Ir al contenido principal

Caza y embustes a un solo "clic"

OPINI脫N de Julio Ortega   

Digo el nombre de la p谩gina en Internet porque creo necesario identificar a quien se alimenta de contenidos ruines y utiliza de forma torticera un soporte al que cualquiera puede tener acceso: Agrestezaza. Est谩 joyita del periodismo sectorial se dedica a glosar –utilizando la sangre como tinta- las haza帽as de los escopeteros, y oje谩ndola lo mismo nos puede lacerar los ojos la imagen del cad谩ver deun ciervo con su cabeza inerte entre las manos de su verdugo sonriente, que atragantarnos con la repulsi贸n al leer art铆culos de opini贸n donde se indica lo recomendable de que los ni帽os aprendan a utilizar cuanto antes las armas, y no para disparar a un plato o a una diana, claro, sino a criaturas vivas. Con lo anterior ya ser铆a suficiente para avergonzarse de que en nuestra especie existan ejemplares que disfruten con tales comportamientos y se afanen en ensalzarlos. Pero hay m谩s.

Han dado un nuevo paso hacia la degeneraci贸n en el que se al铆an la mendacidad con el empe帽o por intoxicar y que otra vez deja al descubierto su verdadera cala帽a: reproducen la informaci贸n de un peri贸dico gallego que habla de los incendios provocados en esta Comunidad as铆 como de sus consecuencias, incluyendo las terribles p茅rdidas humanas, y en la dificultad de encontrar normalmente a los pir贸manos responsables ¿D贸nde reside en este asunto la inmundicia de los administradores de Agrestecaza?: al acompa帽ar la noticia, titulada “A la caza del terrorista ecol贸gico”, de una conocida imagen en la que aparecen una pezu帽a y un pu帽o con las siguientes leyendas: “Animal Liberation – Human Liberation”.

¿Qu茅 es lo que pretenden insinuar o m谩s bien asegurar vincul谩ndola a esa rese帽a?, ¿que los criminales que prenden fuego a los montes son a la vez los ciudadanos que defienden la causa del respeto a los derechos de los animales? ¡Miserables! Es dif铆cil que puedan caer m谩s bajo. Adem谩s de ser unos individuos crueles, sanguinarios e inconmovibles ante el sufrimiento de un ser vivo, gente que considera deporte disparar a un animal que nada les ha hecho y se jactan en la barra de la taberna de sus v铆ctimas todav铆a calientes en el maletero o atadas al cap贸 de su coche, caen en la injuria a la que les lleva la rabia de no poder al fin justificar su 茅tica rastrera y el absoluto desprecio a la vida ajena que demuestran. Nada mejor en ese caso, piensan, que intentar asociar p煤blicamente con delincuentes abominables a quienes no son capaces de rebatir mediante argumentos cre铆bles y demostrables.

¿Ha habido un solo caso de incendio donde haya quedado determinada la autor铆a de un animalista? No. Sus causas antropog茅nicas se dividen en accidentales, negligentes e intencionales. En los primeros s铆 est谩n perfectamente documentados los provocados por la munici贸n de caza. En los segundos tambi茅n son conocidas las quemas de terrenos para as铆 obligar a presas, como pueden ser los conejos, a abandonar las madrigueras y de ese modo poder matarlas con mayor facilidad. Y entre los terceros, los deliberados, se encuentran acreditados los motivados por rencillas entre cazadores, un colectivo que por cierto hace gala con frecuencia de su car谩cter violento en sucesos de diferente naturaleza.

Vuelven a demostrar que su insidia no tiene l铆mite. ¿Qu茅 les parecer铆a a esta caterva de matachines de fin de semana ver el logo de una Federaci贸n Cineg茅tica en informaciones sobre atracos a mano armada, asesinatos de mujeres a manos de su pareja o violaciones con intimidaci贸n? Pero no hace falta caer en su mismo juego ruin ni usar su estilo repugnante, no es necesario recurrir al enga帽o para situarles en el lugar que les corresponde: una categor铆a de individuos da帽inos y orgullosos de su degradaci贸n dispuestos a todo, por m谩s rastrera que sea la idea, para poder seguir sembrando los montes de sufrimiento, muerte, contaminaci贸n y a menudo destrucci贸n. Los incendios matan a animales y a humanos. Os recuerdo, siniestros deportistas, que aqu铆 los 煤nicos que van dejando cad谩veres de unos y de otros por diversi贸n o por accidente sois vosotros. Y eso es incontestable, a ver si pod茅is decir lo mismo de vuestros asquerosos embustes.

ARCHIVOS

Mostrar m谩s


OTRA INFORMACI脫N ES POSIBLE

Informaci贸n internacional, derechos humanos, cultura, minor铆as, mujer, infancia, ecolog铆a, ciencia y comunicaci贸n

El Mercurio (elmercuriodigital.es), editado por mercurioPress/El Mercurio de Espa帽a bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra informaci贸n es posible