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Plataforma feminista del Ateneo de Madrid: “Más de dos millones de mujeres son maltratadas sistemáticamente por los hombres con quienes conviven”

En lo que va de año han muerto a manos de sus parejas 52 mujeres. Según las asociaciones de mujeres el número de muertes asciende a 62 y el de mujeres maltratadas es de 2 millones

Silmar Jiménez, AmecoPress.- Criticas y mejoras a la Ley Integral contra la violencia de género fueron puestas sobre la mesa, este 22 de octubre, por parte de las mujeres de la Plataforma Feministas del Ateneo de Madrid a fin de que se brinde mayor protección a las víctimas.


Según las estadísticas oficiales en lo que va de año han muerto a manos de sus parejas 52 mujeres. Según las asociaciones de mujeres el número de muertes asciende a 62 y el de mujeres maltratadas es de 2 millones.

Lidia Falcón, Carmen López Loriente y Pao Tanarro, representantes de la Plataforma, acompañadas por el presidente del Ateneo de Madrid, Carlos París, hicieron eco de su indignación ante la situación de violencia hacia las mujeres, niños y niñas que sigue produciéndose en el país y presentaron una serie de propuestas para una reforma de la ley que paradójicamente “no ha sido incluida en ninguno de los programas de los partidos políticos a vísperas del próximo proceso electoral”.

Falcón, como portavoz de la Plataforma, considera necesario que se tome en cuenta, dentro de la Ley, a los niños y niñas ya que siempre se habla de las mujeres maltratadas o muertas a manos de sus parejas o compañeros de vida, pero no existen cifras sobre la cantidad de niños y niñas desaparecidas, asesinadas o abusadas sexualmente y que entran a engrosar el número de víctimas de violencia de género.

Para la Plataforma de Mujeres Feministas del Ateneo de Madrid “es necesario que las organizaciones de mujeres pidan a las instituciones –a las que tienen la obligación de garantizar la seguridad de los ciudadanos- que tomen medidas para evitar que se sigan produciendo muertes y remover conciencias ante la desesperante indiferencia social que existe”, aseguró su portavoz.

En ese sentido se hizo un llamado de atención, además, a las mujeres organizadas ya que según Lidia Falcón “estamos más volcadas a ponerle ‘árnica’ a las víctimas que a exigirles responsabilidades a las instituciones que tienen que protegernos o a buscar medidas de protección eficaces”.

Asimismo criticaron duramente el trato que le brindan los representantes de organismos policiales a las mujeres que acuden a denunciar a quienes les maltratan lo que hace que cada vez sean menos quienes lo hagan al ver que se le resta importancia a su situación.

Una Ley con carencias

Según el análisis llevado a cabo por las mujeres de la Plataforma la actual Ley Integral para la Violencia de Género sufre de errores y carencias “una serie de agujeros por los que se han colado una serie de maltratadores, violadores y asesinos que han quedado impunes”, afirmó Falcón.

Por otro lado, afirmó que la Ley “está mal redactada y adolece de arrogancia y pomposidad” lo que la hace poco comprensible. “Un ejemplo es que luego de una dramática y ampulosa exposición de motivos, la Ley pasa en su artículo primero en donde reza ‘La presente Ley tiene por objeto actuar contra la violencia que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre estas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia’


En torno a este primer artículo Falcón señaló que la primera carencia de la Ley es que solo protege a las esposas o compañeras legítimas del maltratador, es decir, “ni la amante ocasional, ni la novia, ni la hermana, ni la madre, ni la suegra, ni la cuñada, ni la vecina, ni la desconocida en la calle a la que se agrede, ni hablar de las prostitutas agredidas por proxenetas y clientes”, expresó.

Otra carencia “que actúa de manera perversa en contra de las víctimas” se encuentra donde se habla de la ‘violencia como una manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres’ “es decir que hay que demostrar fehacientemente que la violencia se produce porque realmente existe una situación de discriminación y desprecio hacia las mujeres por parte de los hombres que las maltratan”, dijo Falcón.

En ese orden de ideas la representante de la Plataforma indicó que 55 por ciento de las denuncias por maltrato se archiva sin más trámite de 45 por ciento restante llevado a juicio “la mayoría acaba en sentencia condenatoria porque el acusado acuerda con el fiscal y acepta la declaración de culpabilidad y la condena, que en estos casos es menor de dos años, y nuestro siempre caritativo código penal indica que las condenas de menos de dos años no se cumplen, se pueden sustituir por trabajos en beneficio de la comunidad, que no sabemos en que consisten”, manifestó Falcón.

De todas las denuncias se condena solo al 38 por ciento de los culpables. Esto sin hablar de los incumplimientos de las condenas y órdenes de alejamiento y sin contar con que sólo el 10 por ciento de las mujeres víctimas denuncian.

Por otro lado se habló de los casos de las llamadas ‘denuncias falsas’, este punto se erige como una vulneración más hacia las mujeres ya que “existe una orden interna en los juzgados de estudiar con cuidado las denuncias y en caso de sospecha de denuncias falsas se inicien diligencias contra la mujer”, comentó Falcón.

Esto ha generado desconfianza por parte de las instituciones, indefensión y desánimo por parte de las mujeres en lo que respecta a denunciar; “siempre una mujer que denuncia es desconfiable”, expresó la feminista.

21 puntos

La propuesta entregada por la Plataforma Feminista del Ateneo de Madrid consta de 21 puntos entre los que destacan, entre otros:

Respeto a los letrados y letradas que defienden a las víctimas en la exigencia a los funcionarios de la Administración de Justicia en general, un trato adecuado.

Respecto a las medidas legislativas

Que se separe físicamente a la víctima de su agresor en las declaraciones y juicios orales.

Que los jueces no admitan afirmaciones inadecuadas e impropias que denoten los perjuicios que abrigan, y se abstengan de manifestar expresiones despreciativas y humillantes contra las mujeres de marcado carácter machista.

Que se graben en video todas las actuaciones judiciales desde el momento de la presentación de la denuncia.

Que se ordene el ingreso en prisión de los maltratadores cuando su peligrosidad así lo aconseje, especialmente cuando se incumpla la orden de alejamiento.

Que se añada el delito de ‘apología del terrorismo sexista’

Se presentó además la propuesta de un cambio de nombre a la Ley ya que según expresó Carlos París, presidente del Ateneo, se produce una confusión de terminología al utilizar la palabra ‘genero’. París propuso que en el mismo se debía apelar a la “violencia contra la mujer y los niños, que se indique quien sufre la violencia”.

Finalmente se instó a los colectivos de mujeres a unir propuestas para nutrir el documento y llegar a cambios en la Ley estudiados y aprobados por las mujeres organizadas.




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