OPINIÓN de Carola Chávez, Venezuela.- Hace un año, American Airlines dejó se volar a Venezuela porque, según ellos, el gobierno malvado se negaba a cancelar una deuda inflada de $600 millones de dólares, calculados sobre la venta de pasajes en bolívares a tasa del dólar paralelo y que reclaman se les cancelen a la tasa de SICAD. Es decir, que American Airlines, empresa que se van a llevar las hormiguitas, el año pasado, antes de irse demasiado, vendía, por ejemplo, pasajes a Miami de 750 dólares en cien mil bolos, que si los calculamos a la tasa Sicad, que es lo que ellos pretenden que se les cancele, serían $8.300 por cada pasaje. Un negocio redondote, pensaron. Como el gobierno maluco chavista, siempre atentando contra la libre empresa, revisó esas cuentas y no le cuadraron, American, a modo de chantaje idiota, redujo sus vuelos a su mínima expresión. Esta semana, sorpresivamente y sin que las condiciones por las que se fueron hubieran cambiado, American anunció su regreso apuradi