Por Génesis Anangonó Chalaco* Denisse, Dannya, Yamileth, Leonela, Rosa, Skarlett, Mishell, Kerly y Jeyner son nueve niñas, de entre 8 y 13 años, quienes habitan cerca de las zonas petroleras ubicadas en las provincias amazónicas, principalmente Sucumbíos y Orellana. Las niñas presentaron una acción de protección en contra del Ministerio de Energía y Recursos Naturales no Renovables y el Ministerio del Ambiente y Agua por las afectaciones que los mecheros de gas causan sobre su derecho al agua, a la salud, a la soberanía alimentaria y a un ambiente sano y ecológicamente equilibrado. La Corte Provincial de Sucumbíos falló a favor de las niñas el 26 de enero de 2021, seis meses después, emitió la sentencia escrita donde declara que el Estado ecuatoriano vulneró “los derechos a la salud, al agua potable y a la alimentación como derechos humanos fundamentales e irrenunciables”. Este retraso en la sentencia se da pese a que la Ley Orgánica de Garantías Jurisdiccionales y Control Consti