OPINIÓN de Carola Chávez , Venezuela.- Llenaron de escombros sus calles en una protesta tan mutante como incoherente. Cada día sus motivos son otros aunque el motivo real siempre es el mismo: su voto vale más que el de las mayorías, así que “Chávez -perdón- Maduro vete ya.” Detrás de sus barricadas, el terror. Vecinos incitando a vecinos a identificar a ”los sapos” y sapo puede ser cualquiera que la histeria vecinal señale. Sapo es la madre de un niño febril que necesita un pediatra y reclama su derecho a salir del encierro. Sapo es la señora de servicio del piso 3, y la del 7 y si a ver vamos todas las señoras de servicio porque en el reino del terror los negros no son sospechosos sino culpables. Sapo es el vecino que no cacerolea por no angustiar a sus hijos y a otros hijos de otros padres que están convencidos de que a cacerolazos y a golpes se resuelven las cosas. Sapo es todo lo que huela a cordura en el reino del terror. Detrás de barricadas que ayer eran para tumbar al gobier