Por Carlos Tena
Que nadie se rasgue las vestiduras, porque la noticia ni es alarmante, ni nueva. Tras el esc谩ndalo provocado por quienes dicen llamarse Acad茅micos de la Historia, cuyas colaboraciones y escritos sobre personajes y hechos relativos a los acontecimientos de todo tipo sucedidos en la vieja Hispania y sus alrededores, distan a帽os luz de la realidad, atribuyendo a genocidas y asesinos como Francisco Franco ep铆tetos eufem铆sticos como “autoritario”, resulta de lo m谩s normal que un colectivo como el PP se niegue a admitir hechos consumados.
El partido popular (heredero del m谩s puro estilo caudillista y que jam谩s conden贸 los cr铆menes de la dictadura) se niega a que en las Enciclopedias oficiales se conozca como tal al general que, traicionando la legalidad democr谩tica, las libertades individuales y colectivas, asesinando el 16 de Julio de 1936 a su compa帽ero el general Balmes (que se opon铆a al golpe), fue el causante de la mayor ola de cr铆menes contra la humanidad en los 煤ltimos siglos acaecidos en el sur de Europa.
M脕S DA脩INO, CORRUPTO, COBARDE Y MENTIROSO QUE AZNAR
Pero ¡ojo¡, que nadie se llame a enga帽o. De forma parecida se pronunci贸 Felipe Gonz谩lez en el diario mexicano Excelsior cuando le preguntaron si consideraba al gallego de Ferr0l un dictador. El Se帽or X respondi贸: “No puede decirse eso, Franco fue un militar algo autoritario“.
Claro que Felipe nunca combati贸 en la clandestinidad, excepto para defenestrar a los verdaderos socialistas del PSOE, ni fue enemigo de Franco. M谩s bien al contrario, Gonz谩lez imit贸 sus formas y maneras, sobre todo en la policia, la guardia civil y los medios de comunicaci贸n. Jam谩s hubo m谩s terrorismo de estado, tanto nepotismo y censura en RTVE, que durante la etapa del sevillano como presidente del gobierno.
Entre las muchas prohibiciones y separaciones de servicio que sufri贸 quien firma estas lineas, figura el veto a un espacio en 1988 que titul茅 “Francamente Hablando“, en el que bajo un prisma c贸mico, dejaba hablar desde el infierno al Caudillo, siempre comentando elogiosamente la politica de Felipe. No pudo soportarlo ni 茅l, ni Guerra, ni los directivos de la casa.
Gracias al PSOE, Franco sigue presente en la historia, como un adalid de las libertades.
Que nadie se rasgue las vestiduras, porque la noticia ni es alarmante, ni nueva. Tras el esc谩ndalo provocado por quienes dicen llamarse Acad茅micos de la Historia, cuyas colaboraciones y escritos sobre personajes y hechos relativos a los acontecimientos de todo tipo sucedidos en la vieja Hispania y sus alrededores, distan a帽os luz de la realidad, atribuyendo a genocidas y asesinos como Francisco Franco ep铆tetos eufem铆sticos como “autoritario”, resulta de lo m谩s normal que un colectivo como el PP se niegue a admitir hechos consumados.
El partido popular (heredero del m谩s puro estilo caudillista y que jam谩s conden贸 los cr铆menes de la dictadura) se niega a que en las Enciclopedias oficiales se conozca como tal al general que, traicionando la legalidad democr谩tica, las libertades individuales y colectivas, asesinando el 16 de Julio de 1936 a su compa帽ero el general Balmes (que se opon铆a al golpe), fue el causante de la mayor ola de cr铆menes contra la humanidad en los 煤ltimos siglos acaecidos en el sur de Europa.
M脕S DA脩INO, CORRUPTO, COBARDE Y MENTIROSO QUE AZNAR
Pero ¡ojo¡, que nadie se llame a enga帽o. De forma parecida se pronunci贸 Felipe Gonz谩lez en el diario mexicano Excelsior cuando le preguntaron si consideraba al gallego de Ferr0l un dictador. El Se帽or X respondi贸: “No puede decirse eso, Franco fue un militar algo autoritario“.
Claro que Felipe nunca combati贸 en la clandestinidad, excepto para defenestrar a los verdaderos socialistas del PSOE, ni fue enemigo de Franco. M谩s bien al contrario, Gonz谩lez imit贸 sus formas y maneras, sobre todo en la policia, la guardia civil y los medios de comunicaci贸n. Jam谩s hubo m谩s terrorismo de estado, tanto nepotismo y censura en RTVE, que durante la etapa del sevillano como presidente del gobierno.
Entre las muchas prohibiciones y separaciones de servicio que sufri贸 quien firma estas lineas, figura el veto a un espacio en 1988 que titul茅 “Francamente Hablando“, en el que bajo un prisma c贸mico, dejaba hablar desde el infierno al Caudillo, siempre comentando elogiosamente la politica de Felipe. No pudo soportarlo ni 茅l, ni Guerra, ni los directivos de la casa.
Gracias al PSOE, Franco sigue presente en la historia, como un adalid de las libertades.