OPINIÓN de Teodoro Rentería Arróyave Cuando los enemigos, longevos y renovados, de la Revolución Castrista se frotaban las manos de gusto al suponer que la serie de reformas que Cuba está llevando a cabo en su decisión de renovación para el desarrollo, se trataba de una regresión al capitalismo galopante, Raúl Castro Ruz, general de Ejército, Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista y Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, aclaró en la clausura de la Primera Conferencia Nacional del Partido y precisamente en el “Año 54 de la Revolución”, la férrea voluntad del pueblo de mantenerse dentro del sistema socialista. Una fue la decisión, de acuerdo a la convocatoria librada por el VI Congreso, de evaluar con objetividad y sentido crítico el trabajo del Partido, así como determinar con voluntad renovadora las transformaciones necesarias para situar a la nación a la altura que demandan las actuales circunstancias, nunca para traicionar los principios hi