OPINIÓN de Teodoro Rentería Arróyave , México.- Creímos erróneamente que habíamos terminado, en esta primera etapa, con la serie sobre la histórica Reforma Constitucional que creo o fundo o dio paso a la nueva entidad federativa llamada Ciudad de México. Nada más fuera de la realidad, el tema, el cambio sociológico, da para más y no sabemos hasta cuando se podría agotar, todo los cambios sociales son dinámicos y por tanto inacabables. Ahora queremos abordar el reto de la composición de la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México, cuyos futuros integrantes, en base a sus conocimientos, estudios, análisis, no exentos de las más profundas discusiones, nos entregarán la Constitución Política de la Ciudad de México. En especial, es de exigirse que primordialmente se invite a la inteligencia mexicana en esa materia, para que forme mayoría en la composición de dicha Asamblea, sería imperdonable que se impusieran en ese cuerpo colegiado los intereses de grupo o partidistas. Podemos, en pr