AGENCIAS. - Varios miles de personas se manifestaron el domingo en Moscú enarbolando carteles con mensajes como "Los fascistas deshonran a Rusia" y "No al fascismo" en protesta por varios episodios de violencia étnica que han sacudido recientemente al país, informa ASSOCIATED PRESS.
La marcha en el centro de la capital fue organizada por grupos civiles en respuesta a los altercados del 11 de diciembre, cuando miles de nacionalistas eslavos y seguidores de equipos deportivos saltaron a la calles gritando "¡Rusia es para los rusos!".
Los alborotadores se enfrentaron con policías y golpearon a miembros de grupos étnicos de la región del Cáucaso.
La violencia ocurrida frente al Kremlin sembró dudas sobre la capacidad del gobierno para frenar una creciente ola de xenofobia. La Policía arrestó a cientos de personas para prevenir más altercados en los siguientes días en San Petersburgo y Moscú.
"En Rusia, cada ciudad o poblado es multiétnico y cualquier ola de nacionalismo en Rusia destruirá el país", dijo el líder de la oposición Vladimir Ryzhkov a los participantes de la marcha.
El prominente activista en defensa de los derechos humanos Lev Ponomaryov dijo a The Associated Press que es importante que las autoridades admitan que el nacionalismo existe en Rusia.
"Deberíamos ser claros: Sí, hay nacionalismo ruso, es un problema que enfrenta la sociedad y deberíamos remediarlo", dijo.
El presidente ruso Dmitry Medvedev criticó el viernes a la Policía por actuar con poca rapidez a la hora de dispersar a los alborotadores.
Aunque los rusos miembros de minorías étnicas representan cuatro quintos de la población rusa, de 142 millones, en el país viven 180 grupos étnicos. En la región del Cáucaso hay al menos 100 grupos étnicos, incluidos chechenos, quienes han realizado dos guerras separatistas contra Moscú tras el colapso en 1991 de la Unión Soviética.
La marcha en el centro de la capital fue organizada por grupos civiles en respuesta a los altercados del 11 de diciembre, cuando miles de nacionalistas eslavos y seguidores de equipos deportivos saltaron a la calles gritando "¡Rusia es para los rusos!".
Los alborotadores se enfrentaron con policías y golpearon a miembros de grupos étnicos de la región del Cáucaso.
La violencia ocurrida frente al Kremlin sembró dudas sobre la capacidad del gobierno para frenar una creciente ola de xenofobia. La Policía arrestó a cientos de personas para prevenir más altercados en los siguientes días en San Petersburgo y Moscú.
"En Rusia, cada ciudad o poblado es multiétnico y cualquier ola de nacionalismo en Rusia destruirá el país", dijo el líder de la oposición Vladimir Ryzhkov a los participantes de la marcha.
El prominente activista en defensa de los derechos humanos Lev Ponomaryov dijo a The Associated Press que es importante que las autoridades admitan que el nacionalismo existe en Rusia.
"Deberíamos ser claros: Sí, hay nacionalismo ruso, es un problema que enfrenta la sociedad y deberíamos remediarlo", dijo.
El presidente ruso Dmitry Medvedev criticó el viernes a la Policía por actuar con poca rapidez a la hora de dispersar a los alborotadores.
Aunque los rusos miembros de minorías étnicas representan cuatro quintos de la población rusa, de 142 millones, en el país viven 180 grupos étnicos. En la región del Cáucaso hay al menos 100 grupos étnicos, incluidos chechenos, quienes han realizado dos guerras separatistas contra Moscú tras el colapso en 1991 de la Unión Soviética.