CSIC •elmercuriodigital ▫ Durante unos 250.000 años, los humanos han empleado conjuntamente ocre rojo y conchas marinas con fines ornamentales y artísticos, lo que contribuyó al desarrollo del pensamiento simbólico de la especie. La integración de diversas líneas de investigación apunta a que su uso combinado tuvo además una importancia directa en la evolución humana. Esta y otras conclusiones aparecen recogidas en un artículo del investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Carlos Duarte. El científico asegura que la ingesta accidental de pigmentos ocres y una alimentación que incluía moluscos y otros mariscos habrían aportado los nutrientes esenciales para el desarrollo temprano del cerebro y habrían mejorado la adecuación biológica. El marisco es rico en ácido docosahexaenoico (DHA por sus siglas en inglés), un ácido graso esencial poliinsaturado de la serie omega-3, con un papel importante en el desarrollo del sistema nervioso, el cerebro y la v