AGENCIAS.- Unas 2.000 jpersonas jóvenes colombianas se congregaron el martes en la Comuna Trece para rechazar el asesinato, en ese deprimido barrio al noreste de Medellín, de un joven cantante de rap que pregonaba la causa pacifista, informa FRANCE RPESSE.
"Esta es una movilización de jóvenes de la ciudad que estamos a favor de la vida. Es un llamado a los violentos a los que les decimos que no admitimos más asesinatos, que dejen a los jóvenes dedicarse al arte y que ellos mismos idolatren la vida", dijo a la AFP Daniel Quiceno, uno de los organizadores.
Los manifestantes, entre los que se encontraba el grupo musical Son Batá, de la misma Comuna Trece, llevaban camisetas con un signo de prohibición a las armas. El pasado sábado por la noche, dos pistoleros asesinaron en ese barrio de Medellín al rapero Daniel Sierra, de 17 años, con lo que se elevó a cinco la cifra de jóvenes músicos víctimas de la violencia desde agosto del año 2009.
Las autoridades colombianas creen que el crimen se produjo porque el músico transitó por una zona controlada por grupos de delincuentes que establecen unas "fronteras invisibles" para evitar el ingreso en el sector de desconocidos.
La barriada, enclavada en las faldas de las montañas que rodean Medellín, es escenario de la lucha entre pandillas y narcotraficantes que pelean por el control del mercado de la droga en la ciudad y de las rutas de exportación hacia Centroamérica, El Caribe, México, Estados Unidos y Europa.
Imagen de la manifestación contra la violencia celebrada el martes 29 de marzo en la Comuna Trece, barrio de la ciudad colombiana de Medellín, en protesta por el asesinato del joven rapero pacifista Daniel Sierra.
"Esta es una movilización de jóvenes de la ciudad que estamos a favor de la vida. Es un llamado a los violentos a los que les decimos que no admitimos más asesinatos, que dejen a los jóvenes dedicarse al arte y que ellos mismos idolatren la vida", dijo a la AFP Daniel Quiceno, uno de los organizadores.
Los manifestantes, entre los que se encontraba el grupo musical Son Batá, de la misma Comuna Trece, llevaban camisetas con un signo de prohibición a las armas. El pasado sábado por la noche, dos pistoleros asesinaron en ese barrio de Medellín al rapero Daniel Sierra, de 17 años, con lo que se elevó a cinco la cifra de jóvenes músicos víctimas de la violencia desde agosto del año 2009.
Las autoridades colombianas creen que el crimen se produjo porque el músico transitó por una zona controlada por grupos de delincuentes que establecen unas "fronteras invisibles" para evitar el ingreso en el sector de desconocidos.
La barriada, enclavada en las faldas de las montañas que rodean Medellín, es escenario de la lucha entre pandillas y narcotraficantes que pelean por el control del mercado de la droga en la ciudad y de las rutas de exportación hacia Centroamérica, El Caribe, México, Estados Unidos y Europa.
Imagen de la manifestación contra la violencia celebrada el martes 29 de marzo en la Comuna Trece, barrio de la ciudad colombiana de Medellín, en protesta por el asesinato del joven rapero pacifista Daniel Sierra.
