OPINIÓN de Ramón Cotarelo / Palinuro.- El País sigue disparando con calibre grueso. Los separatistas (nada de independentistas, que suena bien) crean expectativas falsas. Su partidismo lo ciega tanto como a su musa política, Sáenz de Santamaría, y le hace decir lo que no debiera. ¿Por qué son falsas las expectativas? Bien porque quienes las crean no quieran en realidad satisfacerlas (y eso sería atribuirse dotes telepáticas) o porque se sabe que el incumplimiento será por causa de fuerza mayor, pues, sea cual sea el resultado, seguirá aplicándose el 155 y la situación de excepcionalidad. Las empresas seguirán fuera y los presos, dentro. El mensaje es "pueden ganar, pero no podrán satisfacer las expectativas porque no les dejaremos".