIÓN de Antonio Hermosa    ¡No hay derecho! Que no, que no lo hay. ¡Pues no va el obispo de Alcalá de Henares, que bien merecería por eso ser elevado a cardenal-ya, y condena a los homosexuales al Infierno! Yo me huelo que hay gato encerrado en esto; estoy convencido de que como en su organización no hay dios que no lo sea, quieren ellos solitos, más algunos descarriaos de por aquí abajo, gozar de todos los infernales placeres que en dicha plaza por tradición se despachan. Pero el sinvivir que aun así tengo se debe a que, como gran científico que soy, también me pregunto: ¿y si por casualidad no tengo razón, y si mi hipótesis es falsa y no hay gato que valga? ¿Y si salvo el papa -¡vamos, por la pinta sobre todo!- y algún que otro embestidor más, los demás son gente decente que va a misa cuando la dice y de flor homosexual no tiene ni un pelo de gato? Pues sepa el señor obispo –insisto: para mí ya cardenal, y si para los demás no, será por pura envidia- que en tal caso su impe

Suicidio de un jubilado

OPINIÓN de Antonio Hermosa    Dimitris Christulas tenía 77 años y una gran rabia en el alma cuando tomó la decisión, tan pecaminosa en cualquier religión monoteísta, de quitarse la vida mediante un tiro en la sien. Al menos, y en un último alarde humanista, tuvo así ocasión de demostrarles a los tres dioses únicos, o mejor, a sus bandadas de sectarios y matones, a quién pertenecía su vida. Dimitris Christulas se suicidó bajo un ciprés, árbol que a tal condición, y por ende de metáfora de vida, añade la de símbolo del espíritu en la naturaleza; en la Plaza Sintagma , es decir, Constitución , símbolo de las libertades humanas; y en Atenas , símbolo de la democracia europea en el pasado. Ni vida, ni libertad ni pasado que ilumina: su poder ya había caducado, eran los tres lados inertes de un escenario sin presente, lejano y acartonado que había periclitado cuando la bala atravesó la sien de ese farmacéutico griego, jubilado y endeudado hasta la próxima generación. Cómo pueda ser la vi

"Putináusea" rusa

OPINIÓN de Antonio Hermosa    A pocos días de las elecciones presidenciales rusas Vladimir Putin ha querido reunirse con su guardia pretoriana electoral y darse un baño de multitudes, pues si se lo hubiera querido dar de ideas la única que tiene –perpetuarse en el poder por los zares de los zares, amén - no le daría ni para una loción. Y así, a la sombra del padre Stalin, en el marco de la mejor escenografía soviética, y en medio de ciento treinta mil putinícolas que jaleaban sus berridos, se ha lanzado, como de costumbre en estos lances, a repartir amenazas a diestro y siniestro, unas veces concretando el blanco, otras mirando al tendido, pero siempre en nombre y defensa de la Madre Rusia , una de las consignas más siniestras de la escena internacional. De todos modos, que no se ilusione demasiado: fueron muchos más los que hace unos años reclamaron la santificación del padre Stalin, de modo que, visto de esa forma, la causa de la libertad, en Rusia, gana adeptos. Por lo demás,

El caso Siria: ¿Una promesa de libertad?

OPINIÓN de Antonio Hermosa      Si alguien se preguntara cuántos miembros han de pasar por una dinastía tiránica antes de que la comunidad internacional ponga remedio; o bien cuál es el número de muertos necesario para que ésta intervenga, estaría navegando en el puro vacío de la retórica. Detener la sangría no es sólo cuestión de voluntad, sino también de organización, y en este punto la actual está a merced del más bronco interés. Es decir, del Príncipe de los Príncipes, como bien se cuidó en subrayar Henry de Rohan allá por el siglo XVI; un poder frente al que la Justicia es un mero flatus vocis , cuando no un exabrupto; frente al que la Paz no es sino el príncipe azul de cualquier amante, y los muertos nada salvo un número que ni siquiera hay que contar, o, en el mejor de los casos, la prueba de quién manda en plaza. En la ciudad de Homs, la Humanidad se desangra estos días por su herida siria. Suman decenas los sacrificados, y miles los que en todo el país han sido víctima




">


ARCHIVOS

Mostrar más


OTRA INFORMACIÓN ES POSIBLE

Información internacional, derechos humanos, cultura, minorías, mujer, infancia, ecología, ciencia y comunicación

El Mercurio Digital (elmercuriodigital.es) se edita bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra información es posible




AI FREE: DIARIO LIBRE DE INTELIGENCIA ARTIFICIAL