El aumento de las tensiones entre Turquía y Chipre dio lugar ayer en el pleno del Parlamento Europeo a una acalorada discusión. La República de Chipre dio comienzo el pasado mes de octubre a las exploraciones de varios yacimientos submarinos encontrados en aguas territoriales chipriotas. Sin embargo, Turquía no reconoce la titularidad chipriota de esas aguas, contraviniendo la Convención de Naciones Unidas del Derecho del Mar -convención no ratificada por Turquía. Cumpliendo sus amenazas, Turquía envió la pasada semana un equipo de exploración escoltado por buques guerra.
El eurodiputado de Izquierda Unida Willy Meyer aclaró que, "no se trata tan solo de tensiones entre dos países, sino de claras amenazas de Turquía sobre Chipre, que se han materializado en el desplazamiento de buques de la marina turca, y que suponen un aumento innecesario de la tensión en la región".
"Son amenazas de Turquía, un país candidato, a Chipre, un Estado miembro de la UE, y por tanto, son amenazas al conjunto de la UE" puntualizó Meyer.
"Resulta intolerable la actuación de Turquía en contraposición con la actitud de la República de Chipre, que hace todos los esfuerzos para lograr una solución viable, pacífica y duradera al problema chipriota".
"Y así lo refleja la intervención ante la Asamblea General de las Naciones Unidas del presidente chipriota, Dimitris Christofias, que afirmó que la potencial exploración de gas natural e hidrocarburos en la Zona Económica Exclusiva de la República de Chipre beneficiará tanto a la comunidad grecochipriota como a la comunidad turcochipriota" señaló Meyer.
Asimismo, el responsable de Política Internacional de Izquierda Unida recordó al Comisario de Ampliación y Política de Vecindad de la UE, Stefan Füle, que Turquía no acepta ningún arbitraje internacional porque no reconoce el Tribunal de la Haya.
Para finalizar, Meyer señaló que "el Consejo Europeo, entre las condiciones previas del acceso de Turquía a la UE, estableció el cumplimiento y la firma de la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, cosa que a día de hoy Turquía no ha hecho".
El eurodiputado de Izquierda Unida Willy Meyer aclaró que, "no se trata tan solo de tensiones entre dos países, sino de claras amenazas de Turquía sobre Chipre, que se han materializado en el desplazamiento de buques de la marina turca, y que suponen un aumento innecesario de la tensión en la región".
"Son amenazas de Turquía, un país candidato, a Chipre, un Estado miembro de la UE, y por tanto, son amenazas al conjunto de la UE" puntualizó Meyer.
"Resulta intolerable la actuación de Turquía en contraposición con la actitud de la República de Chipre, que hace todos los esfuerzos para lograr una solución viable, pacífica y duradera al problema chipriota".
"Y así lo refleja la intervención ante la Asamblea General de las Naciones Unidas del presidente chipriota, Dimitris Christofias, que afirmó que la potencial exploración de gas natural e hidrocarburos en la Zona Económica Exclusiva de la República de Chipre beneficiará tanto a la comunidad grecochipriota como a la comunidad turcochipriota" señaló Meyer.
Asimismo, el responsable de Política Internacional de Izquierda Unida recordó al Comisario de Ampliación y Política de Vecindad de la UE, Stefan Füle, que Turquía no acepta ningún arbitraje internacional porque no reconoce el Tribunal de la Haya.
Para finalizar, Meyer señaló que "el Consejo Europeo, entre las condiciones previas del acceso de Turquía a la UE, estableció el cumplimiento y la firma de la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, cosa que a día de hoy Turquía no ha hecho".
