Chile tiene hoy la mayor flota de autobuses eléctricos de América Latina y el Caribe. A principios de este año, 200 unidades salieron a las calles de Santiago como parte de un plan para reducir las emisiones y la contaminación del aire. El país se ha comprometido a tener un sistema de transporte público completamente eléctrico para 2040. “Para enfrentar decididamente el cambio climático, la electromovilidad es fundamental. Es un salto de calidad hacia un sistema de transporte más limpio, eficiente y sustentable”, dice Carolina Schmidt, ministra del Medio Ambiente de Chile y presidenta de la próximo Conferencia sobre Cambio Climático de las Naciones Unidas (COP25). En diciembre, Chile será anfitrión de la COP25 y liderará una de las negociaciones más difíciles de nuestro tiempo: tratar de obtener compromisos nacionales de reducción de emisiones más ambiciosos, con el fin de mantener el calentamiento global por debajo del umbral de 1,5 °C. El transporte sostenible es fundamental para l