En Côte d'Ivoire, tras la segunda vuelta de la elección presidencial del 28 de noviembre, hay una situación extremadamente tensa. Ante el empeoramiento de la situación humanitaria, el CICR refuerza su acción en favor de las personas detenidas, heridas y desplazadas, así como de los refugiados en países limítrofes.
Viva preocupación por la situación humanitaria
El callejón sin salida político en Côte d'Ivoire ha dado lugar a manifestaciones violentas, arrestos y desplazamiento de población. Miles de personas, temerosas de que empeore la situación de seguridad, se han desplazado en el interior del país, en tanto que otras, en mayor número, ya están en países limítrofes, en particular en Liberia, y en menor medida, en Guinea.
El CICR está muy preocupado por la situación actual y despliega sus esfuerzos para garantizar el respeto de la misión médica de la Cruz Roja y de los principios humanitarios, en particular la atención a los heridos, la protección de las personas detenidas, y la necesidad de los miembros de familias separadas de restablecer el contacto con sus familiares.
«Estas últimas semanas, los voluntarios de la Cruz Roja de Côte d'Ivoire trabajaron denodadamente a fin de prestar los primeros auxilios a las personas heridas», pone de relieve la jefa de la delegación regional del CICR en Abiyán, Dominique Liengme. «Por lo general, han sido respetados y nadie ha obstaculizado su acceso a los heridos ni las evacuaciones de los casos más graves».
Apoyo a los socorristas y las instalaciones sanitarias
Desde el 26 de noviembre, con el apoyo del CICR, los socorristas de la Cruz Roja de Côte d'Ivoire han prestado asistencia, en todo el país, a 590 personas heridas, de las cuales unos 300 casos graves fueron evacuados a instalaciones sanitarias. El CICR pone a disposición de la Cruz Roja de Côte d'Ivoire ambulancias, conductores, botiquines de primeros auxilios y material de comunicación.
El CICR entregó lotes de apósitos a diez instalaciones sanitarias, cuyo material escaseaba a causa del número de heridos. Cada lote de apósitos permite tratar por lo menos a 100 heridos.
Tras solicitud del Centro Nacional de transfusión de sangre, que tropezaba con problemas logísticos y de seguridad, el CICR transportó más de 150 bolsas de sangre a los centros hospitalarios de Tumodi, Yamussukro, Buaké y Korhogo.
Acción en favor de las personas arrestadas y detenidas
«Durante este período difícil y tenso, los delegados del CICR intensifican sus visitas regulares en los lugares de detención en todo el país», explica Dominique Liengme.
El CICR hace gestiones ante las autoridades competentes respecto de todas las denuncias de arrestos que le son comunicadas, a fin de esclarecer la suerte corrida por las personas de que se trata. Después, el CICR intenta visitar a esas personas cuanto antes, para cerciorarse de que sus condiciones de detención se avienen con las normas nacionales e internacionales.
Así pues, desde el 26 de noviembre, el CICR ha visitado a más de 300 personas detenidas en diversos lugares de detención provisionales y permanentes, en todo el país. Los delegados del CICR también han efectuado más de 150 llamadas telefónicas, a fin de informar a las familias sobre la suerte corrida por sus familiares detenidos.
Asistencia a la población desplazada
Los equipos del CICR y de la Cruz Roja de Côte d'Ivoire distribuyeron lonas alquitranadas, ropa, baterías de cocina, mosquiteros y material para la higiene (baldes, lavatorios y jabón) a más de 2.700 personas desplazadas en Duekué, Danané y Sinfra, en el oeste y en la región centrooccidental del país.
Entre esos desplazados, más de 2.000 personas en busca de seguridad pasan la noche en la misión católica en Duekué. «Esta afluencia ha sobrepasado rápidamente la capacidad sanitaria de la misión», según el encargado del programa de agua y saneamiento del CICR, Jacques Maradan. Así pues, el CICR ha construido 16 letrinas y diez duchas, ha rehabilitado ocho puntos de abastecimiento de agua, así como la torre de agua que abastece el lugar con agua potable. Voluntarios de la Cruz Roja formados por el CICR celebran sesiones de sensibilización para la higiene de base entre los desplazados.
Agua potable y restablecimiento del contacto entre familiares para los refugiados
En Liberia, en el condado de Nimba, donde el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ha tomado los datos de más de 15.000 personas, unos veinte voluntarios de la Cruz Roja de Liberia ayudan a las personas separadas de sus familiares a ponerse en contacto con sus parientes por teléfono, a fin de que les comuniquen que están sanos y salvos. Una de sus tareas principales es identificar y tomar los datos de los niños no acompañados, después buscar a sus familiares. Hasta la fecha, los voluntarios han tomado los datos de seis niños que buscan a sus padres.
El CICR también envió a un equipo de ingenieros que rehabilitó cuatro fuentes de agua potable en Duoplay Town, Kentorkporglay y Sertontuo, donde hay más de 1.000 refugiados alojados en viviendas de residentes locales. «Por dondequiera que fue nuestro equipo, comprobó una falta de acceso al agua potable y a las letrinas», declaró uno de los miembros del equipo del CICR, Albert Jamah.
En Guinea, en la región de Bossou (sudeste), han llegado, hasta la fecha, más de 200 refugiados. Un equipo conjunto del CICR y de la Cruz Roja de Guinea pudo establecer contactos telefónicos entre nueve niños no acompañados cuya identidad se comprobó en ese lugar y sus familiares.
*Foto Dioulabougou (Danané) ICR/V. Grabscheid